"Las personas vienen y van, pero los daños se quedan alimentando el rencor."
-Taisha Blanco
*Narra Josseling.
Llegamos a la última estación del tren, las niñas estaban tristes se les notaba mucho, pues como no estarlo si nuestro querido Marcus falleció. Mientra venía en el tren pensé en que hacer con las niñas, pero mientras más lo pensaba menos soluciones encontraba. Hasta que llegue a la conclusión que debía separarme de ellas mientras me establecía bien en un lugar.
Pregunté al conserje si tenía un mapa de la ciudad y me lo ofreció con mucho gusto. Recuerdo que tome un taxi y mientras iba en el abrace a las nenas y les dije que las amaba mucho, que trataría de buscar un lugar donde dejarlas por mientras conseguía un empleo y un apartamento para las 3, ellas empezaron a llorar pero no decían nada, eso me hizo sentir un poco desilusionada.
Cuando bajamos del taxi y le pague, voltee a la casa que creí que nunca volvería a pisar. Pase junto a la niña hasta llegar a la puerta de entrada, toque el timbre y no pasaron ni 5 minutos cuando apareció mi abuelo, don Maximiliano Adaliz. Al principio nos quedamos mirando un par de segundos.
*Flash back*
-¿Qué es lo que desean jóvenes?-pregunto el hombre de avanzada edad.-Se nota que no nos recuerdas, querido abuelo.-dije en un tono un poco sarcástico pero si tratar de ofenderlo.
Su cara se iluminó con una hermosa sonrisa y nos dio un abrazo fuerte, nosotras correspondimos a tal muestra de afecto.
Entramos a la casa y mi mente se inundó de recuerdos agridulces. Cuando mi madre peleaba con mi abuela, gritando y diciéndose cosas hirientes. Mi mente viajó a la noche en la cual mi madre decidido que era mejor dejar aquella casa. Dejar mi hogar por irse con mi padre y luego aquel accidente. Como quedamos sola, dando comienzo a todos los sucesos de mi vida.
*Fin del Flash back*
Hablé con mi abuelo y le explique un poco de la situación, pregunto por mi madre y lo único que se me ocurrió decir es que nos había abandonado y que he tratado de salir adelante a como pude pero no lo logre y que decidí venir aquí para tantear a la suerte. Le explique que pensaba dejar a las niñas aca que buscaría como establecerme y tener un hogar para llevarlas conmigo. El entendió y aceptó.
Pregunté por mi abuela. Mientras las niñas estaban en el sofá jugando las palmas. Note como desvío la mirada y me dio la triste noticia que falleció hace un par de años. Fue triste enterarme de esta manera y no haber estado a su lado aunque sea en sus últimos días.
Luego de eso hable con las niñas y les dije que se quedarían con su abuelo, que el las apoyaría en lo que necesitarán mientras yo regresaba. Ellas lo comprendieron y estuvieron conformes con la decisión.
Me tocó despedirme y eso fue lo más doloroso de todo, no tenía idea que no volvería a hablarles desde ese día. Abrace a mi abuelo por última vez y salí por la puerta principal en dirección a un nuevo comienzo.
Al principio todo fue bien, empezar a trabajar en un bar, siendo una de las camareras, tenía un sueldo un poco bajo pero era mejor que nada. Alquile un cuarto en una pequeña vecindad, todo se torno tranquilo en mi vida, hasta una noche muy desolada, regresando del trabajo un tipo me tomo del brazo y me pego a una pared tratando de tocarme, los recuerdos me invadieron y no deseaba sentirme igual. Así que levante mi pierna y la rodee a la cadera del tipo, el pensó que le estaba dando la autorización de estar en mi, así que mientras intento tocarme nuevamente tome la navaja que tenía en la liga de mis medias y con un movimiento delicado se lo pase por la garganta rápidamente, el muy imbécil se quedó atónito y la sangre no se hizo de esperar y como si fuera la fuente más hermosa, me lleno la mayor parte del uniforme, pero no me importó en lo absoluto, de echo sentí un éxtasis que desde hace un tiempo deje de sentir. Aquel placer que sientes al matar a alguien, aquella excitación es indescriptible sientes el poder en tus manos.
Como siempre trate de deshacerme del cuerpo, pero esta vez fue más complicado por que no llevaba a mano nada de mi equipo. Así que lo primero que se me ocurrió fuera descuartizado, pero de inmediato pensé en que dejaría muchas evidencias. Así que opte por arrastrarlo hasta un contenedor de basura y meterlo ahí para mientras pienso en algo mejor.
Corrí rápidamente en busca de mis instrumentos me quite el uniforme y lo lleve conmigo para quemarlo. Tome mi mochila y salí disparada para aquel callejón. Llegue y lo primero que hice fue verter la gasolina sobre el cuerpo y meter mi ropa en el contenedor. Luego tome el encendedor y le prendí fuego al contenedor. Como era un lugar muy solitario nadie se percató del fuego, eso en parte fue de mucha ayuda.
Cuando me percaté de que todo se hubiera reducido a cenizas tome un poco de agua y la tire dentro del contenedor y deje que todo se mezclará. Todo fue bien. Correcto. Precisó.
Comencé a caminar de regreso a la casa. La carretera estaba desolada. Ni un alma más que la mía. Sólo un alma corrompida. La oscuridad consumiendo mi ser. Y es que aunque siempre trate de guiarme por la luz, la oscuridad me perseguirá hasta el final de mis días.
Mientras seguía en la carretera un carro paso cerca de mi. Era negro. Lo que me llamo la atención es que no llevaba placa. Acelere el paso. Pero de nada sirvió. El auto se detuvo y tres hombres bajaron de este. Me vieron y se acercaron yo detuve el paso y fui de retroceso, empecé a correr en dirección contraria a la de ellos. Fueron más rápidos y fuertes. Dos me tomaron y aunque trate de soltarme de varias manera uno de ellos me coloco un pañuelo con cloroformo. Que me hizo perder el conocimiento.
Desperté atada a una silla. Inmovilizada. En un cuarto con una simple luz, de frente un hombre sentado en una silla a una corta distancia. Mis ojos se adaptaron a la poca luz que tengo. Y las facciones de su rostro me parecieron tan conocidas. Pero no era posible. No.
-Por fín nos encontramos, querida hija.-dijo y mi corazón se detuvo.
-Hola.
Que tal ha estado? Espero y bien, lo siento por tardar en escribir este cap pero es que últimamente he tenido un bloqueo mental. Y no me he sentido bien.
Trataré de actualizar pronto, los quiero ternuritas.Tai♡
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Muertes en Paris (+18)
Mistério / SuspenseLa vida es un juego, en el cual aprendes a sobrevivir o mueres en el primer intento. Todo empieza cuando ya no vez la vida con fantasía, si no a como es realmente. Jugada tras jugada Joseling ira apartando de su vida a todo aquel el cual le hizo dañ...