Fake inocennt❌

v e i n t i c u a t r o.

Me desperté y me sorprendió no estar en la cama del cuarto junto al rubio, más bien estaba en una camilla de hospital.
Salí despacio y recorrí los pasillos hasta que una puerta adornada con cristales oscuros y con un pequeño letrero que decía "Taehyung y Taehun".
Mire sorprendida y tomé el pequeño portafolio que estaba bajo el letrero.

Paciente 1: Kim Taehyung.

El individuo es hiperactivo, parece tener trastorno de la personalidad por evitación. El individuo no es demasiado sociable y es muy sensible a ser rechazado.
Mantener una distancia prudente.

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Paciente 2: Kim Taehun.

El individuo posee el chantaje emocional. Actúa como un niño frente a las personas para manipularlas. Hace dos semanas hizo que una de las enfermas del sector 2 se suicidará.
También padece el trastorno obsesivo-compulsivo relacional. El paciente demuestra una obsesión por dos cosas.
Él paciente quiere que su hermano sufra y quiere a su lado a Choi Hye.

Paciente peligroso. Evite el más mínimo contacto con él.

Mis ojos se abrieron por completo y miré fijamente la puerta hasta que mi mano se puso en la perilla y abrí la puerta despacio.
El interior estaba oscuro así que busque el interrumptor, lo encendí y recorrí la habitación con la mirada.
Las paredes eran de un color rojo intenso, había dos camas, una con sábanas negras y la otra de azul celeste.
Seguí observando hasta que mis ojos chocaron con mis dos chicos mirándome fijamente.
Me acerque a ellos y les di un grande abrazo, pero me dolió que no fui correspondida.

-Chicos, ¿Qué está pasando? ¿Se encuentran bien?.- pregunté sollozando.

-Nada malo Noona, por fin estamos los dos juntos.- dijo el castaño tomándome de las manos, yo le sonreí pero no pude evitar mirar al rubio que solo se dedicaba a mirarme en silencio.

-Los tres, Taehunie.- le dije tomando de la mano al rubio, obteniendo un rubor extremo en sus dos mejillas.
Lo acerque a mi y lo abraze muy fuerte, pegue su cuerpo al mío lo más que pude, hasta sentir su calidez hasta que en mí abdomen pude sentir algo mojado. Me separé un poco del chico y miré su abdomen, en él crecía cada vez más y más una mancha roja. Sangre.

-¡¿Q-qué...?!.- grite histérica pero mi rostro palideció al ver al castaño sostener un cuchillo bañado de sangre.

-T-taehun...¿Qué hiciste?.- pregunté con la voz quebrada, viendo cómo los ojos del rubio se iban cerrando y caía al país en un ruido seco.
Me arrodillé frente a él y puse su cabeza en mis rodillas mientras lo tomaba del rostro.

-T-taehyung...por favor... aguanta...- comencé a llorar y a gritar para ver si alguien me escuchaba pero...nadie venía.

-Noona...- habló el castaño mientras se sentaba a mi lado.

-¿Porqué Taehun?.- pregunté viendolo con mis ojos llenos de lágrimas.

-Por nosotros.- dijo dándome una sonrisa enferma y me tomaba de las mejillas.

Negué repetidas veces con la cabeza y me aleje de el al instante. Corrí hacia la puerta pero estaba cerrada por el otro lado.

-¡Auxilio! ¡Por favor! ¡Ayúdenme!.- grite desesperada pero nadie venía. Me tense cuando sentí unas manos darme la vuelta bruscamente y estampar sus labios con los míos. No correspondi su beso y escuché como gruñó en mis labios. Se separó lentamente viéndome a los ojos y comenzó a llorar.

-N-noona no me quiere...- sollozaba.- Taehun ama mucho a Noona pero ella no lo ama a él.- habló con la voz quebrada.-...noona no me ama.

-L-lo siento...- susurré despacio hasta que escuché como dejaba salir una risita.

-¿Crees que me quedaré así nada más?.- preguntó incrédulo.- vamos Hye, no maté a mi hermano solamente para que me rechazaras.- habló bruscamente mientras ponía mis manos contra la pared y comenzaba a apretarme fuerte.

-Taehun...me lastimas.- dije soltando jadeos de dolor.

-¿Crees que me importa?.- preguntó con burla.- ¿sabes? Creo que deberías acostumbrarte a mí, pronto nos iremos lejos y jamás nadie nos separará nunca.- chilló feliz.

-N-no quiero ir contigo.- me negué.

-Todo de ti me pertenece ahora Hye, lo lamento...oh espera, no, no lo lamento en absoluto.- empezó a reír demasiado y a gritar cual quiero tipo de cosas.

-¡Serás mía así tenga que encerrarte toda la jodida vida! ¡Voy a ser el único en tu mente! ¡No voy a compartirte nunca más! ¡¿Me oyes!?.- gritó furioso.

Cerré mis ojos fuerte y trate de zafarme de él, su risa se hacía cada vez más fuerte. No sabía qué hacer, el cuerpo frío de Taehyung reposaba en el suelo, un chico enfermo gritándome que soy de su propiedad. No puedo, no puedo.
Comencé a gritar tan fuerte que mis pulmones ardían, mi cabeza comenzó a doler y todo se volvió borroso.

Me levanté gritando y llorando sin razón alguna.

-¿Noona? ¿Estás bien?.- preguntó un Taehyung adormilado y preocupado.

Todo fue un jodido sueño.

-E-estoy bien.-respondí limpiando mis lágrimas rápidamente. Me levanté de la cama y comencé a dar vueltas por el cuarto hasta que sentí como unos calientitos brazos me rodeaban.
Mire hacia arriba y el rubio me miraba serio mientras apretaba más su agarre.

-Yo también tengo pesadillas Noona, y lo que más me calma es un abrazo de oso.- habló el rubio apretándome más a su cuerpo.- todo está bien Noona...ahora estás bien.

Esas simples palabras hicieron que mis ojos comenzarán a desbordar cada vez más y más lágrimas. No sé por cuánto tiempo lloré en sus brazos, pero la realidad era que me importaba menos.
Sentir su calor era más que suficiente por ahora, estar con él era suficiente.

-¿Taehyungie?.-hable con un hilo de voz.

-¿Si?.- respondio con un tono dulce.

-¿Puedes darme abrazos de oso siempre?.- pregunté juntando más nuestros cuerpos.

-Todos mis abrazos de oso serán para tí, Noona.- bajo su rostro para quedar más cerca del mío hasta que nuestros labios rozaron y nos fundimos en un lindo y tierno beso.

-Te quiero Taehyung.- dije al separarnos.

-Te quiero mucho mucho más Hye.- me miró fijamente a los ojos y volvió a besar mis labios.

Y así paso la noche, después de un sueño realmente horrible, termine en los brazos de mi chico rubio.
Y una vez más, dormí abrazada a él, pero esta vez, en una noche llena de sentimientos...ya no hubo más pesadillas después de eso.

...