El Mensaje De Tus Ojos

¡Cortante!

Narra Narrador:

Era un día como cualquiera en el mundo de los demonios, el sol no iluminaba mucho y había un poco de viento pero nada fuera de lo normal. Seiden y sus amigos jugaban en el parque futbol americano mientras sus madres charlaban como de costumbre de temas sin importancia -¿y qué me dices de Erack?- pregunto Jenny –ag es un idiota...no le presta atención a los niños- respondió molesta Naisty –jm ¿Por qué no lo dejas?-

-por Seiden y Zafrina -

-ellos no pueden vivir sin un padre Caroline- dijo Abby.

Después de unas horas se escuchó una explosión no muy lejos del parque -¿Qué fue eso?- dijo Coraline mirando hacia donde se escuchó la explosión –no lo sé- de repente se escucharon gritos y la gente comenzó a correr en dirección contraria –Seiden lleva a los demás a tu cueva, ahora- dijo Naisty, Seiden hizo caso –síganme- dijo, los chicos corrieron detrás de él lo más rápido que pudieron, cuando llegaron entraron lo más rápido que pudieron –quédense aquí y no salgan por nada- dijo Seiden a punto de salir de la cueva –¿estás loco?, yo voy contigo- dijo Félix tomándolo del hombro –no es peligroso-

-tenemos 12 años- ambos sonrieron y salieron, cuando de repente vieron algo horrible.

Los humanos habían atado a la madre de Seiden a un pedestal y la quemaron –¡MAMA!- los humanos voltearon a ver a los dos niños y corrieron hacia ellos, pero un niño con una capucha salió y tomo de la mano a Seiden para sacarlos de ahí lo más rápido que pudieron.

*

Seiden se despertó de un salto con la respiración agitada –maldita sea, ese sueño otra vez- sintió un dolor en el ojo, se miró al espejo y se dio cuenta de que tenía un parche –ja...nada mal- su estómago comenzó a rugir, así que decidió bajar a la cocina para comer algo.

Narra Seiden:

Mientras bajaba las escaleras pude notar un olor a hotcakes, de solo olerlos se me hizo agua la boca, escuche unas risas así que me asome al corredor y pude ver a Zafrina , Félix , ese tal William y otra chica –¿enserio le dijiste eso?- pregunto Zafrina –si, ella se lo merecía después de todo- menciono la chica dándole un trago a su café –jaja no puedo creerlo- pude notar que ella le estaba coqueteando a Zafrina y ella le estaba correspondiendo, me pare detrás de ellas -¿interrumpo algo?- pregunte a lo que todos me miraron –¡S-Seiden! Despertaste-

–gracias por notarlo hermana- se notaba que estaba algo molesto –am...¿q-quieres algo de desayunar?- pregunto William levantándose –si ¿o quieres que muera de hambre?- él me sirvió 2 hotcakes, los tome junto a un jugo que nadie se estaba tomando y subí de nuevo a esa habitación encerrándome. Encendí el televisor pero no había nada bueno así que decidí ver Big Mouth en mi computadora que estaba dentro de mi mochila.

*

Unas horas después

Estaba viendo el capítulo de "el juego de la galleta" hasta que alguien toco la puerta –Seiden ¿Por qué estás tan "¡cortante"?- dijo William iba a ignorarlo pero dijo algo que me llamo la atención -¿ya recuperaste tu energía demoniaca?- pause el capítulo -¿Cómo sabes de mi energía?-

-p-pues...se mucho sobre los demonios...y pensé que eso había causado que te desmayaras ayer- hubo un largo silencio hasta que me digne a contestar –estoy bien-

-bien, entonces me voy- continúe viendo mi capitulo, estuve así hasta que dio la noche, cerré la computadora y dormí en boxers.

Narra narrador:

Así pasaron los días y las semanas, Seiden solo salía de la habitación por su desayuno, comida y cena después solo se volvía a encerrar, no hablaba con nadie en persona, algunas beses con William ya que le preguntaba que quería de comer o si estaba bien, etc... Los demás intentaban ponerlo de buen humor pero él se negaba a hablar con alguien. Abecés tenía pesadillas, siempre se despertaba en el momento que alguien lo jalaba del brazo y lo sacaba de ahí.

Narra Seiden:

Desperté de golpe otra vez, ese sueño me tenía arto, mire el reloj 4:00 de la mañana, decidí bajar por un café para calmarme un poco. Ya en la cocina, me di cuenta de que no sabía usar esa cafetera, tenía muchos botones –¡maldición!- di un golpe a la mesa, en eso escuche un ruido detrás de mí.

Narra William:

Me desperté en medio de la noche por unos ruidos que venían de la cocina, decidí bajar tal vez Chastidi saldría de nuevo, al llegar escuche a Seiden –¡maldición!- perece que estaba molesto por algo, se giró y me vio, me sonroje un poco al verlo solo con un pantalón -¿Qué me ves, te gusto o qué?- me puse un poco nervioso –n-no, solo venia por...- no se me ocurría nada bueno que decir -...un bocadillo- el volteo nuevamente a la cafetera –bien por ti-

-¿quieres que te ayude?- dije ya que se notaba que no sabía usar la cafetera –no yo puedo solo...¡carajo!- se alejó y se recargo en la pared, yo aproveche y me hice un café mientras sentía que él me observaba, no sabía si su mirada era de enojo o de sorpresa, decidí hacerle un café a el también –eso es mucho café para un niñito mimado como tu ¿no crees?- pregunto, deje su taza en la mesa me gire y Salí de la cocina –uno, no soy un niño mimado y dos el otro café en tuyo- subí las escaleras –buenas noches Seiden- dije con una sonrisa.

Narra Seiden:

-ja "buenas noches Seiden"- repetí mientras subía las escaleras, un rato después volví a dormir.

Narra Seiden:

A la mañana siguiente escuche que los chicos irían a una fiesta de un amigo de la tal Chastidi, parecía ser que William no iría creo que se sentía mal o algo así. Cuando escuche que se fueron y William se encerró en su habitación baje las escaleras y me senté frente a la gran pantalla, conecte mi computadora y puse la película "El Títere", también quería hacer algunas palomitas pero no servía el microondas –tiene que ser una broma- trate de conservar la calma para no destrozar la casa. De repente escuche un ruido arriba, era como un golpe, subí para ver que era.