𝘼𝙙𝙫𝙚𝙣𝙩𝙪𝙧𝙚𝙨 | 𝙁𝙖𝙢𝙞𝙡𝙮 𝙡𝙞𝙣𝙚

𝙍𝙪𝙣 𝙛𝙤𝙧 𝙩𝙝𝙚 𝙩𝙤𝙮𝙨

Ya era viernes, el inicio de diciembre y el frío era demasiado fuerte, casi tan fuerte como el resfriado que tenía Tzuyu ese día.
Desde que se había despertado, tenía muy roja su nariz y no tenía fuerza ni para levantarse.
Debido a su estado mejor no fue a la primaria, se quedó con su madre, que por suerte ese día no tenía que asistir al trabajo.

Mientras la niña estaba en su cama durmiendo, Nayeon decidió empezar a decorar la casa. Puso un inflable de Santa Claus a un costado de la puerta de la entrada y un montón de luces en las ventanas, la orilla del techo de la casa (que por cierto, cuando se subió a la escalera para ponerlas, casi se caía), el pequeño árbol de la acera de la calle y las macetas. El pago de la luz saldría muy caro ese mes, pero valía completamente la pena.

Luego llegaron las otras dos miembros de la familia, asombradas por el genial trabajo que había hecho Nayeon con la decoración de la casa.

Para ese entonces Tzuyu ya se sentía con la suficiente fuerza para levantarse y moverse.

Después de comer algo, fueron a comprar un árbol de navidad.

-¡Mamá! ¡Ese es gigante! ¡Mida!- gritó como nunca Chaeyoung al ver un pino de unos 2 metros.

-¿Podemos compdad ede? ¿Pod favod?- comenzó a jalar la camiseta de Jeongyeon e hizo uno de sus famosos pucheros de cuando quiere conseguir algo.
Para suerte de la pequeña, nadie se resistía a su ternura, y llegaron a casa con el super pino que ella escogió.

[...]

Rápidamente se hizo de noche, después de ver una película en Netflix, Jeongyeon y Nayeon bajaron las decoraciones para el pino.

-¡NAYEON! TEN CUIDADO CON LA ESFE...- luego se escuchó que algo se estrelló.

-Ra...- suspiró la rubia y la risa nerviosa de Nayeon se hizo presente.

-Lo siento Jeongyeonie- dijo mientras acariciaba el cabello de la mencionada.

-¡Pabo!- respondió Jeongyeon y le dio un golpe en la frente. Luego limpió los restos de esfera que estaban en el piso.

Después de la muerte de esa esfera tranquilamente pusieron las decoraciones.

-Cariño, ayúdame a poner la estrella ¿Si?- dijo Jeongyeon a su pequeña resfriada, ella asintió y tomo la estrella dorada con sus manos, y comenzó a saltar para intentar ponerla.
Lamentablemente no logró alcanzar la punta por más que se estirara o brincara.
Las dos mayores comenzaron a reír por lo increíblemente adorable que se veía el intento inútil de Tzuyu.

-Tzuyu-sshi, súbete en mis hombros, te ayudaré- Nayeon se agachó y subió a su hija en dicho lugar. Luego con cuidado de no dejarla caer, se acercó al arbolito.

Tzuyu sonrió al ver que la estrella ya brillaba en la cima del pino de navidad gracias a ella, y Nayeon sonrió al darse cuenta de que Jeongyeon las había grabado con su celular para recordar ese momento.

-¿Y qué le vas a pedir a Papá Noel?- le preguntó Tzuyu a su hermanita después de bajarse de su madre, buscando un par de hojas.

-Toma, aquí escribe lo que quieras que te traiga de regalo, ¿Te portaste bien éste año?- la pequeña asintió.

-Bien, porque si fuiste niña mala te va a traer carbón- las mayores que estaban escuchando la conversación de sus hijas se taparon la boca para evitar reírse por la cara que hizo Chaeyoung.

[...]

Ya era una semana antes de navidad y aún no habían comprado los regalos para las niñas y tenían que apurarse si querían tener todo listo para entonces.