¿A qué precio? Klance one-shot

Parte única

¿Por qué dolía tanto? Ah claro, el hecho de saber que la persona que te gusta le ha pedido una cita a una chica súper increíble, con un cuerpazo bien desarrollado y guapísima, que, además de eso, es una princesa... dolía, y mucho.

Keith y Lance pasaron de ser rivales, después compañeros, e incluso más tarde, amigos; muy buenos amigos, pero no nos equivoquemos, Lance estaba enamorado de Allura.

¿Qué más podía hacer él? Ex paladín del león rojo (actual paladín del león negro), un lobo solitario, un alienígena mitad galra... pues estar allí, como buen amigo que era y debía ser. Todo por ver a Lance feliz...

Como Shiro ya había dicho, todos tenían que pasar sus últimos momentos viendo o recordando lo que más les gustaba de la Tierra; Keith decidió ir a ver cómo el Sol se ponía sobre el horizonte al lado de su fiel amigo y compañero cósmico Kosmo.

Mientras el Sol cae, llega Lance vestido... ¿cómo decirlo? Extravagante... sí, extravagantemente gracias a Korann. Se sienta al lado del líder de Voltron.

- ¿Estás pensando llevar eso en la cita con Allura? – pregunta Keith

- Qué va... me lo ha puesto Korann, ya sabes cómo es... ¡Hasta me ha hecho un interrogatorio para ver si era merecedor de su "hija"! ¿Te lo puedes creer? – responde el paladín rojo

- Después de estar prácticamente un año en el espacio... cualquier cosa es posible – responde con una sonrisa adornando en su cara, ojalá esa cita fuese para él, pero no podía mostrar sus sentimientos a Lance, él ya tenía a Allura – ¿estás nervioso o algo? – pregunta

- Bueno... la verdad es que sí, he esperado este momento por mucho tiempo, ¿y si no le gusto? ¿Y si en realidad está jugando con mis sentimientos? Agh...

- Lance, tranquilízate. Lo primero, si ella ha accedido a una cita contigo, es porque le gustas, el incordioso e idiota de Lance, el chico cubano de la Tierra, no te preocupes por nada más, sé tú mismo. Pero lo más importante, no cambies por ella.

- Gracias... - a Lance le crece algo en el interior... seguramente no será nada, así que lo deja pasar

Cuando acaba de ponerse el sol, Lance se va a su cita con la princesa. Mientras, Keith se queda allí un rato más, al lado de Kosmo, sintiéndose querido al menos por alguien que no sean ni Shiro ni Krolia.

Al final todo sale como se espera, Lance y Allura al final acaban saliendo. Son la pareja perfecta; el gran chico cubano, tez morena y ojos azules como el mar y la princesa intergaláctica del espacio están saliendo. Todos son muy felices... pero ¿a qué precio?

Keith pasó varias semanas un poco distante con Allura y Lance, ya que, como todo sabemos, estaba enamorado del paladín rojo. Ojalá fuese él con el cual compartiese momentos especiales con Lance, o con el cual pasar los domingos tranquilos por la mañana abrazado a él, o con quien compartir sus inseguridades y todo lo que le atormentaba por dentro desde que era un niño. Pero no podía, Lance no era para él, Lance nunca se fijaría en él.

Así que, lo único que hizo, fue estar al lado suyo, para ayudar a levantarle cuando lo necesitase, porque para eso estaban los amigos, ¿no? Cosa que no hacía Allura. Había algo extraño en ella, pero ¿el qué?

Meses pasaron, y la relación entre Allura y Lance empezó a ser... diferente. Ya no eran los mismos que hace unos meses, ya no eran la pareja "perfecta" que una vez fueron. Y eso preocupó al grupo de Voltron, que sabían que ellos dos estaban muy enamorados el uno del otro, según cómo se veían. Aunque la realidad era otra; Lance se dio cuenta que Allura todavía seguía enamorada de Lotor y que él era el segundo plato, ¿cómo no lo vio?

Acabaron cortando, y cómo no, Keith estuvo allí para Lance, para ser un lugar donde llorar, donde poder contar sus penas; mientras Keith seguía reprimiendo todos sus sentimientos, pero ¿a qué precio?

kimmicchi
Espero que te haya gustado si la has leído y has llegado hasta aquí, y estoy pensando en hacer varios one-shots Klance, ya que no me ha gustado mucho como ha acabado Voltron y una historia un poco más larga.