PerroHumano (FELIX y TU) -FINALIZADA-

°-.extra3.-°

El celular

—¡Lee Felix, ven acá ahora mismo!— pongo el "Lee" porque le gusto el apellido de MinHo ¡pero ese no es el punto! —¡¿donde esta mi MALDITO celular?!—

—no lo se...— dijo el encogiendose de hombro.

Apenas llego del trabajo y ahora tengo que tratar con mas trabajo para encontrar mi celular.

—yo lo deje encima de la mesita de noche al lado de mi cama, tu eras el único que estuvo aquí todo el tiempo que estuve trabajando, tu debes de saber— dije apuntándole y acercándome amenazadoramente a el.

—yo no lo se...— dijo mirando a los lados.

—le hiciste algo— dije con ese tono de pregunta pero no era pregunta, vi que abrió los ojos mas de lo normal —si le has hecho algo, prepárate para el periódico— dije dirigiéndome a la habitación, busque hasta por debajo del colchón y miré abajo de la cama, fui al baño y no estaba, fui a la cocina y encontré un desastre de agua, comencé a sospechar ,a asustarme y a estar enojada.

Encontré tres toallas encima de la meseta de la cocina, cerca del microondas. Me acerque y quite las toallas rápidamente y de ellas sale mi celular hacia el piso, lo recogí lentamente y estaba lleno de tierra y empapado de agua ,y lodo. Mire por la puerta donde da al jardín trasero y veía un hoyo allí. Mire a la puerta de la cocina enojada y hay vi a Felix con la cabeza asomada con cara de miedoso.

Tanto enojo tenía en mi interior que solo salieron lagrimas de mis ojos, camine rápido a mi habitación y me encerre allí.

Pasaron solo minutos y escucho la puerta abrirse.

—Felix, vete— dije tirada en mi cama. Escuche el sonido de un perrito triste, voltee a ver a Felix y fue mala desicion, tan tierno que nadie se enojaría, gruñe —¡bien!— dije para componer mi postura de antes, escuche pasos acercarse y se tiro al lado mio.

—la amo mucho y sabes, ¡perdón, no sabía que dejaba de funcionar, no se enojé conmigo!— dijo el como suplica.

Inconscientemente sonreí y lo mire, acaricie su pelo y lo mire a los ojos —te perdonó—

—si!— y me abrazo, perro tonto, jaja.

Mi precioso Felix...