Naruto y su padrino Jiraiya regresaron a la Aldea de la Hoja después de terminar su entrenamiento de tres años, una vez en su hogar el rubio tuvo en encuentro con su figura madre Tsunade y su figura hermana Shizune donde hubo muchas emociones juntas.
Mientras hablaba con las mujeres el pudo sentir la presencia de la persona que más quería ver entrando a la aldea a lo cual el se despidió de todos y se dirigió rápidamente a su casa para esperarla ahí.
Después de varios minutos Tayuya llegó a casa donde en ningún momento espera ver a la persona que más amaba ahí sentado en su cama, la reacción no tardó mucho en llegar donde el enojó, tristeza y felicidad fueron los protagonistas de esas emotiva reunión que por suerte terminó bastante bien para ambos.
Y continuamos en la habitación del rubio donde ambos jóvenes dejaron su lugar en el suelo estando ahora cómodamente acostados en la cama.
"Ahh~ Naru~..."
Pero precisamente no durmiendo
"Mmm~ eres muy bueno en esto~" Tayuya estaba acostada boca abajo en la cama con su ropa de dormir que se conformaba por una camiseta negra ajustada y unos shorts cortos beige "Ahí ahi~" la pelirroja gemía de placer porque a horcajadas encima de su cintura estaba Naruto brindándole un masaje "¿Dónde aprendiste a hacer esto~?".
"Jiraiya me lo enseñó" Naruto dio una leve carcajada por la manera en que Tayuya lo estaba observando "Tranquilízate, se los daba a él".
"Mas te vale" refunfuño la pelirroja reacomodando su cabeza en la almohada y siguiendo disfrutando masaje "Te enseñó bien jeje~".
"Eso parece, siempre se dormía cuando me obligaba a hacérselos" dijo el rubio dando un último pero certero apretón que dejo salir un fuerte gemido de la chica, separo sus manos de la espalda de su novia para su total descontento "Es hora de dormir".
"¿A dónde demonios crees que vas?" Gruñó Tayuya al ver como él se levanto de encima de ella para bajar de la cama y después empezó a caminar hacia la puerta.
Naruto detuvo su andar y se giró a verla con una expresión de duda "Iba a mi cuarto para poder dormir".
"Te vas durante tres malditos años y la noche que al fin llegas ¿Te quieres ir a dormir solo?" Para este momento ella estaba de brazos cruzados mirando duramente al rubio que en su frente una pequeña gota de sudor caía lentamente "Y bien ¿Qué vas a hacer?".
"C-Creo que dormiré contigo jeje" Respondió nervioso por la situación pero mejor hacia lo que le decían, al fin y al cabo no estaba disgustado con la decisión.
Naruto se quitaba su chamarra junto con sus pantalones para poder dormir más cómodo quedando únicamente con sus boxers negros y una camisa blanca, obviamente todo este espectáculo fue visto detalladamente por una pelirroja que tenía una pequeña sonrisa ¿Lujuriosa? Pero es normal, está en la "edad".
Pero su casta mirada se detuvo al ver la gran cicatriz que tenía su amado en su brazo derecho "¡Naruto!" grito preocupada parándose abruptamente de la cama y caminando hacia él.
Él rubio no entendió el porque de su reacción pero inconscientemente sus ojos se movieron hasta quedar fijos en su brazo y ahora entendió el porque de su grito liberando un pequeño quejido de enojo por no haber recordado vendarlo "Tranquila, no es nada...".
"¡¿Cómo carajos puedes decir que no es nada?!" se quejó Tayuya tomando su brazo y mirándolo detalladamente, por su experiencia en la batalla podía decir que es una cicatriz de quemadura, y una bastante grande al ver que seguía por debajo de la manga de su camisa "Quítatela".
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C a r m e s í
RomanceNaruto después de su batalla contra Sasuke en el valle del fin regresa a la Aldea de la Hoja, pero en el camino de regreso se encuentra con algo que llama su atención...