Sólo Tuyo

3|Estar con ella|

Sujetando fuertemente sus caderas, embestía con brutalidad a la joven. Apretó los dedos en su piel al llegar a su liberación y la de ella, con suspiros lentos nuevamente entro en ella ahogando un gemido.

--Y...ya...ba...ba...basta Draghor, te juro que si no paras me voy a desmayar-- su respiración era agitada, y sus ojos ya querían cerrarse por el cansancio de aquel acto.

--Por favor, una vez más Violet, le prometo que está vez lo haré lento, eres deliciosa-- puso su cara en el cuello de la muchacha, dando besos para que ella se calmara, pero esta se negó.

--No, ya lo hiciste más de seis veces, tu ya cumpliste tu pago, puedes irte-- sus ojos se abrieron sorprendidos por lo que acaba de escuchar, el no quería irse, queria seguir estando con ella, quería seguir haciéndolo hasta que llegase el amanecer, aunque no faltaba mucho para ello.

--Por favor se lo ruego. En realidad me quiero quedar. Quiero amanecer junto a ti Violet, se lo pido por favor-- sabía cual era su último recurso, y se arriesgaria para conseguir lo que quería.

--No lo veo posible, dijimos que sólo sería está noche, sería está la primera y última vez-- ella ya no quería más, estaba acabada, literalmente.

Draghor al ver que ya no había más opciones, se arriesgó, sabía que lo que haría lo condenaría, pero lo deseaba más que a nada.

La beso, algo tan simple para ella, pero algo mágico para el, tenía prohibido hacerlo, sabía que se estaba condenando, pero no le importó. Era la primera vez que besaba a alguien, y le gustó, le encantó, por lo que no se detuvo. Chupo hambriento la lengua de su acompañante una y otra vez, y se comenzó a mover lento dentro de ella, sabía que ya llegaría, y sentía la fragancia que ella también ya estaba por llegar, en esos momentos agradecía su olfato muy bien desarrollado.

Y lo lograron, por séptima vez en la noche lo habían hecho, y el, aunque quería más, sabía que la chica estaba por dormirse, así que la dejó en paz, pero no se fue, se quedó con ella hasta que el más se durmió, pero no antes de que la abrazara de la cintura con sus fuertes brazos formando una cuchara.

El tenía planeado quedarse, quería estar con ella, no sólo esa noche, sino todo el tiempo en toda su existencia.

El sol se hizo presente tras las montañas pobladas de nieve totalmente blanca, el brillo llegó a las ventanas de las casas y departamentos.

Violet se enderezó al sentir la quemadura del sol en su piel desnuda, levanto los brazos y al intentar sentarse, algo la sujeto de la cintura la  tumbó en la cama.

Algo desconcierta se giro a ver a su acompañante que recién se dio cuenta de que estaba ahí. Su cabeza dio miles de vueltas, recordando lo que hizo la noche anterior, ¿por qué  no se fue? se preguntaba la muchacha, no le entraba en la cabeza el que se quedara.

Su cabeza giro para observar su celular, sus ojos se agrandaron al ver la hora, ya iba retrasada al colegio

Trato de alejar aquellos brazos que la envolvían, pero al intentar tal acto, el muchacho despertó, sus ojos - por un momento- se volvieron igual al de un gato, pero volvió a la normalidad al observar a la chica que estaba a su lado, una sonrisa creció en sus labios mostrando sus colmillos en el acto, sus orejas puntiagudo se alzaron y sus ojos color miel brillaron al recordar la noche anterior.

--¿Como está?-- pregunto Draghor acercándose a su presa.

--Bien, pero ya me tengo que ir, se me hace tarde, por eso sueltame-- la sonrisa del joven se desvaneció.

--¿A dónde?, si este es su departamento. ¿A qué se le hace tarde?-- una punzada sintió el muchacho, una punzada de celos.

--Mira, me tengo que ir a la Universidad, así que ya es hora de irme-- la chica ya se estaba  impacientando, por lo que algo brusca se soltó de el y así desnuda corrió a su ducha, tenía que bañarse porque no podía ir con esos aires.

El muchacho se sintió aliviado, si era la Universidad, entonces no importaba, no había demasiado peligro de que ella encuentre a algún otro macho que pueda llegar a complacerla, por que así lo era, el sabía y reconocía lo que sentía, no quería negarselo, su mente divagaba entre lo que sucedió horas antes y su hermano, tenía que regresar a ver como se encontraba, aunque lo dejo en buenas manos, tenía que planear algo para no alejarse de la chica, por su mente paso la idea de preñarla, pero enseguida lo desecho, tal vez usaría eso como último recurso, pero no ahora, no sabría como apañarselas para criarlo, o que les daría de comer, porque era más que obvio que no les daría comida de la basura. Draghor buscaba la posibilidad de estar cerca de ella , pero no veía ninguna.

Violet salió envuelta en una toalla con el cabello totalmente húmedo, busco su uniforme en su closet y comenzó a cambiarse enfrente de aquella bestia que la veía con lujuria. Aunque le dolía al mover su cuerpo, sabía que era por lo de anoche, más que todo era en su zona íntima, pero sabía aguantar el dolor, tenía que apurarse para no llegar tarde, tenía que estudiar el libro antes de que el profesor llegará y tomará el examen presente.

--Puedes alzar cualquier fruta, o si quieres hacerte desayuno te haces no importa, sólo te pido que no toques la laptop ni los libros-- Violet acomodo su cartera los respectivos libros y por último aliso un poco su cabello mojado.

Draghor no estaba muy tranquilo que digamos, no le gustaba la manera en la que se iba, su falda era muy corta, sus medias naylon blancas que llegan hasta sus muslos le hacían ver sexi, según el muchacho, y no quería que nadie más viera a la que era su mujer.

Aquí otro capítulo, que les parece Draghor?; a mi me parece tierno su forma de ser.

Bueno nada más, les deseo lo mejor.

Un abrazo psicológico y besos al aire.

CHAO CHAO