Dena-val |Amor| [SpaceHusbands/Spirk]

kehkuh

"A menudo el sepulcro encierra, sin saberlo, dos corazones en el mismo ataúd."

2267. Cuadrante Delta, Nuevo Vulcano. 

—Spock, tu padre me avisó de tu llegada, eres bienvenido. —Desde su posición en el patio logró divisar a T'Pol, llevaba una túnica sencilla y le miraba de forma maternal— La mesa ya está dispuesta, entren.

Al escuchar el pedido se levantó e intentó sacudir el polvo de su túnica, pero los niños no parecían interesados en moverse de su lugar, parecía que habían decidido ignorar el llamado de la mujer. 

—Hijos míos, ya han escuchado a T'Pol. —Spock tenía un semblante serio e inquebrantable, pero su voz estaba llena de todo el amor que sentía por ambos pequeños. — Recuerden que deben guardar obediencia a sus mayores.

Sorek miró a su padre con un puchero mal disimulado, su mirada era una silenciosa petición de seguir "investigando" en el patio. Sabyk, por el contrario, se levantó de inmediato y se disculpó con una pequeña reverencia de su cabeza. 

— Spock, tengo 179 años, y sin duda sé cómo tratar con reclutas rebeldes. —comentó con fingida molestia la mujer. —No debes sentir preocupación por mí

 Ambos se miraron con complicidad, esa mujer que parecía no ser maltratada por el tiempo era una de los pocos sobrevivientes del Alto Comando Vulcano, comandante y oficial científica retirada que sirvió mucho antes que él en la Enterprise, cuando los humanos comenzaron a explorar los confines del universo y que, como Sarek, y como él, fue encantada por un ilógico humano.   

—Lo único que siento por usted es una enorme gratitud, me ha ayudado en la crianza de Sabyk y de Sorek sin reclamo alguno. —ella sonrió, como sólo un vulcano puede hacerlo, antes de entrar de nueva cuenta a la casa, tras ella caminaron Sabyk y Spock que cargaba a un inconforme Sorek en brazos.  

Se lavaron las manos y el rostro con tal concentración que parecía todo un ritual, y en completo silencio se ubicaron en sus asientos en el comedor principal de la gran casa.

—¿Cómo se encuentra T'Meni y Tuvok? —preguntó Spock, iniciando una conversación cordial con T'Pol.

—T'Meni se está dedicando a la crianza de su hijo, su esposo quería dedicarse de forma activa en la crianza pero tenía la obligación de partir en una misión de exploración. —T'Pol llevó otra cucharada de caldo a su boca—  Antes del nacimiento del niño ambos eran oficiales científicos de la Flota Esteral, naturalmente uno de ellos tuvo que pausar su carrera. 

—Puedo suponer, entonces, que el pequeño Tuvok se encuentra en un estado óptimo. —

—Lo está. No es muy común ver a vulcanos de piel oscura, y debemos estar agradecidos con los dioses porque no perdimos esa variación física tras el ataque de la Narada. —De pronto las mejillas de la mujer se tiñeron de un leve verde. — Debo admitir que el niño me parece visualmente agradable. 

El almuerzo finalizó sin contratiempos, sus hijos subieron a sus respectivas habitaciones a realizar sus deberes de la academia, Sarek comentó que debía asistir a una reunión del consejo de la Academia Vulcana de Ciencias y que regresaría entrada la noche. 

"Iré a mis aposentos, si necesitas algo solo avísame."  Le dijo T'Pol antes de que cada uno tomara su camino para realizar sus actividades del día, Spock no tenía tiempo para descansar luego de su largo viaje, había papeleo que llenar e informes por revisar y avalar.   

Su oficina se encontraba en perfecto estado -y sin ninguna sorpresa por parte del inquieto Sorek- encendió algunas velas  y se sentó mientras revisaba los documentos en su PADD, tenía una larga noche por delante. 

Un leve toque en su puerta le sacó de su estado de concentración, Sarek entró a su oficina y en ese momento Spock se percató del rápido pasar del tiempo, al mirar hacia uno de los ventanales en la habitación se percató de la completa penumbra. 

—Hijo mío, tenemos que hablar. —Tras esa afirmación todo el cuerpo de Spock se estremeció, tras su padre se encontraba nada más ni nada menos que T'Pau. 

— T'Pau. —Spock se levantó inmediatamente de su asiento y caminó hasta donde se encontraba la mujer para realizar una reverencia. 

—Spock...—La mujer levantó su mano suavemente y realizó el Ta'al, algo no parecía cuadrar del todo, pero aun así correspondió el saludo. —Al igual que tú, Spock Cha'Sarek, yo he regresado recientemente a nuestro hogar, Nuevo Vulcano; como sabrás, en mi papel de diplomática realicé un corto viaje al planeta tierra...  lamentablemente, durante mi estadía se me encomendó la misión de hacerte llegar esto.—  Fue entonces que ella sacó un pequeño sobre de entre sus ropajes y lo depositó en las manos de Spock. 

El híbrido lo recibió sin entender que pasaba y lo abrió ante la mirada distante de ambos ancianos. Todo lo que había dentro era una hoja de papel y un pequeño dispositivo que él reconocía muy bien, se le hizo entrega de uno similar tras la muerte de Spock Prime.

 15 de Julio de 2267. San Francisco, California, EUA.

Estimado

Embajador Spock Cha'Sarek,

Por medio de la presente La Flota Estelar y los altos mandos de La Federación Unida de Planetas lamentan profundamente el deceso de la tripulación de la USS Enterprise NCC-1701, nave de exploración clase Constitución de la Flota Estelar de la Federación Unida de Planetas y una de las naves insignia de la misma, durante una misión de exploración más allá de la Nebulosa, nave en la que usted sirvió como capitán y primer Oficial Científico durante un importante lapso de tiempo.

Realmente lamentamos la pérdida, la Flota Estelar realizará un homenaje póstumo a todos los tripulantes fallecidos, y se entregará un reconocimiento póstumo para el capitán James Tiberius Kirk que según registros era su cónyuge bajo estatutos vulcanos.

Todo lo antes mencionado se realizará en la ciudad de San Francisco el día 30 del mes de julio en tiempo terrestre.

Esperamos que pueda asistir.

Leyó una y otra vez las mismas líneas escritas, sus manos temblorosas dejaron caer el papel y encendió la pequeña tableta, James Tiberius Kirk 2233 - 2267, aquella imagen desmoronó su mundo, aquel agudo dolor que sufrió en la base regresó a él, y la presión en su costado se hizo imposible de ignorar, su T'hy'la había muerto, James murió y su debilitado enlace no pudo advertirle.    

Perdió el control.

Tiró la tableta sin ninguna dirección, y sin tiempo a medir consecuencias estampó su puño contra la pared más cercana -destrozando sus nudillos en el proceso-ni siquiera podía conectar ideas, solo quería destrozar todo, solo quería morir en ese instante. 

—¡Spock! —todas las voces a su alrededor se sentían distantes, insignificantes, su cuerpo se movía en automático. — ¡Spock! 

— ¡Papá! —Una mirada azul se encontró con la suya, la pequeña figura de Sorek se encontraba en la entrada del despacho siendo sostenido por T'Pol y Sabyk. — ¡Papá detente, por favor! —Gimió el niño al borde de las lágrimas. 

Algo dentro de él regresó a su lugar, intentó acercarse pero sintió una presión entre su cuello y su hombro.

 Todo a su alrededor se volvió oscuro.