blood game ;; norenmin

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—Jeno.

—¿Uh?

—Se siente igual que la otra vez.

—¿Otra vez?— Jeno vió los ojos adormilados de Jaemin—. ¿Recuerdas algo?

—De aquella vez, donde me tiraron piedras. Recuerdo que estamos jugando a las escondidas, ellos dentro unos carros enormes y yo entre los árboles, pero hicieron trampa y me tiraron piedras, así que los descalifique.

El caballero siguió acariciando el cabello de su rey, buscando una idea sobre lo que estaba hablando Jaemin, pero no se ocurrió nada.

—¿Solo recuerdas eso?

—Es como lo que está en la TV. Así todo grande y en llamas, los recuerdo cayendo, es lo mismo que esta allí.

Vale aclarar que veían una película de Marvel, específicamente la primera del Capitán América. Y las escenas pasadas que veia Jaemin parecian ser lo que pasó en la segunda guerra mundial. La lucha entre los Aliados versus el Eje, un conflicto que lleno de sangre humano la tierra.

Era claro ya que era un recuerdo del despertar que tuvo durante esa guerra.

—Jaemin— le llamó Jeno al ver como miraba interesado la pantalla—. ¿Qué es lo que recuerdas? Completo, sin mentiras. Hay cosas que yo no sé y no las estás compartiendo.

—¿Cosas cómo qué? ¿Estar consciente en todo momento? ¿Saber que inyectaban o que extraían? ¿El por qué los Lee se separaron? ¿Qué pasó en Alemania? ¿En Vietnam? ¿O la guerra entre Coreas? ¿En la guerra civil china? ¿Qué deseas saber, Jeno?

—Sabes que eso es...

—Lo voy a compartir contigo, solo a ti, porque ya vi que NCT no es tan confiable— Jaemin señaló la televisión—. Tú sabes lo que pasó en Vietnam porque estuviste allí, pero no el inicio. También sabes que sucedió en los paralelos, lo único que veo que no sabes es lo de Alemania.

—¿Despertaste por cuenta propia o ellos lo hicieron?

—Yo abrí los ojos voluntariamente, ya no estaba encerrado en una torre alta, ahora era un contenedor, accedí eliminar lo que pedían, pensé que podría disminuir el odio pero no fue así, aumentó y le vi satisfacción a sus gritos, su sangre en todos lados, el cielo reclamando sus almas mientras yo les daba el camino. Recuerdo cuando vino la segunda oleada, estaba cansado, y algunos quirópteros entraron a luchar por los alemanes, ellos me dieron una sangre que olía deliciosa, y me mandaron a luchar otra vez, no sé que hice, cuando recuperé la noción todo estaba destruido, el fuego consumía todo. Matthew tomó la muñeca y me llevó hasta el último sobreviviente alemán, me obligó a matarlo. Me susurró que mi trabajo era lo mejor que había observado, mi actuación era lo máximo, no comprendí lo que decía. Me extendió un espada ensangrentada, y recitó lo que me dijo: "Nunca vi alguien desenvainar la espada de esa manera, tus ojos rojos buscando un nuevo punto de ataque, me alegro que la sangre hiciera su efecto, hoy eres nuestro, nos ayudarás a extinguir a nuestros adversarios. Jaemin, nunca podrás abandonar esto, tu vida tiene un precio y se debe pagar con sangre."

—¿La espada es el objeto que guardan en la bóveda? ¿La tuya y la de Renjun?— Jaemin asintió.

—¿Recuerdas algo de tu estado frenético?

—No, lastimosamente se perdieron. Tan sólo están los fragmentos de lo que sucedió en 1942, era como si poseyeran mi cuerpo, pude ver lo que hice, como apuñalar a millones de humanos, como los quirópteros atacaban sin distinción, pero igual, todos murieron, todos menos yo. Y a veces viene o se va, imaginó que le pasaría lo mismo a Renjun con lo Vietnam.