Vómito verbal

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Ese lunes por la mañana era distinto a muchos, al menos para ChenLe, gruñía repetidas veces mientras se esforzaba por hacer el nudo de su corbata lo más perfecto posible sin dejar de sentir esa aprehensión en su pecho que le hacía notar lo molesto que se encontraba, no se entendía del todo pero estaba enojado.

No había dejado de pensar en el beso con JiSung, pero más allá de lo que sentía con respecto a casi tragarse con su amigo (que ya era un lío), empezó a pensar en cómo JiSung había aprendido a besar así, se conocían desde que, ¿los nueve? JiSung nunca había tenido pareja o algún ligue, ChenLe muchas veces creyó que el menor era asexual ya que no le veía interés en ninguna persona y si lo tuvo en ningún momento lo mencionó y quizá era eso lo que más le molestaba.

¿Hubo o había alguien en la vida de JiSung con el que había aprendido a besar?

—¿Por qué estoy tan enojado? –el chino ajustó el nudo y miró su reflejo en el espejo, su ceño estaba fruncido, sus labios se abultaban en un mohín y sus mejillas estaban rojas del coraje, totalmente avergonzado ChenLe mordió su labio girándose para colocarse el saco mientras negaba. Por nada. No le pasaba nada.

Simplemente había despertado de malas.

JiSung en cambio despertó ese día más animado que nunca, era momento de realizar el paso número tres de su lista. Cada vez se sentía más emocionado con su plan, lograría conquistarlo a como diera lugar, ChenLe era... maravilloso, aunque había intentado olvidarlo no lo conseguía, volvía a caer por los ojitos, berrinches, sonrisa y la personalidad atrapante que sólo Qian ChenLe podía tener. No importaba lo que costara, él lograría tener al mayor entre sus brazos y lo llenaría de mucho mucho amor.

Al menos después de este paso.

Paso Tres:
« Encelarlo. »

Voy a poner celoso a ChenLe, así estaré seguro de que está interesado en mí (aunque sea un poquito) y podré seguir con mi plan. Desde ahora todos los pasos dependerán del anterior así que no puedo equivocarme. Como un barrera de dominó, si uno cae, todos los que estén frente a ese caerán.

Regla uno: No exagerar, no quiero que piense que me gusta otro o que ando de coqueto con todos.

Regla dos: Hacer que lo admita, al menos de forma sutil, si no lo hace no cuenta.

Regla tres: ChenLe es precioso refunfuñón, ni se te ocurra enloquecer, Park JiSung.

Con lo orgulloso que era ChenLe sabía que la regla dos sería una putada, y con lo loco que estaba por él la tres sería su perdición pero aún así estaba tranquilo, él podía lograrlo. Su teléfono vibró en su bolsillo luego de aparcar frente a la casa de ChenLe, era un mensaje del rubio y cuando lo leyó solo pudo fruncir el ceño.

Nene (1)

En línea

No quiero que vengas por mí, me voy solo.

7:08AM

JiSung↪

¿De qué hablas, nene?

Ya estoy afuera.

7:09AM


JiSung abrió sus ojos como platos cuando vio el mote que había usado, idiota, idiota, animal. Se reprendió a sí mismo y golpeó su frente repetidas veces sin poder creer lo estúpido que era a veces.

I. Las Reglas de JiSung. 《JiChen》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora