Cruel

Capítulo 11 (2|3)

Zedd

Me levanto con cuidado de no lastimar mi herida. Apresar de que ya han pasado dos meses todavía no me recupero del todo, un mareo me hace sentarme nuevamente en la cama, me siento frustrado al saber que estoy débil y espero con ansias recuperarme para poder ir tras Viktor Ivanok.

Una sonrisa siniestra se forma en mi rostro al imaginar lo que haré con ese bastardo ruso. Se metió con el hombre equivocado si piensa que no lo cazaré como un animal, yo disfruto jugar con mi presa,espero y no se deje atrapar fácilmente. Por que yo mismo lo llevaré al infierno por tratar de matarme.

Hago otro intento por levantarme y lo consigo. Camino lentamente hacia la ventana y mi mirada se detiene en Kira. Siento como mi corazón se acelera al recordar sus palabras. Ella me ama, sonrío fugazmente viendo como se dedica a dibujar muy concentrada en su libreta sentada en la banca del jardín. No puedo creer que irrumpieran en mi mansión que era muy segura, tal parece que me confíe demasiado. No habrá una segunda vez, ahora que nos encontramos en la casa de Sombra situada casi en el otro extremo del bosque de Komi. Debería de aprender más de Sombra es muy cuidadoso nunca lo han encontrado a pesar que su cabeza tiene un alto precio porque tiene demasiados enemigos.

Miro fijamente a Kira haciendo que me busque con la mirada. Ella me sonríe y mi corazón se descontrola. Solo ella tiene ese poder en mi con tan solo una sonrisa. ¡Estoy jodido! Ella me tiene ¿Kira que has hecho conmigo? La puerta de la habitación es abierta y Sombra entra con una bandeja. Lo veo con curiosidad por que a pesar de ser un hombre tan íntimidante de apariencia el en realidad es muy amable, aunque con muchos defectos extraños. Nunca he visto su cara o escuchado su voz real. Desde que lo conocí, él es así, tan misterioso y solitario. Las veces que el habla siempre usa un aparato que distorsiona su voz que raras veces carga con el.

El me ofrece la bandeja con un tipo de ensalada de frutas y jugo de naranja, me siento en la cama y me dispongo a comer bajo su supervisión.

—Gracias Sombra, no te hubieras molestado.

Sigo comiendo al saber que no responderá nada, estoy acostumbrado a su silencio, pero me sorprendo al escucharlo hablar.

—Ella es hermosa Koslov. —Dice con una voz muy ronca por el aparato que distorsiona su voz y viendo a través de la ventana.

—Es mi hermoso ángel ¿Crees que hice muy buena elección al hacerla mi compañera?.

Él continua viéndola y asiente con la cabeza.

—Tienes que mantenerla a salvó de tus enemigos Koslov, cuando se enteren de su unión. Vendrán por ella, se convertirá en su objetivo principal.—Dice con seriedad.

—El que se atreva a tocarla lo lamentará. Nadie se mete con mi reyna y sigue vivo si intentan hacer algo en su contra.

— Te ayudaré a mantenerla a salvó Koslov.—Dice antes de desaparecer por la puerta.

Kira pronto te unirás a mi y ya nunca podrás alejarte de mi, ángel.

***

Kira

El día llego después de estar casi tres meses en los cuales la recuperación Zedd fue mejorando, el y yo decidimos unir promesas. Veo como las personas se acomodan en el gran salón de la casa de Sombra esperando que yo aparezca hasta llegar frente a Zedd.

Me siento incómoda al ser observada por Sombra, me observa detenidamente haciendo que me tense un poco ¿Por que me observa así?

Se acearca y se sienta a mi lado yo continuo leyendo pero en realidad ya no puedo concentrarme en el libro, lo cierro y miro fijamente a Sombra.

—¿Como estas?—Pregunto pero no obtengo respuesta.

—Es muy hermoso tu jardín de tulipanes. —Continuo hablando con nervios por la unión.

—¿Debería de ayudarte a escapar?—Pregunta con voz muy ronca.

—¿Todo este tiempo has tenido el aparato y no respondes mis preguntas Sombra?.—Pregunto con molestia.

—Unos minutos más y seras la nueva reina de la dinastía Koslov Kira. Si quieres escapar lo puedes hacer ahora.—Dice viendo hacia el salón donde se encuentra un impaciente Zedd. No lo había visto pero verlo de traje negro hace que mi corazón de un vuelco.

—Sombra no quiero huir de Zedd, es sólo que estoy muy nerviosa. Pero no es que me arrepienta de unirme a él.

—No te preocupes Kira, si Koslov trata de lastimarte se las vera conmigo. —Dice con seriedad.

Yo sonrío fugazmente por sus palabras. Él es un hombre muy bueno aunque un poco solitario, en este tiempo que he vivido en su casa le he tomado un poco de cariño. Es lo más cercano que puedo comparar a un padre para mi.

Me levanto y acomodo mi vestido blanco. Sombra toma su lugar a mi lado ofreciendo su brazo que sin pensarlo enlazo con la mía. Caminamos hasta el gran salón donde todos guardan silencio al verme entrar, caminamos hasta llegar a Zedd que me mira con un brillo en su mirada y sonríe fugazmente, Sombra me suelta y le dice algo a Zedd que no logro escuchar para colocarse al lado de Darius que me mira con nostalgia. De seguro esta apunto de llorar aunque no lo admita se que es un cursi de lo peor, él me guiña un ojo y yo sonrío.

Mi vista se posa en el chico de mirada exótica, sus ojos de diferentes colores tienen un intenso brillo, mi corazón se acelera al saber que en unos minutos más estaremos completamente unidos.

Me coloco frente a él y sonrío débil. Tomo la copa en mi mano y el hace lo mismo levantándola en su mano derecha. El silencio hace que pueda escuchar algunos jadeos entre otros sollozos por parte de algunas mujeres. Evito rodar los ojos por el descaro que tienen, pero me vuelvo a concentrar en el chico de mirada exótica frente a mi.

—Con esta copa en alto juro lealtad a mi reina, todo mi ser es tuyo, seré tu roca y tu escudo en tiempos difíciles. Sostendré tu mano siempre que me necesites, juro cuidar de ti por que desde hoy te convertirás en mi otra mitad. Nuestro lazo será inquebrantable, lo que hoy unimos, nadie puede separar mi reina.

Termina de decir sus votos sin apartar su vista de mi. Mi corazón se descontrola, levanto mi copa en mi mano derecha viéndolo fijamente con una sonrisa en mi rostro.

—Con esta copa en alto juro lealtad a mi Rey, todo mi ser es tuyo, seré tu roca y escudo en tiempos difíciles. Sostendré tu mano siempre que me necesites, juro cuidar de ti por que desde hoy te convertirás en mi otra mitad. Nuestro lazo será inquebrantable, lo que hoy unimos nadie puede separar mi Rey.—Digo con seguridad al verlo como su mirada es tan intensa mi corazón se acelera.

Los dos intercambiamos las copas y bebemos sellando nuestra unión.

Él se acerca a mi y une sus labios con los míos haciendo más real la unión frente a todos los que están presentes. Se separa y sonríe fugazmente.

—Mi bello ángel ya nada ni nadie podrá separarte de mí.

Gracias por leer....