SNK - One Shots

Unsent Letters

----- BERTHOLDT x ANNIE -----

. . .

               ... Hoy es un día de esos donde no tengo ganas de hacer literalmente nada, en realidad, jamás me había cansado tanto por un entrenamiento, es gracioso, porque ya lo había hecho antes, sin embargo, no tengo el mismo apoyo que tenía cuando era más joven, no me puedo quejar.

Le he escrito tres cartas a Annie, aunque ninguna de esas las ha leído, ni siquiera se las he enviado, nadie las ha visto, incluso Reiner desconoce la existencia de esas cartas. Hasta ahora, decidí guardarlas hasta que llegue el momento indicado para mostrárselas, tengo tiempo de sobra, por lo que decidí coger un lápiz, unas cuantas hojas y escribir lo que pienso, no quiero que ésto se vea como un diario, pero desafortunadamente lo es.

Han pasado unas horas desde que platiqué con Reiner, según lo que me ha estado contando le agrada éste lugar, en cambio Annie, no he hablado directamente con ella, pero de alguna forma no demuestra un sentimiento específico hacia aquél tema; a mí no me parece desagradable la isla, pero tampoco me siento bien estando en un lugar que no es mi hogar.

En fin, tal vez debería seguir intentando entrar a un pequeño grupo de "amigos" al igual que Reiner, es complicado tratar con ciertas cosas de la isla, me siento un poco apartado por el resto, es estúpido, pero de alguna manera comencé a ver a los de la isla como compañeros, tal vez no debería, pero creo que es necesario para cumplir con la misión de una vez por todas.

* * *

     Hoy me he levantado temprano, más temprano de lo habitual, salí a caminar y a tomar un poco de aire. El resto se levantó horas más tarde, fui al comedor y desayuné menos que ayer, tal vez porque Annie había hecho lo mismo, realmente no tenía hambre, pero me dió igual. Annie se levantó de su lugar y antes de salir del lugar Armin la detuvo y comenzaron a platicar, dejé de observarla. No es como si me afectara lo que ella haga, pero de cierta forma me importan sus decisiones.

En la tarde fui a los dormitorios, busqué la chaqueta que tenía puesta el día en el que llegamos, busqué en uno de los bolsillos y tomé una de las cartas que le escribí a Annie y me dirigí hacia donde se supone que estaría, no se la iba a dar personalmente, pero si en un lugar donde ella la viera y la leyera. Finalmente encontré su sudadera, tal vez estaría tomando una ducha para que no la llevara puesta, nadie se encontraba cerca y dejé la carta entre las telas, me retiré rápido, no quería que alguien o incluso ella misma me viera ahí.

Llegué a los dormitorios, ahí estaba Reiner, "¿En donde estabas Berth?" me preguntó, soy de esas personas estúpidas que no sabe ocultar las cosas, tarde un poco  en hablar, pues estaba pensando en que decirle, no iba a contarle sobre la carta, al hablar comencé a tartamudear, él dudó de lo que le había contado, por lo que comenzó a 'Adivinar' lo que había estado haciendo mientras no se encontraba cerca de mi. "¿Buscabas a Annie de nuevo?" preguntó, según él, yo me pinté de rojo después de mencionarla, Reiner comenzó a reír y comenzó a preguntarme el porque no le he confesado nada, "No es necesario" le dije, "¿Que locuras dices? Si no le dices nunca, ella jamás te tendrá consideración, no te preocupes, yo te apoyo", me dio un golpe en la espalda y se recostó en la cama, a los pocos minutos quedó dormido.

* * *

     Me sorprende que esta sea la segunda hoja en la que escribo sobre lo que hice en todo el día, de nuevo me encuentro agotado. Ésta vez me levante más tarde. En la hora del desayuno observaba a Annie, hoy comió lo una persona normal por las mañanas comería, creo que hoy estaba de humor. Justo cuando ya pensaba en retirarme sacó la carta que le había dado, quien sabe cuantas veces la ha leído, quiero creer que esa había sido la segunda, en su rostro se reflejaba una pequeña sonrisa, puedo asegurar que era demaciado pequeña, pero ello le causaba alegría; volvió a guardarla y se levantó.