—Por fin...— dijo la Oji-azul, suspirando con cansancio.
La azabache con pasos torpes camina hacía el mueble negro que se encontraba situado en una esquina del edificio, sin más toma asiento, sintiendo como el estrés abandona su cuerpo.
—Mis pies duelen — musita a lo bajo, tallando sus pies con sus manos, provocando una mueca de dolor —Malditos tacones —gruñe.
— ¿Te encuentras bien?.
Marinette da un salto en su asiento del susto.
—¡Oh dios, me asustaste! —exclama la azabache.
—Lo siento, es que te vi y no parecías estar bien. ¿Puedo ayudarte en algo?—pregunta con suavidad, tomando asiento a lado de la Oji-azul.
—Gracias pero solo estoy cansada —sonríe dulcemente — Tuve una gran jornada de trabajo y unos cuantos regaños del gruñón de mi jefe —dice formando un puchero, provocando una risa en el peli-rojo —Pero por fin termine mi labor por hoy.
—Pobre chica —dice de igual manera formando un puchero, mientras acaricia los cabellos de la azabache, quien sonríe ante el gesto — Si necesitas ayuda en algo, sabes que puedes contar conmigo, solo llámame.
—Nuevamente gracias Nathaniel.
—No hay nada que agradecer — sonríe —Tengo que resolver algunos asuntos, pero si necesitas algo o quieres que te lleve a tu casa pue....—fue interrumpido.
—No te preocupes por mi, resuelve tus asuntos y agradezco en verdad tu preocupación, muchas gracias pero estoy bien —habla despacio.
—De acuerdo Marinette, te veo luego
—se despide, dejando un dulce beso en la mejilla sonrojada de la azabache.—Es muy lindo — susurra.
Marinette se levanta, tomando sus cosas del pequeño escritorio para depositarlos en su bolso, cerrando los cajones con llave y limpiando su área de trabajo.
—Es hora de ir a descansar — dijo con cansancio, dirigiéndose al ascensor.
Ya adentró, las puertas metálicas se cierran, sonando de fondo una música instrumental.
Sin embargo la azabache no presta ni la mas mínima atención, sumergida en sus pensamientos.
—¿Que le habrá pasado?— se preguntaba una y otra vez la azabache.
Mordiendo su labio al no recibir una respuesta— Ayer era todo lo opuesto a lo de hoy, era tan lindo — suspira — Aunque a decir verdad también me gusta su voz de mando y su mirada sería —juega con sus dedos.
Las puertas se abren, dejando el camino libre, la azabache comienza su caminó. Faltándole poco para poder salir al fin de la empresa, pero se detiene al percatarse de algo, dejándola perpleja.
Una punzada llegó a su pecho...
Sintiendo el ardor en sus ojos...
—No debería de importarme...Solo.... Una empleada más en está empresa.
La azabache se da la vuelta, decidida a salir por el estacionamiento.
[...]
— Esto es un asco — susurra, acariciando su cabellera con frustración — Solo quiero salir de esta cárcel pero el mundo parece estar en contra mía.
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I Love My Secretary
FanfictionAdrien Agreste un hombre multimillonario, dueño de grandes negocios y proximo heredero de la empresa "Mode Agreste" Reconocido por su capacidad en los negocios además de su gran egocéntrismo, pensando en su propio beneficio. Desconoce la palabra "am...