El amor es un cliché

Junio - Verano (16/06/2017)

9:00 M
Como siempre en mis cumpleaños, recibo las mismas llamadas de las mismas personas, los mismos abrazos, las mismas felicitaciones de siempre, todo lo mismo, es algo un poco monótono cuando se trata de cumplir años pues me parece aburrido tener que recibir tantas felicitaciones de gente que no me habla en todo el año se podría decir que es algo hipócrita, te ves en la obligación de decirle cosas lindas y desearle cosas buenas a alguien que ni conoces. Pero bueno no todo es malo, siempre o en su mayoría de años siempre hay un toque de emoción o una sorpresa que causa que cumpleaños salgan de la monotonía y en este caso lo que va a hacer que mi cumpleaños número 19 sea único, o más bien quien lo va a hacer será Isabelle.

Bueno y se preguntarán ¿Quién carajo es ella? Así que para resumirlo Isabelle es para mí una persona bastante importante, pues ha llegado a arreglar mi vida de una manera que ni yo creía que se podía hacer, ha sido el inicio del cambio en mis relaciones amorosas, además de eso ella es inteligente y única; su físico para mi es como la mejor escultura que mis manos hayan podido tocar jamas, es como una preciosa obra de arte de la cual no puedo apartar la mirada; la he visto tantas veces durante estos cuatro meses que ya tengo grabado su cuerpo en mi cabeza. Solo puedo decir que es jodidamente hermosa y que todo en ella es perfecto, hasta sus defectos los veo como cualidades, es que joder hasta los pequeños detalles que tiene me vuelven loco, como lo son sus pómulos rosados, su amplia sonrisa, esa pequeña nariz respingada que baila al son de sus labios, sus ojos, sus jodidos ojos que son de un café penetrante e imponente, tan profundos como un océano y tan hechizantes como un embrujó, es una locura cada vez que la miro; y eso no es todo además de eso es delgada, alta (no tanto como yo), con una cintura para morirse tan pequeña como la de una avispa, su cabello es largo y lacio con unas cuantas ondas que le dan su toque sexy además es de un tono avellana muy peculiar pues tiene algunos vizos rubios y otros chocolate; todo esta maravilla de mujer viene adornada con un tono de piel canela, que es tan suave, tersa y delicada, pero a su vez es puede ser fuerte y sublime al igual que todo su ser, ella es simplemente hermosa.

Bueno bajándome un poco de la nube y volviendo al tema principal, esta gran mujer al parecer me tiene una sorpresa de cumpleaños, !que dedicada¡; ya no aguanto las ganas de ir a verla, pues la intriga me mata, el decirme que me tienen una sorpresa es prender automáticamente mi interruptor de ansiedad. Desearía saber así sea una pista del regalo para calmarme mas que sea un poco, pero ¡no! Ella no es feliz si no me deja iniciado, ¿que será? En serio que no tengo ni idea realmente, cuando ella quiere guardar un secreto, no hay poder humano que se lo saque, es como una tumba.

10:03 M
Ha pasado una hora desde que me desperté y no he dejado de pensar que en esta época de verano, donde básicamente tenemos el día completo para nosotros dos es algo inusual, pues gracias a los cientos de trabajos que nos deja la Universidad no tenemos mucho tiempo para ambos y más estando en tercer semestre donde el tiempo libre es muy escaso y por obvias razones no siempre es bueno distanciarnos tanto el uno del otro, así que lo mejor será que estos ratos juntos los aprovechemos tanto como podamos, quiero que sea una época para nunca olvidar.

Luego de esa pequeña interrupción de pensamientos, creo que es hora de arreglarme si quiero alcanzar a llegar a tiempo para mi cita con Isabelle.

11:25 M
-¡Diablos!- Chillo -llegare tarde de nuevo-, exclamo irritado, Isabelle va a asesinarme si no llego en menos de 5 minutos a su casa, No debí quedarme tanto tiempo en la ducha, pero como raro preferí hacerlo antes de cumplir.

-ahhhh- gritó desesperadamente al ver el reloj -¿en que maldito momento pasó media hora?- digo casi gritando.

En ese momento mientras literalmente vuelo por la acera, mi celular comienza a vibrar al son que suena con fuerza dentro de mi bolsillo, me detengo en seco y agarro mi teléfono.