Capítulo 1

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Aquellas palabras no dejan de repetirse una y otra vez en mi mente, aún me veo sentado en la cama de mi habitación con los ojos llenos de lágrimas escuchando a Jimin hablar:

― Jungkook, creo que debemos terminar ― había dicho Jimin aquella noche, sin siquiera tartamudear. ― Hemos estado juntos un año y medio, pero los últimos meses... No han sido fáciles de sobrellevar.

― ¿Por qué? ¿He hecho algo que te ha molestado? ― pregunté, con un nudo en la garganta, queriendo gritar. ― Prometo ser mejor novio, pero, por favor, no me dejes.

― Kookie, eres el mejor novio que he tenido a lo largo de mi vida, pero esto ya no da para más. No podemos seguir engañándonos.

Jimin tenía razón, yo sabía que él estaba en lo cierto, pero no quería admitirlo. No cuando aún lo amaba como loco, no cuando dolía tanto el pensar pasar un solo día lejos de él.

― Hyung, por favor, podemos solucionarlo ― rogué, comenzando a llorar sin ningún freno ni vergüenza. ― Puedo hacer lo que sea por lo nuestro, no termines nuestra relación, por favor.

― No, Jungkook, lo siento ― susurro Jimin, con la voz quebrada. ― Lo nuestro termina aquí, desde ahora lo único que nos une es nuestra relación laboral y BTS, nada más.

Ese día Jimin salió de mi habitación, cerrando la puerta detrás de sí, y sin dejar que pudiera procesar lo que estaba sucediendo. Lo que empezó como mi primera historia de amor, se estaba cayendo a pedazos y no tenía idea cómo detenerlo. En ese momento sentí claramente mi corazón hacerse trizas mientras mis manos temblaban y no dejaba de llorar, cada vez más agitado y desesperado.

Recuerdo que ese día, Hoseok entró a mi habitación y me abrazó fuerte sin decir ninguna palabra. Es muy probable que él supiera desde antes los planes de Jimin, quizás por ello me dejó llorar toda la noche sobre su pecho.

Ya habían pasado dos meses del quiebre de nuestra relación. Sesenta y un días sin siquiera poder ver a Jimin a la cara, seis decenas de días sin poder sonreír de verdad. Ya no era el mismo Jungkook, ya no hacia bromas y me mantenía en silencio incluso más que antes, los miembros notaron el cambio e intentaban hablar conmigo, todos excepto Jimin, pero no me abrí frente a ninguno, por mucho que quería gritar.

El comeback se acercaba a pasos agigantados, estaba emocionado, como siempre, pero tenía miedo de que las fans se dieran cuenta de mi cambio y en la forma de tratarnos con Jimin. Él ha cumplido al pie de la letra lo que prometió, nuestra relación se enfocaba estrictamente en algo laboral, lo que hacía arder mi pecho cada vez que me dirigía la palabra para solucionar algo de la coreografía o para armonizar bien nuestras voces en las canciones. Yo simplemente me limitaba a asentir, sin comprender cómo él podía actuar como si nada, cómo podía reír junto a los demás miembros.

¿Nuestra relación no significó nada para él? ¿Jimin realmente supero lo nuestro tan rápido? Claramente nuestro amor no es como las canciones de amor con un final feliz.

Desde que nuestra relación terminó, no había ni siquiera una noche en la que no entrara en un estado de depresión, en el que lloraba y bebía alcohol a solas en mi habitación. Cuando los demás se daban cuenta, Seokjin y Namjoon pasaban varios minutos frente a mi puerta, que estaba cerrada con pestillo, rogando a que les abriera y dejara de beber. Hacerlos sentir mal y preocuparlos, hacía que mi corazón doliera aún más, pero es que no podía detenerme, necesitaba olvidarme del dolor, aunque eso significara utilizar el alcohol.

Constantemente me preguntaba si algún día superaría todo esto, si volvería a hacer el Jungkook alegre, risueño y con ganas de luchar por sus sueños. La pregunta que me ha perseguido estos últimos meses, sobre si hay esperanzas de volver, cada vez posee una respuesta más clara y concisa: no, no hay esperanzas. 

No sabía que dolería de esta manera (Jikookmin) (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora