Supe lo que vivimos mas no lo que sufrimos. Estábamos unidos y sonreímos, y ahora siento que hiciste un buen trabajo al fingir.
¿Cómo creer que es verdad, fue y será?, mi corazón quebrado me nubla los ojos sin pensar.
Tu mentira o tu verdad me perturban. Una porque es el tormento más profundo y doloroso que te pueden clavar en forma de puñal; la otra porque te das cuenta que tiene límite. ¡No!, la verdad nunca tiene límite ni caducidad.
¿Me mentiste?, no lo sé.
No pude dejarte de querer, ya no hay amor, pues para mantenerlo los dos tenemos que estar de acuerdo. Saliste del juego y mi corazón.
Botaste la llave y me dejaste atrás, para ir a sus brazos y ser verdaderamente feliz con ella.
¿Qué sentido tenía entrar si ibas sólo a esculcar, a quedarte un suspiro?, yo te anhelaba eternamente, grave error, pues tal altar sublime a sentimientos se quebró desde los cielos.
Usurpando en mi agonía encontré al antiguo sentimiento. Mirando los recuerdos estancados, obsesionándome con el único donde el amor se manifestó entre los dos. En ese momento no dude, de ahí la razón de mi ilusión al vernos los dos, juntos, con nuestras manos unidas. Unión inquebrantable. Claro, nunca fue, pues lo que más quiero ahora...es olvidarte.
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A la mano que me soltó
Short Story... Pequeños escritos dedicados a la persona que más amaste, que si fuera por ti, no hubieras dejado ir tan pronto...o nunca. Conoce el lado desgarrador de un corazón cortado con el filo del desamor. ...
