2:24 PM
-Lo recuerdas Isa? aquel día, ese maldito día en el que mis emociones se tornarían en un carrusel infinito del cual aún después de 3 años de relación no he podido salir-. Estaba pensando en voz alta mientras miraba el suelo -además de cambiar un te quiero por mil te amo, mis pensamientos comenzaron a retumbarme en las noches como dulces sueños, y ahí poco a poco fui entrelazando mi futuro con el tuyo, dejándome llevar por mi testarudo corazón, renunciando a la razón- Paro en seco a mi mente necesito concentrarme -fue sencillamente uno de mis mejores días a tu lado.- Termino
-Si, lo recuerdo como si hubiese sido apenas hace una o 2 semanas atrás pero, ¿paso hace tanto ya?- Hace una pausa -Realmente no pareciera, tengo en mi memoria ese día tan vívido, tan reciente, tan...- no termina su frase pero se que su respuesta la destrozó, un aura de dolor se asoma en su mirada y por mas que quiera ocultarla no puede.
-¿Que será de nosotros dentro de poco?-. Rompo el silencio, pero solo causo que el ambiente entre los dos empeore.
-Quisiera no averiguarlo, por ahora no quiero pensar,- corta mis esperanzas en mil pedazos, Y aunque estaba esperando una respuesta de fe en nuestra relación, se que ella no tiene cabeza para eso ahora - mas bien dime ¿te parece si almorzamos juntos?-. Pregunta con una falsa sonrisa; Su evasión al tema me duele.
-Claro, me encantaríaEstamos caminando por un largo pasillo del aeropuerto buscando la plazoleta de comidas, el silencio entre nosotros es desgarrador, estoy perdiendo toda esperanza y no quisiera pero esto me esta matando lentamente, y más sabiendo que estoy a punto de almorzar por ultima vez con ella (durante un tiempo indefinido).
Luego de un rato andando encontramos por fin una mesa desocupada, ella solo me sigue de cerca y cuando llegamos, Isa voltea una de sus maletas de mano, aquella que tenia colgada en un hombro, esa que usó durante los 2 años en los cuales estudiamos juntos, -¡agh!- grito en mi cabeza; retomo mi mirada a Isa la cual se encuentra sacando algo de la mochila, algo que parecen ser... ¡tazas de plástico llenas de comida!.
-Oye ya vengo dame unos segundos si?, no demoro-. Rompe el silencio con su dulce voz.
-Si, si ve.- respondo moviendo mi cabeza exageradamente.Ella solo sonríe y se va con las tacitas en dirección a un restaurante al parecer a pedir que le calienten la comida. Eso me hace recordar que Isa ha tenido esa costumbre desde que la conozco y es que siempre ha preferido sus almuerzos caseros antes que comer algo de un restaurante X.
Un rato después veo que Isa comienza a pispearme y a llamarme desde la barra del restaurante, cuando me volteó empieza a decir entre labios
-^Estoy aburrida^- pone su mano en la mejilla y blanquea los ojos en señal de sonmolencia.
- ^yo igual^-
Respondo con un gran bostezo, ella solo ríe.-^Ya casi voy, esperame^- Señala la silla a mi lado,-^No te vayas a ir^
Termina el espectaculo de señas y sonidos cuando una señora de unos 60 años aparece tras el mostrador con las tazas, Isa sonríe y da las gracias mientras le entrega un billete algo así como cuando tu abuela de daba dinero, a lo ilegal, la señora desaparece entre las cajeras mientras que Isa se acerca a nuestra mesa con rapidez, mientras camina hacia mi noto como mueve de manera exagerada los recipientes mientras los sopla con intensidad, así que me levantó de un salto y corro hacia ella.
-Deben estar calientes eh?-. Sonrío a Isa mientras le recibo la comida.
-Chistosito.Al llegar acomodamos los recipientes sobre la mesa y nos disponemos a comer, le dirijo una gran sonrisa a Isa.
-¿Que?-. Pregunta de manera fría, ella es todo un amor.
-Nada, nada, solo huele delicioso.- alzó mis brazos al aire en señal de paz. Ella me mira y una pequeña curva en su boca me indica que esta mas tranquila.Ya con la comida calentita y con esta hambre bestial, sin pensarlo 2 veces destapo esa vaina y mis ojos se abren como platos al ver lo que hay, mi plato favorito, ese que Isa adora hacer su especialidad. Los recuerdos me invaden y ese día vuelve a mi mente como un disparó.
ESTÁS LEYENDO
El amor es un cliché
Teen Fiction¿la realidad es verdaderamente lo que vemos, o es lo que queremos ver? La vida aburrida de Andrew cambiara por completo con la llegada de Isabelle una nueva estudiante con quien compartirá una historia de amor sin fronteras, en la que su propia ment...