[🍫] S o n g f i c - Crew _Negative and _Positive

[☢] Radioactive

Una época apocalíptica; el multiverso se juntó en un solo mundo, y una bomba atómica desintegró a todos los humanos, por lo cual no habían resets. Ni Ink ni Nightmare ni nadie pudo descubrir al causante de esto, siendo que estos perdieron sus herramientas capaces de crear portales al despertar en aquel mundo, y no importa cuanto te esfuerces los portales te llevaban al mismo lugar.

Y Horror recién se estaba enterando de esto.

Se levantó de un salto empuñando su hacha la cual se encontraba fielmente a su lado, aquello le provocó un pequeño mareo que ignoró. Miró a su alrededor, encontrándose en lo que parecía ser un autobús lleno de restos de esqueletos humanos con ropas monocromáticas. Por si acaso les cortó la cabeza a todos, no quería enterarse que alguno de esos sería uno de los suyos.

Inhaló y exhaló. El aire era distinto y sentía que le quemaba las fosas nasales. Químicos, quizá. Pero no entendía por qué el aire de los humanos serían ácidos ¿No era que todos respiraban el mismo aire? Aunque observando bien por ventanas enrejadas del vehículo no parecía ser la superficie

La tierra gris, con plantas muertas. Restos de ciudades destruidas y mucha sangre que está desapareciendo a causa de los químicos aún se mantenía pegada a alguna superficie.

Parecía que vivía en el apocalipsis.

Un sonido; una explosión, ni muy cercana ni muy lejana, al parecer venía de la ciudad. Aquello lo desconcertó, la situación no le estaba gustando pero aún así mantenía su sádica sonrisa en su rostro.

Posó su hacha en su hombro y pensó que sería gran idea salir.

Era un autobús de prisión. Eso explicaba las ropas y las ventanas.

Empezó a avanzar hacia la ciudad, se preguntaba quién o qué ocasionó ese sonido. Al menos esperaba encontrar un poco de comida, esperaba encontrar restos de humano que SI sean comestibles... O masticables. No como los huesos.

Al llegar a la ciudad se encontraba muy cansado, aún si parecía que su destino y el punto de partida parecían cercanos aquello solo era una ilusión, y estaba harto de aquello.

Al menos sacó una cosa buena; descubrió al causante de las explosiones.

¡Los coches explotaban de la nada!

O al menos esa era su teoría. Aquel mundo era muy extraño y divertido, lamentablemente no encontraba aún comida y aquello ya empezó a afectarle

Será un esqueleto, pero una larga caminata sin bebida ni comida harían mierda a cualquiera.

Y no fue cuestión de tiempo para que caiga

Cayó al suelo sujetando con ambas manos su hacha, lo que se suponía que era su mentón golpeó el mango de esta pero no alcanzó a quejarse del dolor por el desmayo que lo atrapó

Al despertar lo primero que notó fue que estaba siendo elevado, lejos del suelo. Y avanzaba.

Lo segundo era que lo que sea que lo tenía por encima del suelo era viscoso, apenas húmedo, y pegajoso. Además de que lo apretaba con un poco de fuerza, quizá resbalaba y por eso era así.