Capítulo 1

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Narra Karol

Hoy es el día en el que comienzan las vacaciones de verano de todos los chicos que van al colegio. El día en el que comienzan mis vacaciones de colegio ya que es mi último día de secundaria. El día en el que comienza mi pesadilla/trabajo/favor o lo que sea.

Mis padres ya se fueron a sus vacaciones con el matrimonio Pasquarelli y yo en dos horas tendré que estar en la casa de los Pasquarelli.

Como faltan dos horas para las 16:00, me pongo a leer una novela en Wattpad, es muy adictiva. Wattpad es adictivo. Leer también lo es. Amo leer, solo que casi siempre leo por Internet.

Miro el reloj y eran las 15:40. Espera, ¿cómo ha pasado tan rápido el tiempo?

Tengo que estar a las 4 en la casa y salir de mi casa a las 15:45 ya que debo ir caminando.

Apago el ordenador rápidamente y me miro en el espejo de mi habitación. Estoy aún en pijama. Cojo la ropa que había dejado fuera de la maleta y me la coloco corriendo al baño. No soy de arreglarme mucho, solo me peino, coloco un poco de base y delineador de ojos. El problema de todo esto es que tengo un nido de pájaros en la cabeza, estoy totalmente despeinada.

Esto me pasa por quedarme leyendo, todo por culpa del estúpido y sensual Wattpad. Nah, mentira. Te amo Wattpad.

Termino de peinarme y arreglarme. Cojo mi mochila pequeña de cuero que uso como una cartera y meto mi móvil, dinero y chicles. Cojo la maleta y las llaves de casa y bajo del segundo piso. Al llegar a la puerta principal me doy cuenta de que son las 15:50. Tengo diez minutos para llegar a la casa que está a 24 cuadras. Debo apurarme y mucho. Cierro mi casa e inmediatamente comienzo a caminar hacia la casa de los Pasquarelli.

Todo esto es culpa de mis padres, ¿quiénes son para decirme que tengo que pasar la mayor parte de mi verano cuidando a los Pasquarelli? Oh sí, son mis padres.

Los Pasquarelli son revoltosos, raros y no los conozco. Pero todas las niñeras que tuvieron, las tuvieron una semana o menos. No más. Y como no pueden contratar a una niñera, me contratan a mí.

Miro mi móvil. Son las 15:57 y yo estoy a una cuadra de la casa. Wow, creí que esto de llegar justo a tiempo cuando estás atrasada solo ocurría en las películas. Además, odio ser impuntual. Estoy llegando puntual y sana, sin ningún rasguño. Eso es genial. Siempre soy de caerme, demasiado torpe para mi gusto.

Esperen, ¿y cómo es que ahora estoy totalmente llena de lodo? No lo sé. Miro a mi lado y un perro moviendo la cola feliz, se sube a mí y los aspersores de ese jardín delantero se encienden. Trato de levantarme pero patino mucho. Cuando logro levantarme cojo la maleta y salgo corriendo como puedo, perseguida por el perro grande que me tiró al lodo.

Llego a la casa y veo juguetes tirados en el jardín delantero. Toco el timbre y, mientras espero a que me abran la puerta, trato de ahuyentar al perro. Gruñí, lo espanté y salió corriendo. Me apoyo sobre el marco respirando con dificultad y toco nuevamente el timbre.

-Oh -dice un adolescente al verme totalmente sucia y espantosa.- ¿Tú... eres... Karol?

-Sí -asiento-, tuve un inconveniente a media cuadra -río amargada.

-Eres sexy -me dice con una sonrisa de galán. Idiota.

-¿Qué?

-Nada -contesta rápidamente.-. ¿Qué te sucedió?

-Un perro me tiró al lodo, ¿puedo pasar? -pregunto.

-Sí -dice y me deja pasar. La casa es linda..., solo que está totalmente sucia, al igual que yo.

Cuidando a los Pasquarelli - PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora