Pensamientos

Un encuentro inesperado

¿Cuanto tiempo había estado escapando y buscando al mismo tiempo? No sabía realmente pero de algo estaba seguro: esos perros pagarían por lo que habían hecho. Frunció el ceño mientras jugaba con el anillo en sus manos, desde que había bajado de la montaña que no sabía donde estaba él. ¿Dónde se había metido justo en ese tiempo? ¡No era momento para jugar! Se sintió culpable unos momentos: ¿en verdad jugaría de esa forma? ¿sería realmente capaz?

No pudo completar ese pensamiento ya que sintió unos pasos detrás, y tuvo que ponerse en guardia. No podía bajarla, los perros Wen todavía seguían dando vueltas. El ruido del látigo resonó y estaba listo para atacar y masacrar a quien fuera.... Todo eso hasta que escuchó una voz.

-Lider....

Quien sea que lo estaba llamando se detuvo casi al instante al sentir el látigo pasar cerca suyo, pero también su dueño se resistió cuando reconoció la otra figura.

-¡¿TU?!

De entre todas las personas que había esperado... Realmente de entre todos, había sido a quien menos había esperado. Dejó escapar el aire que no sabía que había retenido para bajar solo un poquito la guardia. Solo un poco. No sea cosa que fuera algún truco...

-Lider Jiang....- volvió a hablarle con tranquilidad. La sonrisa no había abandonado su rostro a pesar del encuentro cercano con el látigo.- Lo he estado buscando...

Lo observó unos momentos mientras evaluaba esas palabras. ¿Buscarlo? ¿Por qué? ¿Por qué debían de buscarlo precisamente a él? Frunció otra vez el ceño y apretó un puño, si bien el látigo ya había regresado a su forma de anillo se podía sentir la energía espiritual ahí.

-¿A mi?- no podía evitar desconfiar. No confiaba en nadie en esos momentos, en la única persona que había confiado se había desvanecido y la otra.... No. Mejor no pensarlo. No era el momento.- ¿Qué necesita de mi?

El joven Lan juntó sus manos e hizo una señal de saludo en forma de respeto. Las noticias habían llegado a Gusu, y ciertamente habían querido ayudar.... Recordaba la expresión de su hermano cuando se enteraron...

-Lider Jiang, ¿que le parece si nos movemos a un lugar más cómodo? Hablar aquí.... quizás no sea buena idea.

No sólo debía comentarle las razones sino también todo lo que planeaban hacer. Y necesitaba que confiara en él... Tardó un poco en convencerlo de moverse de ese lugar, de buscar un refugio pero finalmente lo hizo. Cuando llegaron a una posada, solo quedaba una habitación.... Doble. Matrimonial... Por supuesto que el joven de ropas violeta se negó rotundamente al inicio

-¡¿CÓMO ES POSIBLE QUE NO LE QUEDEN MÁS LUGARES?!

Tuvo que taparle la boca muy a su pesar. ¡Si lo viera su tío seguramente lo regañaría por no ser cortes! ¡Pero de otro modo llamarían muchísimo la atención! Cuando finalmente obtuvieron la habitación y hablaron....

-Así que ese es el plan.... - y ciertamente seguía molesto. Claro, era mejor hablar en una habitación sellada que en un lugar donde cualquiera pudieran verlos y escucharlos pero.... ¿decirlo en voz alta? JAMÁS.

-Lo necesitamos Lider Jieng, solamente con su presencia podremos lograr voltear la situación.... Buscamos el mismo objetivo: derrotar al clan Wen.

-Querrás decir, patear a los perros Wen. - estaba lleno de odio hacia ellos, no le perdonaría jamás lo sucedido. Si fuera por él, mataría a cada uno de ellos con sus propias manos- ¿Cuando dijiste que sería esa reunión?

-Tenemos que llegar al lugar de encuentro en tres semanas...

-Aún si llegamos.... Te recuerdo que mi clan ha sido totalmente aniquilado.- y no pudo evitar el gesto de llevarse una mano al anillo pensando en sus padres. Especialmente su madre.

-No totalmente.- y Xichen que había estado sentado observando se levantó, podía ver reflejado el dolor en las actitudes del Lider del Clan Jieng. Podía notar también por sus ropas lo mucho que había pasado... Por eso también esa decisión. Colocó una mano en el hombro del otro quien lo miro al inicio como si no le gustara ese gesto de confianza- Usted está vivo, y seguramente el joven Wei también. Su hermana esta a salvo... Lo ayudaremos a reconstruir el clan. No pierda las esperanzas....

-......- al pensar en su hermana, un nudo se le formó en la garganta y simplemente quito la mano de Lan Xichen de su hombro para darle la espalda.... Después de tantas cosas que habían pasado... había escuchado palabras que deseaba escuchar.- ¿Y qué ganarán ustedes?

Una sonrisa se volvió a posicionar en el rostro del otro. Por unos segundos pensó que quizás.... no había tenido el resultado esperado, pero después de todo el joven Cheng no les daría la espalda.

-Todos ganaremos lo mismo: paz.