Capitulo XXV

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Caminábamos por el medio de la calle como si de los dueños se tratase, Agustín y Clara su amiga nos guiaban 

-¿Por que dijiste que si?-Me pregunta Edward susurrando en mi oído 

-¿Por que no?-Le sonrío- Será divertido 

-Será peligroso 

-Es de noche y estamos rodeados de las personas menos creíbles, borrachos 

Llegamos a un gran club donde un par de muchachos cantaban a todo pulmón 

¨My mouth is a weapon

I ain't scared of nothin'¨ 

La canción me pareció atrapante desde el inicio 

-Ven! Diviértete conmigo, como antes- Le digo tomando su mano lo llevo al bar donde pido un par de tragos para nosotros, él solo me mira y sonriendo se lleva el vaso a la boca 

-¿Que tienes en mente?-Me mira con una picardia que hacia siglos no veía, volvíamos a tener diecisiete años aunque sea por una noche 

Disfrutamos de la música por un rato, la letra en español solo hacia de la noche mas... tentadora,quebrantable y apasionada, nos iríamos antes de la salida del sol y antes lo disfrutaríamos 

-¿Puedes conseguirnos un par de autos o motos?-Le pregunto a Agustín 

-¿Para cuando? 

-Ahora, solo está noche 

-Claro 

Y una hora después dos motocicletas nos esperaban en la puerta 

-Te las devolveremos en un par de horas-Le digo al salir 

-¿Que vamos a hacer? 

-Una carrera 

-Bien... No te dejare ganar 

-¿Que pasó con el caballero en armadura? 

-Esta noche no somos nosotros 

- Tienes razón 

Nos subimos y sin previó aviso arrancamos contra todo pronostico, aceleramos  a fondo pues no es como si fuésemos a morir esa noche, las carreras ilegales con bastante comunes aquí por lo que no es como si fuesen a llamar la atención, el viento en mi rostro se siente tan bien, el ruido del motor me provoca una nueva sensación de adrenalina, la ciudad desaparece ante solo las luces nos siguen, se siente liberador  y  por la sonrisa en el rostro de Edward se que el siente lo mismo, damos varias vueltas por toda la ciudad y volvemos al bar. 

Ahora es mas un club nocturno que un bar, la música suena bastante alta, le dejamos las llaves a Clara y salimos a dar un paseo 

-¿A dónde vamos?-Me pregunta como un niño que espera ansiosa-mente una sorpresa 

-Ya veras... Pero solo si me alcanzas-Le digo y comienzo a correr hacia un callejón, trepo la pared y con Edward detrás de mi llegamos al techo para entonces recorrer la ciudad de techo en techo, saltando,jugando y compitiendo entre risas. 

-Sígueme-Me dice poniéndose en la delantera pero yo avanzo provocando que tropecemos y terminamos rodando en el techo de un viejo hotel 

-Dos segundos de ventaja-Me dice una vez que nos detenemos 

-Hecho-Respondo y salto de la punta de la terraza, corro hacia un gran campo que logro distinguir a un par de kilómetros, para cuando llego siento el olor de los animales y me doy cuenta del hambre que tengo, quiero...no, necesito alimentarme pero la suerte me traiciona y un joven pasa llevando ganado, mi garganta se cierra 

¨¿Señorita esta perdida?¨

Me pregunta algo en español pero no logro entender 

-¡Estamos bien! Gracias-Edward me sostiene por la cintura y yo me aferro a sus brazos 

-Tienes que sacarme-Le susurro 

En cuanto el joven voltea nosotros desaparecemos, entramos en un bosque y una vez que estamos lo suficientemente lejos me dejo caer al suelo 

-Vaya... Hace tiempo que esto no me pasaba 

-Estuvimos tan concentrados en irnos que nos olvidamos de alimentarnos 

-Muy bien-Me pongo de pie-A cazar 

El sol nos encuentra en medio del bosque, estoy descalza, despeinada y se que mi boca esta completamente roja pues así esta Edward también

-Tienes que admitir que se divertirme- Le digo moviendo mis caderas  y como respuesta el ríe 

-Parecemos salidos de una película de terror, tenemos que bañarnos 

-Y se perfectamente donde-Le sonrió y comienzo a correr, en seguida el me alcanza, nos toma un par de minutos llegar a un pequeño río, no lo dudo, ni bien llego me lanzo y el también 

-Como nuevos-Me dice al salir a la superficie 

-Encuentrame-Le digo con mirada retadora y comienzo a nadar por debajo del agua, le toma algunos minutos encontrarme 

-Me merezco un premio-Dice saliendo del agua, el sol nos descubre y revela nuestra verdadera naturaleza 

-Tenemos que irnos

-Se como volver sin que nos descubran, rápidamente corremos hacia el bosque y a partir de ahí seguimos un sendero cubierto por árboles y enredaderas 

-Algo me dice que ya has estado aquí-Le digo cuando ya estamos por llegar pero él solo ríe como respuesta 

Pasamos el día en un hotel y en la tarde salimos hacia el aeropuerto 

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Buenass!!! Deben saber que no se cuantos capítulos haré por la semana que pasan juntos pero tratare de que sean interesantes 

Como siempre me encantara saber su opinión

Con Cariño-Oli  

Después del Amanecer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora