El amor es un cliché

Marzo - Primavera (25/03/2017 )

          

9:35 M
Me encuentro en el museo de arte pre colombino, ubicado casi en los limites de la universidad, cerca a la facultad de arte (que coincidencia) y a media cuadra de la de medicina; estoy en plena clase de Historia viendo un vídeo sobre las culturas indígenas de países suramericanos , no es realmente mi fuerte esto del arte pre colombino pero es interesante pues poseen una variedad cultural vasta lo cual la convierte en la clase mas compleja que tengo, pero como todo, esto es un requisito indispensable para ser la artista que quiero ser. Dejo un poco de lado tanta excusa y ubico toda mi atención al monitor tomando apuntes de aquellos datos que creo relevantes o mas bien aquellos que sé que olvidaré con facilidad mas adelante, como fechas exactas y nombres, -!Dios mio¡, ¿Por qué es tan jabonosa mi retentiva a la hora de absorber esta información?- Pienso. La mayoría de exámenes me los tiro gracias a esos pequeños datos, esto es una maldición en definitiva

No pasa mucho tiempo antes de ser interrumpida como siempre en plena clase, el ensordecedor timbre de mi celular suena,-¡un mensaje!- Chillo a mis adentros, tal sonido provoca que mis compañeros me fusilen con la mirada -¡Que vergüenza!- me pongo seria a pesar de mi tomate de rostro, pues entiendo su claro desagrado por la brutal interrupción; se que una disculpa no será suficiente, así que me pongo en pie y salgo del auditorio.

Una vez fuera saco con torpeza mi teléfono del bolsillo, ya que no quiero que esto me tome mucho tiempo intento hacerlo de afan, pero esto solo provoca que se enrede, y yo que me desespere; luego de unos cuantos intentos fallidos luchando con mi roto bolsillo decido rendirme y hacerlo con cuidado logrando liberar de aquella prisión de tela mi celular.

-¡Por fin!- Grito con emoción y un aura de ira presente.

una vez libre en mis manos me dedico a mirar de quien se trata -es Salem-, y al parecer o ella está loca o yo no entendí el mensaje, estoy confundida.

                  Salem               

Salem – 9:40 M
Isa, últimamente he notado tu cercanía con Andrew lo cual es excelente a mi parecer pero ¿por qué no me habías contado?, o sea linda tu y yo somos amigas ¿no?, entonces, ¡POR QUÉ CARAJO NO ME HABÍA ENTERADO! Es mas a Andy le toco contarme, y a que no adivinas que gran secreto descubrí, escríbeme tan pronto puedas.

xoxo

Isabelle – 9:43 M
Si bueno Salem no me pareció un tema importante, y por cierto estaba en clase en el auditorio del museo, ¡ese mensaje fue en un momento inapropiado tarada!

Salem – 9:46 M
Auch no era mi intención, sorry.
Pero bueno ya que estas libre, ¿nos vemos?

Isabelle – 9:46 M
Sigo ocupada, te acabo de decir que estoy en clase. Déjame termino aquí y nos vemos en el parque Bonne, te parece?

Salem– 9:47 M
Okey como tu digas, a las 10:15 te espero allá bye gruñona.

¡Que idiotez! Como se le ocurre a Salem interrumpir mi clase por un tema tan estúpido como el amor, agh, estoy cabreada con ella, no es posible que sea tan importante el que hable con un chico, si obvio el es lindo y toda la vaina pero, para mi eso no es relevante en lo mas mínimo, pero bueno debo volver al auditorio ya he perdido mucho tiempo aquí afuera.

10:03 M
Voy a paso lento en dirección al parque Bonne, sin afán, sin prisa, solo disfrutando por primera vez del aroma a tierra húmeda del campus, el viento frío que se cala por mi nariz, el sonido de las hojas al moverse con la brisa; me centro en la caminata, tan solo relajarme de tanto ajetreo. Mientras ando casi sin rumbo una voz conocida me llama gritando.

-¡ISABELLE!- grita Andrew a lo lejos; por favor ahora no -¡Hey ISA!.

Decido darme vuelta solo por no ser maleducada con el, pero realmente no quería encontrármelo hoy, no me cae mal ni nada por el estilo pero no puedo aparentar que estoy feliz frente a el, cuando realmente tengo la cabeza tan llena de problemas que no quiero sonreirle.

-Andrew, ¿qué pasa?- Respondo en un tono seco y tosco
-Pues eso quisiera preguntarte a ti, ¿estas bien?- Toca mi hombro y dirige su mirada a mi rostro.
-Si claro, estoy perfectamente- digo con una ironía muy evidente, lo que quería evitar.
-Aja, ¿me crees idiota? Se nota a leguas que algo sucede contigo Isa, ayer estábamos hablando perfectamente y hoy estas con ese tonito pendejo conmigo,- detiene su discurso, siente que esta siendo muy brusco con sus palabras- mira Isa no nos conocemos muy bien pero....

En ese momento no pude aguantar mas y las lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos, sentía como si una cascada de dolor estuviese saliendo de ellos, por mas que intenté guardarme todo, no he podido lograrlo y justamente explote con la persona que menos deseaba que se enterara de mis aflicciones; ya no hay marcha atrás, mis sentimientos en este punto parecen estar a flor de piel.

-No, oye no llores, espera isa.- se detiene y me abraza pero esto solo causa que comience a llorar desenfrenadamente. Ese leve abrazo se transforma en un fuerte consuelo.
-Yo, no, lo sien...- intento responder pero fallo totalmente.

Andrew parece no molestarle y continua rodeándome con sus brazos, haciéndome sentir protegida, resguardada, importante... estoy tan mal que no me importa en lo absoluto darle esperanzas a Andrew, pero en un momento así no quiero quedarme sola y mas aun teniéndolo mas cerca que nunca. mientras empapó por completo su hombro con mi llanto, no se queja ni critica, solo permanece ahí para mi, sin importarle cual sea la razón el me brinda su ayuda, me expresa con su cuerpo que puedo contar con el y este sentimiento me llena el alma.

Unos pocos minutos después logro calmarme, pero no lo suelto, al contrario lo atraigo más hacia mi, no se ni que diablos estoy haciendo, pero solo se que no quiero que me suelte.

-Gracias Andrew, no, no, no debiste.- Hablo finalmente, casi como un susurro hacia su pecho.
-No tienes que agradecer,- me agarra de los hombros tratando de ver mi cara -pero ahora quiero saber que sucede contigo, quiero saberlo todo, no me gusta verte así, me acabas de romper el corazón con esas lagrimas,- toca mi cabeza con sus manos para que lo mire, al instante en el que nuestras miradas se encuentran al mismo tiempo que el se acerca a mi, de inmediato mi corazón comienza a acelerarse de una forma salvaje, estoy petrificada mientras un sinfín de posibilidades cruzan por mi cabeza, -¿Qué hace?, ¿porqué está tan cerca?- pienso, pero mi imaginación se desploma en el momento que desliza su mano suavemente por mis cachetes para limpiar mis lagrimas. Provocándome un micro infarto.

Caigo en cuenta finalmente de su pregunta como una cachetada a la realidad y realmente quisiera contárselo todo, aunque preferiría quedarme admirando sus hermosos ojos que hasta ahora noto que son de un tono miel, y mas aun estando en un escenario que creía imposible con el, pero tendré que arruinarlo todo contando la tragicomedia que mi vida es, de inmediato recuerdo todo, cada maldito problema de esta semana y en especial la gota que colmo el vaso.