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—Pu-puedo andar sola —Murmure con la cara tan roja como un tomate, aunque en ningún momento hice amago para que soltara mi mano.

—Solo quiero estar seguro de que no huirás —Dijo mirándome—Esto es una cita —Abrí los ojos todo lo que pude. Estaba completamente estupefacta ¿En que momento dijo que era una cita? Tan siquiera ¿En que momento dejo de ser todo una simple excursión?

Ignorando mi cara de sorpresa me arrastro a un puesto donde vendían prendas de todo tipo hechas a mano, todas eran de lana. Mi cabeza estaba llena de dudas, quería saber por sobre todo que era lo que tenia planeado Jungkook, que estaba pensando para haberme arrastrado hasta ahí. Si esto es una cita, es de suponer que la confesión espontanea por el whatsapp fue cien por cien seria, lo que significa, que una vez más, tendría que pensar claramente en mis sentimientos.

Intentando desviar mi mente a otra cosa, cogí un par de guantes de un color llamativo, eran bonitos y se sentían demasiado bien al tacto. Por desgracia no tenia suficiente dinero como para comprarlos, odiaba ver cosas que quería y no podía comprar.

—¿Los quieres?

—No —Conteste rápido estando segura de la intención de este. Deje los guantes en el lugar en el que se encontraban antes de cogerlos y camine hacia el segundo puesto para mirar que era lo que ofrecía. Jungkook tardo un par de minutos en unirse a mi de nuevo, pero enseguida comenzó a coger cosas para mirarlas con curiosidad. Las antigüedades podían ser muy interesantes.

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Tras recorrer todo el mercadillo de principio a fin nos sentamos en un parque cercano a descansar. Estuvimos aproximadamente dos horas para poder ver todo sin saltarnos ninguno de los interesantes puestos que había.

—Extiende tus manos —Dijo de la nada mirándome con una leve sonrisa.

—¿Las manos? ¿Para qué? —Cuestione ladeando la cabeza.

—Deja de buscarle una respuesta a todo y simplemente hazlo, ah, y cierra los ojos —Arrugando un poco mi nariz hice caso, incluso a lo de cerrar los ojos, aunque estaba completamente en contra de este tipo de sorpresas. No tarde mucho en sentir las manos de Jungkook poniéndome algo suave en las manos. Cuando abrí los ojos vi los guantes.

—Pareciera que fueran hechos para ti, te quedan perfectos —Me puse un poco roja por eso. Aunque intente evitar que justamente los comprara.

—No tenias porque comprarl-

—Me gustas —Dijo sin dejarme terminar de hablar, justo antes de acercarse rápidamente hacia mí y besarme.

Serendipia (Jungkook) ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora