El chico de mis sueños.

Capítulo III♡

Entré lo más rápido que pude al salón de clase, con mucha sutileza para que la profesora no notara que recién he ingresado al aula y para colmo, tarde. Había un sitio libre al lado de Alya.

Marinette: Holaaaaa Alya. ~\ Intenté hablarle muy sutilmente.

Alya: ¡Oye! ¿En donde te metiste? ~\ Frunció el entrecejo.

Lo gritó tan fuerte que la profesora escuchó. ¡Ay Alyaaaaaa!

La profesora volteó.

Profesora: Querida Marinette, ¿a qué se debe tan tarde su presencia?

Marinette: Pues..., pues... Yo... ¡Mi despertador se malogró!

Profesora: Ouh... Con que su despertador se malogró, bueno entonces se quedará después de clases un momento para conversar más sobre el asunto, ¿de acuerdo?

Marinette: Está bien. ~\ Miré cabizbajo y me senté.

Alya: Ahora sí, ¿¡en donde te metiste!? Te he estado reventando el celular con los mensajes y llamadas, ¡me preocupaste! ~\ Está vez hablo más despacio.

Marinette: Uff, ha sido una mañana muy agotadora, mi sueño, Luka, Chat... ~\ No deja de pensar en ese gatito.

Alya: ¿Sueño? ¿Luka? ¿¡¡Chat!!? ¿¡¡Has visto a Chat!!?

Marinette: Sí, él fue quien me trajo aquí.

Alya: ¿¡¡¡¡¡Qué!!!!!? ¡No puede ser!

Marinette: Déjame contarte en el receso.

En todo el receso le conté todo lo que sucedió en mi sueño con ese chico misterioso de ojos verdes, el coqueteo de Luka en la cafetería y el incidente con Chat.

Comprendió porqué había llegado tarde. Me quedó mirando.

Alya: Marinette..., ¿por qué le das tantos rodeos a ese sueño?

Marinette: No lo sé. ~\ Tiene razón, ¿por qué le doy tantos rodeos? Solo es un sueño, un sueño común y corriente. Bueno..., no tan común, para ella fue mágico, fue tan mágico que hasta ahora no se le quita de la cabeza esos bellísimos ojos verdes.

Alya: No estarás pensando en...

Marinette: ¿En qué?

Alya: ¿Te has enamorado del chico de tus sueños?

Marinette: ¡No, no! ¡Eso suena muy absurdo! ~\ ¿Y si de verdad siente que se ha enamorado? ¡No! ¡Eso, además de sonar absurdo, es tonto!

Alya: Ah..., bueno pequeña espero no te vuelvas loca con ese sueño y se te pase rápido.

Marinette: Se me pasará pronto.

En todo el transcurso del día he estado pensando en Chat, ¿Estará bien? Se le notaba triste. Me alegro que haya podido hacerle feliz aunque sea por un segundo con ese postre, el otro postre se lo entregué a Alya, un poco maltratado pero lo aceptó y quedo satisfecha. Espero que solo sean ideas en mi cabeza.

°°°

Ya era salida y tenía que quedarme para conversar con mi profesora. Espero que no me haga un escándalo por llegar tarde.

Profesora: Espérame un momento Marinette, tengo que atender a un padre de familia.

Marinette: Está bien, yo la espero.

Saqué un ukelele de mi maleta y comencé a cantar the moon song-mxmtoon.

Alguien se sentó a mi costado, no le tomé importancia, seguía cantando. Esa canción me encanta, su papá le cantaba esa canción antes de dormir, hasta que... Una lágrima cayó sobre su mejilla.

◇: Discúlpeme, pero usted señorita, canta muy lindo.

Me limpié los ojos que estaban a punto de romper en lágrimas, levanté la mirada. Y... ¡no puede ser!

No podía moverme, me quede paralizada, no sabía cómo reaccionar. Es él..., es él chico de mis sueños. Bueno..., no estaba del todo segura, en su sueño solo pudo ver sus ojos. Esos enormes ojos verdes, esos bellísimos ojos verdes que la tenían paralizada, la tenían toda tonta...

¿¡Cómo es posible esto!? ¿¡¡¡Cómo!!!? ¿A poco estaba soñando otra vez? Me pellizqué, ¡Ayyyyy!

¡Eso dolió!

Marinette: Ho-ho-ho-ho...

◇: ¿Hola? ~\ Lo dijo mientras sonreía, esa tierna y dulce sonrisa...

Marinette: Yo-yo-yo...

◇: Tú cantas hermoso Mari...

Marinette: ¿Sabes mi nombre? ~\ ¡¡¡Sabe su nombre!!! Mis mejillas se enrojecieron, se incendiaron. ~\ ¿Hace calor no? Haha...

◇: Es-es-este..., sí haha, es que..., un amigo mío me comentó sobre la chica que canta muy bonito en esta escuela.

Marinette: Ouh..., haha... ~\ ¿¡Qué rayos le está sucediendo!?

¡ADRIEN! ¡YA VAMOS!

Adrien: Lo siento Marinette, tengo que irme. Espero volver a escuchar esa linda voz que tienes. Ha sido un gusto. ~\ Agarró mi mano con delicadeza, acercó sus labios hacia mi mano y la beso. No sé que decir, no sé como reaccionar, mi cuerpo se paralizó, no asimilaba todo lo que estaba pasando, ¿cómo asimilar tan preciosa escena? Mi corazón latía tan rápido, mis-mis mejillas estaban del color de un tomate, tenía ganas de decirle muchas cosas.

Pero solo salió de mis labios...

Marinette: Hasta luego Adrien.