Especial 1: feliz día mamá

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(Leer hasta el final)

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(Leer hasta el final).

Tipo Katsuki.

Daisuke se marcho a la escuela, totalmente enfadado con su "madre" por haberlo regañado, estaba harto, siempre era lo mismo, siempre le pegaba por hacer algo mal (que generalmente era por contestarle de mala manera).
Odiaba que no lo escuchara cuando hablaba, que dijera que nunca hace nada cuando se la pasa barriendo o haciendo limpieza, odia que le de tantas cosas por hacer, ¡Mierda, que no es una sirvienta!

Odia el hecho de que su "madre" sea tan mal hablado que incluso a él lo regañaba por una pequeñez como es el decir inútil en una oración, odia que le preste más atención a otras cosas, que siempre este ocupado y no tenga tiempo para él, odia que comience a gritarle que iba tarde cuando aún faltaban treinta minutos para entrar (Su madre si que es muy puntual).

Al llegar a la escuela se sentó de mala gana en su asiento, chocando su espalda agresivamente contra el respaldo de la silla. Sus compañeros lo rodearon preguntando con sus miradas que le pasaba, rápidamente entendieron cuando lo oyeron hacer un chasquido muy leve con los labios.

La clase comenzó, muy aburrida por cierto, del odioso maestro de literatura, ya sabia todo lo que el vejete decía, por lo que sin prestar atención se quedo dormido en la butaca, atento a cualquier mención de su nombre, más este nunca fue nombrado.

💜

Katsuki limpiaba las heridas de su cachorro, todo por que al chico se le ocurrió meterse en un problema comenzando así una pelea, en la cual acabo con raspones por sus codos y rostro. Bastante cabreado Daisuke jaloneo su brazo en un vago intento por soltarse del agarre de su "mamá".

-¡Que te estés quieto por la mierda!- grito Katsuki molesto, aunque en su interior preocupado de poder lastimarlo más.

-¡Que me dejes viejo!- Daisuke sin rendirse pataleo con fuerza en el aire.

-¡No me grites!- contraatacó el rubio a su hijo.

-¡Ya estoy harto, siempre te quejas de todo, no entiendes nada de lo que digo, no sabes nada, te odió! -exploto.

Katsuki no dijo nada, solo escucho como el niño se desahogaba de todo lo que, según él mismo, había sufrido.
Si por el fuera le habría dado unas cuantas cachetadas como su madre lo había hecho con él, raramente así a prendió (pero sabemos que no todas las personas son iguales, así que sabia que su pequeño lo único que haría seria guardarle más rencor), Daisuke al callar no comento nada más, viendo al rubio salir en completo silencio de su habitación una vez que guardo las cosas que había utilizado para limpiar sus heridas, eso lo asusto un poco.

Al día siguiente se levanto más temprano de lo normal, (a la hora que se para su mamá), el lugar estaba en calma, no lo escucho haciendo ruido, peleándose con los sartenes o gritóneando por las baratas noticias, haciéndole sentirse solo. Salio de casa sin desayunar, transcurrieron las clases con normalidad, solo quería ir a casa para jugar con Chea un pequeño perro pastor alemán que le regalaron sus tíos Kirishima y kaminari.

my damn intended/Terminada/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora