snapchat ── jensoo

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A decir verdad Jisoo se sentía algo confundida ante la repentina propuesta de su pequeña amiga, pasó un rato pensando en aquella "noticia importante" que tenía que decirle, aunque seguramente solamente quería salir y uso eso como excusa─no era la primera vez que lo hacía, claro está─. Ella nunca fue una persona a la que le gustará salir, siempre fue muy tranquila en esos aspectos, no era una fanática de salir a bailar por las noches y beber hasta que perdiera el uso de razón y terminar en la cama de un completo desconocido, era muy consciente que salir con Jennie no implicaba nada de eso, tal vez por eso ponía aún más empeño en verse bien para la más pequeña.

Rápidamente se dirigió a la ducha y dejó que el agua cayera por su cuerpo hasta estar empapada, enjabonó su cuerpo disfrutando el dulce aroma que este dejaba sobre ella, salió del pequeño baño y se dirigió a su habitación. Una vez vestida con ropa casual y cómoda pasó a su tocador. Abrió el cajón y sacó su secador al mismo tiempo que ponía algo de música en su teléfono. Pasó el aire caliente por su cabello un tiempo hasta que esté estuvo lo suficientemente seco para ser peinado, pasó la plancha por el mismo y lo cepillo un par de veces, puso un poco de maquillaje en su rostro y guardo lo necesario en su bolso.

Espero menos de cinco minutos antes de que el tiembre de su apartamento sonara, se levantó con emoción de su pequeño sofá y se dirigió a la puerta principal. Aclaró su garganta y abrió la puerta.

Como si de una colegiala se tratara su corazón no se controló cuando vió a su pequeña amiga frente a ella con esa particular cuadrada sonrisa.

─¡Jisoo Unnie!─El estruendoso saludo de la menor la hizo salir de su burbuja de corazones.─Me alegra mucho que haya aceptado salir conmigo.

─No es nada Jennie-shi, adelante, pasa.─La mayor se movió dándole pasó a la nombrada, realmente no sabía porque le dijo que pasará si ella venía a recogerla, probablemente quería pasar más tiempo con ella.─¿Quieres algo de tomar?

─No, gracias Jisoo Unnie, de hecho, estaba pensando en ir a una cafetería a la que fui recientemente.─Jennie sonrió con ilusión, mostrando los dientes.─¿Nos vamos?

Jisoo sonrió tratando de calmar todo lo que sentía y se acercó a la menor para posteriormente abrir la puerta y salir.

Las hojas de los árboles generaban un agradable sonido al oído transmitiendo tranquilidad al instante y junto a sus pasos en perfecta sincronización generaban un ambiente cálido. La voz de Jennie le resultaba genuinamente las dulce a Jisoo,lo que probablemente explica porque se quedó como boba escuchando sus chocoaventuras y en respuesta solamente asentía, su particular cuadrada sonrisa también le robó uno que otro suspiro a lo largo del no tan largo camino a su destino, aunque ella lo negara su corazón aún se ponía feliz al verla, al escucharla y al sentirla nuevamente.

Al finalmente llegar al pequeño café, Jennie abrió paso a Jisoo moviéndose a su derecha─cosa que hizo que el corazón de la mayor se sintiera feliz─cuando encontraron una mesa algo alejada de todas las personas finalmente se sentaron juntas.

─¿De qué querías hablar, Jennie-ssi?─Jennie sintió su cuerpo temblar cuando la pelinegra la cuestionó, a pesar de que aún no le decía la tan ansiada noticia le daba algo de temor decirla.

Cuando estaba apunto de comenzar a hablar, el amable mesero de aquel café se acercó a ellas entregando la carta del lugar, diciendo que podían llamar su nombre cuando su orden estuviera lista para posteriormente hacer una reverencia y alejarse de amabas chicas.

─Aquel mesero te veía raro.─Jennie hizo un tierno mofete y rodó los ojos a lo que Jisoo rió levemente embobada mostrando sus perfectamente alineados.

─Aish, nada que ver, Jendeukie.─Dijo rascándose la nuca y riendo levemente.

─¿Jendeukie?─Jennie levantó las cejas mientras mostraba su sonrisa cuadrada.─¿Nuevo apodo o algo así?─Jisoo asintió levantando los hombros.

─Bien, ¿qué me querías decir, Jendeukie?─A pesar de sentirse nerviosa, la calidez de Jisoo la hacía sentir más tranquila y segura de sí.─Te escucho.

Jennie tomó un poco de aire e instintivamente movió su cabello al lado contrario, rascó su rodilla y se encaminó a decir la tan importante noticia.

─Desde que Taehyung y yo... terminamos nuestra relación─Jennie habló con melancolía en su voz, aún dolía.─He pensado mucho en nosotras y todo lo que ha pasado estos últimos meses.

Jisoo asintió escuchando atenta todo lo que la morena decía, en un intento de hacerla sentir mejor tomó su mano haciendo que está sonriera.

─Mis sentimientos han cambiado y, no se realmente que sentir.

Jisoo trató de no soltar un grito al oír las palabras de Jennie, en su corazón volvió a crecer la posibilidad de estar con ella nuevamente, volver a estar con la que hace algunos años se veía hacer una vida. Mentiría si dijera que no estuvo con más personas durante todo este tiempo, estuvo con un chico llamado Iseul el cual tuvo la oportunidad de estudiar fuera de Corea y obviamente no la desaprovechó, su relación fue estable los primeros meses, pero la necesidad de verse crecía y el tiempo parecía no pasar y por el bien de ambos decidieron terminar.

─¿Qué es lo que quieres decir? Jennie yo-

El corazón de la mayor se detuvo al sentir los cálidos labios de su acompañante sobre los suyos, tomando su cara entre sus manos; no supo cómo reaccionar al principio, pero cuando su cerebro logró procesar todo lo que estaba pasando con algo de suerte─porque aún seguía haciéndose la idea─logro seguir el repentino beso. Ninguna de las dos dijo nada al separarse, solamente rieron.

El mundo de Jisoo se pintó de rosa al sentir los delicados dedos de Jennie unirse a los suyos, todo parecía tan utópico. Mientras tanto, Jennie sentía esa calidez en su corazón de nuevo, sentía la sensación de estar solamente con ella y con nadie más, se sentía viva otra vez. Sentía como sus piernas temblaban por los nervios del momento y la cara algo roja por los penetrantes ojos marrones de Jisoo.

─Que inesperada noticia.─Jisoo habló riendo, acariciando la extensión de la mano de la contraria.

Y así continuó la noche, con muchas platicas de temas triviales, manos entrelazadas, historias de su adolescencia, sonrojos y uno que otro beso inesperado; acompañado del café que el mesero había entregado minutos antes.

Jennie sentía todo girar entorno a ellas dos, el corazón a mil por hora, la sensación de bienestar al estar con la mayor simplemente la hacía sentir en el cielo. Aunque aún después de todo eso aún no sabía que tipo de relación tenía con la mayor.

─Yah, Jisoo.─La mayor levantó el rostro y miró a Jennie─¿Qué tipo de relación tenemos ahora?─Sintió su cara arder al momento de hacer la pregunta, no parecía tan difícil en su mente.

─Lo que tú desees, Jendeukie.