Lo que nadie vio de Attack on Titan

Eren y Mikasa Vol.1.2

De nuevo ese sentimiento inundaba a Mikasa, esa sensación de impotencia, de ser incapaz de moverse, de ser incapaz de decir algo, ese mismo sentimiento que la invadió cuando sus padres fueron asesinados, esa misma sensación cuando Eren estaba siendo atacado por los asesinos de sus padres y ella solo podía contemplar; pero esa vez fue distinta, porque ahí estaba Eren para pedirla que luchase, pasa darla fuerzas; pero ahora estaba sola, las lágrimas empezaron a correr por sus mejillas sin permiso, cuando alguien tocó su hombro, Mikasa se seco las lagrimas para evitar que la viesen llorando aunque era bastante evidente, se giró para ver quién era y de nuevo ahí estaba el para darle fuerzas, como un amigo fiel, para animarla y apoyarla.
-Mikasa... Lo se todo, lo llevó sabiendo desde el primer baile, puede que al principio me costase asimilarlo, pero me di cuenta de que eres mi amiga y pase lo que pase voy a estar a tu lado.
Mikasa abrazo a Eren con fuerza y rompió a llorar.
Eren y Mikasa pasaron el resto de la tarde juntos sentados en el mismo callejón donde Annie había dejado a Mikasa.
Cuando Mikasa se calmó pudo volver a articular palabra y no solo gritos de dolor.
-Y, y ¿Cómo es que lo sabías?-Había dejado de llorar pero la tristeza seguía dentro de ella y aún le costaba hablar sin tartamudear.
-Porque os vi. Esa noche fui a buscarte, quería hablar contigo y tras buscarte por todos los lados te encontré pero ya estabas acompañada...
-Oh.. Supongo que eres la única persona que lo sabe... Pues nos encargamos de que nadie lo supiese-las lagrimas querían volver a salir pero Mikasa no se lo permitía- ¿Y qué me querías decir?
-No me acuerdo.-Mintió Eren, se acordaba como si fuese ayer cuando vio a la chica que le gustaba besarse con otra chica.
-Oh...
Mikasa se tumbó en el hombro de Eren, no hablaron mucho más, simplemente se quedaron mirando a la nada para no decir todo lo que nunca se habían dicho, para no decir que aún le seguía gustando, para no ponerse sentimental y agradecerle que ha estado siempre ahi.
Se hacía tarde, era la hora de cenar, Eren y Mikasa se levantaron para cenar por primera vez en el comedor de el equipo de exploración.
-¿Estás mejor?-Preguntó Eren.
-Si.
Eren le dio un pequeño abrazo a Mikasa y se dirigieron al comedor; cuando llegaron todos estaban ya sentados y esperando a que saliese la comida.
-¿Dónde os habíais metido?-Preguntó Connie.
-Hemos ido a dar una vuelta.-Contestó Eren.
-Pues hemos estado jugando al prueba o verdad.-Añadió Shasa.-Ya sabes por los viejos tiempos.
-Esos viejos tiempos cuando éramos cadetes.-Dijo Connie con un todo melancólico.
-PERO SI AYER SEGUÍAMOS SIENDO CADETES.-Contestó Jean.
-Cuanta razón tienes Jean, parece que fue ayer...-Le respondió nuevamente Connie
-Pero, pero, a ver...
-Nu te molestes Jean.-Interrumpió Marco.
Y mientras Jean discutía con Connie por la puerta principal entraban los veteranos, el primero de todos Herwin, seguido de una chica muy alta, un poco despeinada y con unas extrañas gafas, después de ella iba Levi, el gran Levi, quien siempre había sido su ídolo, Eren perdió el hilo de toda conversación pues solo era capaz de pensar de que su mesa estaba a unos pocos metros de la mesa en la que Levi comía.
-¡EREN!-Solo un grito de Sasha fue capaz de sacarle de sus pensamientos.
-¿Qué pasa?
-Necesitamos tu opinión para desempatar, Marco y Jean dicen que no, y Connie y yo decimos que si.
-Me he perdido ¿A qué decís que si?
-Decimos que Jean tiene cara de caballo ¿a qué si?
-Uhnm pues ahora que lo pienso... Si tiene un poco cara de caballo.
-MIRA EH TE REVIENTO.-Dijo Jean molesto
-Atrévete a tocarle un solo pelo y será lo último que hagas.-Dijo Mikasa en un tono serio y frío el cual intimidaría al más valiente.
-No creo que quieras enfrentarte a Mikasa.-Dijo Connie entre risas.
-No creo que nadie quiere enfrentarse a Mikasa.-Añadió Sasha.
-Bueno, tal vez Annie... Pero nos ha dejado por la Policia Militar...-Contestó Marco.
El nombre de Annie retumbó en la cabeza de Mikasa, quien apenas podía contener las lágrimas, si haber terminado de comer se levanto y se fue, Eren pensaba ir tras ella pero justo Erwin se acercó a hablarles a su mesa y darles la bienvenida.
Aprovechando que Mikasa se había ido Sasha se comió su comida.
Mientras tanto Mikasa estaba en medio de la nada contemplando las estrellas y pensando en las últimas palabras de Annie, no tenía muy claro lo que quiso decir con eso, pero nada bueno, de nuevo las lágrimas invadieron sus mejillas.