Todos sabemos qué hay una especie de "cosas que no pueden faltar para tomar un trasporte público" en mi caso son los audífonos, música, un libro y una serie descargada.
Hace unos días en el metro ya que venía hablando con alguien y se supone que soy educada no traía los audífonos puestos pero cuando mi amiga se baja en el cambio de estación y medio tren veo un lugar donde voy a acomodarme para leer pero se sube un seguridad voceando ¡un asiento por favor! Y me paré, claro estaba molesta y me quede parada. La cosa es que los que se subieron eran ciegos y por esa ocasión no me arrepiento de no estar escuchando música/viendo series ya que la actitud del muchacho ciego era tan fresca y tan cómica el literalmente se burlaba de él mismo (incluyendo a sus amigos) lo mejor que el no andaba quejándose todo lo contrario si el no decía ni cuenta te dabas que era ciego ¡Ah! Hizo unos chistes que tenían al vagón entero muerto de la risa.
Al final del día todo es como lo vez y la actitud que pones. Aveces vale la pena escarchar el ruido a tu alrededor, menos un sábado a las 7 de la mañana en una guagua llena y con una bachata y dembow a todo lo que da.
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Desde mi Perspectiva
Short StorySerán un conjunto de historias ficticias que tendrán lugar en los transportes públicos de Santo Domingo (RD). "Hoy de todos los días se me ocurre no revisar la mochila y ver si traía audífonos... y el chofer nada de avanzar ¡mierda! a este ritmo ll...