Into The Wild

Capítulo 9

Aún no se a que venia eso último, sigue habiendo gato encerrado en esto pero no quiero, no, no debo seguir. Ya me prometí a mi misma zanjar el asunto.

El móvil me empieza a vibrar en el bolsillo trasero de mis vaqueros. Es Jason, tengo 2 llamadas suyas perdidas. El corazón se me congela al ver su nombre en la pantalla.

-Hey Malia, ¿qué tal estás? No se nada de ti desde hace bastante tiempo eh

-Hola Jason, estoy bien, mahalo.- intento suavizar mi tono de voz tanto como pueda pero aun así se sigue notando raro. Sin embargo él parece que está normal.

-Verás te llamo para ver si podemos quedar y charlar un rato, no me encuentro bien y me vendría de perlas tener una vieja amiga.

-No somos amigos Jason y ademas-

-Lo comprendo, te pareceré un crío de siete años que le metió una paliza a tu otro amigo. Encima de que no he querido saber nada de ti hasta ahora, pero busco que me des otra oportunidad, por favor.- me suplica

Tras un largo suspiro acepto su invitación de ir a tomar un café donde nos vimos aquel primer día.

Un par de horas más tarde me encuentro sentada en un sofá de la cafetería esperándole. Lleva diez minutos de retraso, y me planteo la posibilidad de marcharme y dejarle colgado, si es que piensa venir...

Levanto la mirada y veo que se acerca hacia la mesa, sentándose en el sofá que hay justo en frente. Me saluda con una leve sonrisa y se la devuelvo.

-Bueno, de que querías hablar?.- le espeto una vez que se ha sentado y me mira fijamente a los ojos.

-Te vi el otro día, en la biblioteca hablando con la secretaria y luego saliste corriendo por la puerta, literal, ¿qué hacías?

-Ummmmm... nada interesante, le preguntaba por un libro

-¿Cuál?

-No se, uno de dibujos que me llamó la atención, eso es todo.- me ha pillado, lo sabe, seguro que sabe que lo sé. Las manos me empiezan a temblar y las pongo por debajo de la mesa , entre los rodillas.- No te vi

-Pues estaba detrás tuyo. Bueno, da igual, ¿qué tal te va?

-Bien bien... estudiando como siempre.

-¿Con quien te sueles juntar?

-Con Ellen y sus amigos, ¿por qué lo preguntas?

-Nada, solo me preocupo por tí.- mentira

-Oye yo también te quiero preguntar una cosa, ¿qué te pasa con Zev?.- justo llega el camarero en ese momento para pedir nota sobre lo que queremos tomar, se lo decimos y se va. Espero a que Jason me responda.

-¿Te ha contado algo él? Se que os veis de vez en cuando.- se acerca y me mira con unos ojos que nunca he visto.- a escondidas.

-¿QUE? quien te ha contado eso. Es mentira, no le he vuelto a ver hasta esta mañana que irrumpió en mi cuarto

-¿Como?.- mierda, no debí decirlo. Si me contratasen algún día como espía, me despedirían al día siguiente por lo bocazas que soy

-Solo buscaba a Valerie, no pasa nada.

-No te acerques a ese tío y nunca le creas. Es un fantasma.- se recuesta en el respaldo del sofá y pone los ojos en blanco

-Qué casualidad, él me ha dicho justo lo mismo de tí, y ahora no se a cual de los dos creer. Aunque la verdad me importáis ambos una mierda...

-Mejor

-Sí.

Después de esta discusión nos quedamos en silencio por un buen rato hasta que rompió el hielo preguntándome por las vacaciones de Navidad. Estuvimos en esa cafetería como una hora y más tarde nos despedimos, me dijo que lo sentía por lo ocurrido y que no volvería a ocurrir mas. Se tenia que alejar de mi por mi bien. De verdad que ahora estoy hecha un lío mas que nunca. Primero pienso que Zev es el decente aquí en medio y Jason el sospechoso. Ahora Jason se quiere alejar de mi para protegerme de no sé el qué y Zev queda como de malo y mentiroso de la película. Es un bucle del que estoy harta. Han pasado 3 meses y lo único que relaciona a ambos es una posible fraternidad secreta y peligrosa que tiene como símbolo una rosa. Parece una historia de ciencia ficción y ¿dónde quepo yo en esta historia?, ¿quieren algo de mi?. Zev se preocupa por mi, me dice que tenga cuidado y Jason tres cuartos de lo mismo... No sé como voy a pasar del asunto si un día de repente uno de ellos esta llamando a la puerta de mi habitación. 

Ahora por lo que debería preocuparme es en hacer las maletas de vuelta a casa por Navidad, pasar los días con mi madre y alejarme de todo este lío. Así tendré tiempo para pensar, para aclararme las ideas y todo eso. No sé qué voy a hacer con todo esto