Y yo te quería...

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El sonido de la cierra sonaba por toda la casa.

Un joven de apenas 14 años, cubierto de sangre y portando una enorme cierra, hacia limpieza de primavera.

Se había encargado ya del mandito de Trager, y de Blaire.

Walker y Miles fueron más difíciles.

Pero él estaba decidido.

Haría un festín con los cadáveres de esos mal nacidos.

-No puedo creer que sigas con tu berrinche-le reprocho Val.

Quien sonreía falsamente.

La odiaba...

Desde que tenía conciencia odiaba a su hermano.

Ese maldito estaba de acuerdo en todo.

Peor aún era cómplice del dolor de su madre.

Miles de veces le vio inyectar a su madre con esa maldita droga.

Y él jamás lo perdonaría.

Mataría a todos los que alguna vez dañaron a su madre.

Desde que era pequeño vio las lágrimas y el dolor en los ojos del hombre que le dio la vida.

Poco a poco su paciencia se colmó, el no permitiría que dañaran a su padre más.

Le tomo un tiempo planearlo todo.

Pero cuando encontró el celular, supo perfectamente que hacer.

-salvare a mi madre...así que quítate a menos que también quieras morir-

-yo amo también a nuestra madre...y a ti Frank...eres mi hermanito. -

Val se acercó lentamente y trato de abrazarle.

Lo hubiera permitido, de no ser porque la idiota había ocultado mal la jeringa.

Podía ver la aguja salir de su manga.

Así que cuando estaba lo suficientemente cerca, alzo su cierra y corto su maldita boca.

No deseaba escuchar más el maldito sonido de su voz.

Blake se acercó hasta ellos, y tomando un cuchillo apuñalo a Val.

Su amigo era una víctima igual que su madre, así que perdonaría su vida.

Ambos se dirigieron a la última habitación.

Eddie Gluskin, ese bastardo que se hacía llamar su padre, ya le esperaba.

Dennis, el hijo de Miles y Chris, sostenía a Waylon Park.

A pesar de que su padre no podía moverse, ambos le tenían como rehén.

Sabían que él jamás haría nada que dañara a su amado padre.

-sabía que tarde o temprano me darías problemas-dijo decepcionado Eddie- yo que te he amado y cuidado desde el día que naciste-

-tú has abusado de mi padre, lo forzaste a tenernos a Val y a mí, le mantienes drogado y atado a esa maldita silla de ruedas-

-es por su bien...-

-no...es por tus malditas ideas de una puta familia-

-NO ME HABLES ASI, ERES MI HIJO Y DEBES HONRARME Y RESPETARME-

-lo único que hare es meterte la hoja de mi cierra por tu puta cara-

Cansado de escucharle Eddie se lanzó contra él, cuchillo en mano.

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