Oh, papi ~Riren~ | R18 |

xiii; Cómo leona a su cachorro

Minutos después, Eren estaba en el auto camino a la casa de su hermano. Movía ansioso las manos y las piernas mientras su cabeza no dejaba de divagar entre el examen y otros temas angustiantes que le hacian querer abrir la puerta del carro y tirarse, odiaba cuando no podía controlar a su cerebro

- ¿cuantas veces has repasado la guía? - preguntó el hermano mayor

- veinticinco veces, la recibí anoche apenas, no e tenido tiempo de hacerlo bien, ni siquiera sé si estoy estudiando lo que se supone que vendrá en el examen. ¿ que tal si es sólo para confundirnos? estoy concentrándome en los temas concretos que indican las preguntas pero tienes sentido si piensas que tengo que desglosar las preguntas desde el concepto de estas y abarcar todo lo que encierran para obtener las verdaderas preguntas del examen

- Eren - llamó Zeke después de expulsar el humo de su cigarrillo - El examen está hecho por y para gente común y corriente, aunque sea una escuela para gente con coeficiente intelectual ciertamente decente no son cómo tú o como yo. ¿A cuantas mentes brillantes crees que tienen contempladas aparte de tí? lo pasarás, Eren, confía en mí

Luego de que su hemisferio cerebral izquierdo indicara las palabras de Zeke cómo acertadas, el menor pudo tomar un respiro de su propia mente. Lo miró por un momento antes de formular la siguiente pregunta

- ¿para qué estás llevándome a tu casa, entonces?

- Lo sabrás cuando estemos allá, hermanito

La gran construcción de piedra dónde vivía Zeke junto a su prometida se hizo presente después de unos minutos. El rubio le abrió la puerta del auto a su hermano menor y lo llevó de la mano a su estudio

- Pieck no se encuentra en casa, así que no podemos entretenernos jugando con su cabeza - dijo Zeke haciendo referencia a cuando él y su hermano hacían acertijos para la pelinegra que nunca podía resolver, siendo ese su pasatiempo favorito - pero dejé listo el tablero de ajedrez, ¿te interesa una partida?

- Por supuesto, quiero las piezas negras

Ambos se sentaron frente a frente y empezaron la jugada, después de que Zeke hizo el primer movimiento también hizo la primera pregunta

- Dime una cosa, Eren, ¿Qué piensas hacer cuando llegues al Minerva ?

- Estaba pensando en estudiar ingenieria pero ya tengo el título por el curso de verano en Cambridge e hice otro curso de verano de Derecho en Harvard

- Suena a un buen plan - respondió Zeke - ¿ E Isabel?

- Ella hará el exámen también y vendrá conmigo

- ¿ Y no crees que otro lugar sería mucho más beneficioso para ella?

Eren lo miró cómo si se hubiera vuelto loco, sabía que reaccionaría así. Zeke estaba seguro de que estimular la carrera artística de Isabel era la mejor manera de asegurar su éxito, pero para esto tendría que irse a otra universidad de bellas artes lejos del país, pero Eren nunca estaba dispuesto a separarse de Isabel, ni ella de él

- No, definitivamente no, el Maeva es el mejor del país. Hay una facultad de artes ahí

- Pero en otras universidades ella tendría oportunidades de ejercer su carrera cómo artista, tendría patrocinio y...

- Estar separados no es una opción, no funcionamos el uno sin el otro. ¿Crees que un cerebro seguiría sirviendo si separas el hemisferio derecho y el hemisferio izquierdo? la respuesta es no.

El rubio suspiró y se dedicó a vencer a su hermano en la partida de ajedrez. Luego de un rato de distraer la asombrosa cabeza de Eren lo llevo de vuelta a casa

- No te presiones demasiado, sabes bien cómo yo que vas a entrar ahí - le dijo al menor antes de que bajara del auto

- De acuerdo...

- Y por favor, piensa en lo que te dije

Eren no le respondió y bajó del auto con una velocidad impresionante, entró en la casa sin decir una palabra y se sentó en la sala

- Eren...-intentó hablarle Levi - Estás preocupándote demasiado, te haces da-

- No es un buen momento, Levi - lo interrumpió Isabel

La pelirroja se acercó a su hermano y le dio una mirada de advertencia haciendo que el pelinegro se fuera

- Isabel - le llamó con un murmullo

- Dime cachorro

- Tú no te apartarías de mi, ¿verdad?

- Nunca podría, Eren, no puedo ni quiero

- ¿Ni aunque eso te diera una mejor vida?

- Ni aunque me ofrecieran convertirme en una diosa; separarnos es convertirnos en objetos obsoletos, Eren, una estatua de mármol partida en dos no tiene ningún valor. ¿Porqué me preguntas esto tan derrepente?

- Curiosidad...