DESPERTARES: ¿Realidad o fantasía?

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La mañana era limpia, los rayos del sol daban justo en su rostro. Era molesto no poder ponerse de pie y correr la maldita cortina, pero algo aparte de la luz lo puso en alerta, alguien estaba a su lado, su brazo estaba de bajo su nuca. Y fue cuándo con temor regreso la vista a su acompañante. -Mierda- ¿Qué demonios hacía Erik en su cama?, desnudo. Levantó las sábanas, los dos estaban desnudos. Mierda, lo único que podía recordar era el dolor y las voces que lo dejan inmóvil en desesperación, no había más. Quería saber que demonios había sucedido. Erik se había largado hace tiempo, y ahora estaba en su cama. No dudo en despertarlo y aclarar "todo". -Erik, despierta. Demonios me escuchas. Despierta-. Erik abrió los ojos de golpe para encontrar a Charles medio sentado en la cama y con un gesto de furia. -¿Quiero que me expliques que mierda haces aquí?-. Erik estaba confundido.

Su rostro era de total preocupación. Algo muy malo había sucedido. Charles estaba activo, se movía, gesticulaba, hablaba pero estaba hecho una fiera, nada, nada estaba bien. -Responde carajo, me vas a dejar como idiota hablando-, Erik no dijo nada, se levanto de la cama y se vistió. Iba a salir de la habitación pero Charles, lo detuvo con un discurso (digno de un Oscar). -Bravo Lehnsherr, eso no es nuevo en ti, salir huyendo. Quiero una explicación, ¿Qué haces en mi casa, en mi cama y en mi vida?, hasta dónde recuerdo me dejaste tirado en la playa, desangrándome y paralizado de las piernas, ya lo olvidaste-.
Eso fue un duro golpe para Erik, ya habían pasado largos meses desde que regreso y había pedido disculpas a Charles, el había llorado, se habían amado, había hecho crecer rosales para él. Un ataque de histeria amenazaba su estabilidad, ¿Y si Charles de verdad, no se entero de nada?, ¿Qué tal si nunca estuvo ahí?, ¿Y si todos esos ligeros cambios que veía eran producto de su imaginación?, no podía hablar, se sentía igual o peor que cuándo lo vio por primera vez a su regreso.

Lo vio ponerse la primera playera que encontró, Erik caminó al mueble, saco un pants y se lo dio. Se vistió con dificultad, ahora sería un reto subir a la silla y huir de ahí. Estuvo a punto de caer al piso, Erik lo sostuvo y lo ayudó a sentarse,
-Exactamente para eso no quería que regresaras, no quiero tu puta lastima, no quiero tu maldita ayuda, deberías irte Erik y no volver jamás-.
Avanzó a la salida de la habitación dejando a Erik atrás. Se sorprendió al salir en dirección de la sala, había luz dentro de la mansión, estaba limpia y olía a madera. Había jarrones de flores en algunos lugares, rosas rojas, como las que vio al despertar a un lado de su cama. Erik caminó detrás de él, no quería hablar ya que podría cagarla, no dijo nada.

Llegó a la mitad de la estancia, y volvió a arremeter contra Erik. -Deja de seguirme, no puedo estar tranquilo ni en mi propia casa, vete. Quiero que te vayas-, Erik negó con la cabeza.
-Mira Erik, no me obligues a echarte por la fuerza. ¡Logan, Logan, ven. Te necesito!- La voz de Charles sonaba por toda la mansión, Hank salió del laboratorio, Raven bajo corriendo las escaleras y Logan salió de la oficina de Charles. Estaban sorprendidos de verlo actuar como antes, como si nada, pero ahora los preocupaba que estaba furibundo tratando de echar a Erik de la mansión -Quiero que te vayas Erik, por favor- Erik se acercó a la silla de ruedas para verlo a los ojos y le dijo que no se iría. -Erik, no hagas esto más difícil, tú no me amas, me lo demostraste al irte. Yo te necesitaba y te fuiste. Ahora vuelves por que tienes culpa y lástima por mí, pero eso no es amor. Así que necesito que te vayas, A H O R A-.

Los otros tres miraban la escena estupefactos, pero no hablaron. Erik no dijo nada, se puso de pié, caminó varios pasos y escucho un grito desgarrador detrás de él. Charles gritaba, tenía su cabeza entre las manos, se mecía en todas direcciones, Erik corrió hacía él pero ya era tarde había colapsado cayendo con todo su peso sobre el piso de madera. Habían vuelto de nuevo esas voces y sus lamentos, y el dolor que lo partía en dos.

DESPERTARES (CHERIK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora