Min Yoongi tenía tan solo seis años cuando su vida dio un giro de 360° y todo su universo se desmoronó. Aún recordaba el suceso que, oculto en lo más profundo de su mente, solía salir a la luz en los momentos en los que peor se sentía. Una puerta imaginaria se abría en su mente y de ella salían todas aquellas cosas que tanto se había esforzado en olvidar.
Styx era la más dolorosa de ellas.
Incluso ahora, a sus veintitres años, la simple mención de ese nombre le hacía tragar saliva y apretar los puños con fuerza. No quería tener que ver nada con eso, pero aquella imagen se le quedó grabada a fuego en el cerebro.
Styx. El nombre de un río maldito. El nombre de un río que corre por el infierno, el nombre de un río sobre cual juraban los antiguos dioses. Pero aquél nombre no tenía nada de sagrado; no para él.
Styx era, también, el nombre de la banda criminal que prácticamente controlaba toda Corea del Sur. Y también era la banda criminal que mató a su familia.
Yoongi todavía recordaba aquel día. Recordaba el grito que murió ahogado en su garganta mientras, escondido en un armario, observaba la terrible escena ante sus ojos. Recordaba las lágrimas congeladas en sus ojos, que no se atrevieron a salir hasta que se supo a salvo de aquellos hombres. Recordaba el ácido sabor del vomito, quemándole la garganta, desesperado por salir de su boca. Recordaba el dolor, la pérdida, el terror.
Y, sobretodo, recordaba aquel nombre maldito escrito con sangre sobre la blanca pared de su hogar.
Styx.
No, definitivamente, Yoongi no quería volver a oír de Styx en su vida. Por eso, cuando el jefe de la pequeña y secreta organización para la que trabajaba le dijo que debía infiltrarse en la banda que arruinó su vida, su única reacción fue sacarle el dedo del medio y salir por la puerta como si no le hubiese faltado al respeto a su superior. Aquello rompía por completo todas las normas no escritas que había estado siguiendo tan cuidadosamente durante toda su vida.
Entonces, ¿por qué se encontraba de camino a la capital, preparado para cometer un crimen que le pondría en la mira de aquellos a los que tanto odiaba?
La respuesta era sencilla: Min Yoongi era una persona vengativa, e iba a destruir a Styx.
Iba a arruinarles de la misma forma en la que le arruinaron a él.
La bella y hermosa portada está hecho por CaveCrew y Den_Queen. Gracias❤️
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Sweet Surrender |Yoonmin|
Fiksi PenggemarPark Jimin era el líder de Styx, la mafia más peligrosa de Corea del Sur. Todos lo sabían, todos reconocían aquel nombre cuando lo oían, todos se estremecían cuando observaban el horrible desastre que dejaba a su paso. Park Jimin tenía a toda la po...