CAPITULO VIII

5 0 0
                                    

cuando August se despertó tenia a Carlo entre sus piernas dondele placer agarro despacio su pelo, pero firme y levanto las caderas para entrar aun mas en su boca

-amor... amo cuando me despiertas asi... mas, cielo... Dios... sigue-

-me llamo Carlo- dijo sacándose el miembro de su compañero de su boca

-para mi eres un dios cuando se trata de... haaaa Carloooo- dijo segundos antes de correrse en la boca de su compañero

-sere tu diosa entonces apenas termine el desayuno- dijo Amelia lamiéndose los labios, ambos grunieron al verla solo con solo la bata bastante fina, por cierto -venía a decirles que ya estaba el desayuno, pero veo que Carlo ya desayuno- este sonrrio de oreja a oreja relammiendose los labios

-eres mas que una diosa en ese sentido, amor- dijo Carlo acercándose a ella, tomandola entre sus brazos y besando su cuello, mientras le desabrochaba la bata

-nada de eso, tenemos que desayunar, no se ustedes, pero yo soy mas humana y necesito alimentarme- dijo entre jadeos a centimetros de los labios de Carlo cuando sintió las manos de August en su cintura besando su nuca, y bajandole la bata del todo cayendose al suelo

-yo quiero desayunarte a ti, muñequita- le dijo al oido mientras le lamia el lobulo-

-yo... yo... porfabor...- los dedos de Carlo bueno a su clitoris *-cuando los de August fueron a su ano, gimio en la boca de Carlo mientras ambos le probocaba un orgasmo que si no la tubieran entre ambos se hubiera derretido en el piso, August la llevo al baño se bañaron juntos mientras Carlo terminaba el desayuno, este solo se habia puesto un boxer despues de bañarse en el baño de abajo, aunque claro que sin Amelia el baño fue rápido en cambio August se tardaría, el sabia que su compañero no le haria el amor, no entraria en ella, porque habian acordado hacerlo juntos, pero estaba seguro que disfrutaria de su cuerpo, le querian dar tiempo a ella para prepararse cuando ambos la tomaran. cuando ambos bajaron ya estaba lista mesa para los tres, ella estaba entre ellos dos y cada uno le dio de su plato. cuando terminaron de desayunar los tres se vistieron y saleron hacer unos tramites. Amelia debía llevar unas cosas al correo. August acompañarla, mientras que Carlo iba a haber que habia pasado con su tio, debian estar atentos con respecto a él, Carlo sabía que su tío era peligroso y jamas permitiria que ese malnacido les hiciera algo a sus dos compañeros.

después de que Amelia terminara todo lo que tenia que hacer se encontraron con Carlo y este la tomo entre sus brazos y la beso en la boca hasta casi dejarla sin aire

-mierda, aqui en la calle no hagan eso, que solo verlos...- Amelia bajo y su vista y sonrrio

- ¿qué pasa con solo vernos, amor? - pregunto acercándose seductoramente a él, mientras Carlo sonreía de oreja a oreja por ver su compañero tan exitado y nervioso al mismo tiempo

-que tengo ganas de agarrarte contra la pared y...-

-degenerados- escucharon a una mujer

-y tu permites que tu mujer haga eso a otro hombre- siguieron con sus palabras hasta que el mundo se detuvo por completo y ambos vieron la rabia e ira en los ojos de Amelia y se dieron cuenta que ella tambien podia ser muy peligrosa

-calmate, cariño- le dijo August sosteniéndola por los hombros

-cielo, tranquila, baja tu nivel de poder- Carlo le canturrio al oido besandole la nuca

-pero... ellos...-

-shhhh no los escuches y vuelve a nosotros, amor-un beso en su frente y sus manos en su caderas, ella se relajo entre sus brazos y el mundo volvio a moverse

-ustedes mejor que se callen, nuestra mujer tiene derecho a besarnos a ambos, ya que al igual que ella es nuestra nosotros somos de ella, ¿es así, vida? - Amelia asintió hacia Carlo y lo beso, mientras August le beso la nuca

-asi se habla, amor- le dijo a Carlo y este le dio un beso tambien a el

-por favor que...-

-mejor callese...- dijo Amelia tratando de no alterarse, August la agarro d ela cintura, la atrajo hacia él y luego Carlo la tomo de la mano y se fueron dejando a la gente sin habla, ya que se dieron cuenta que no les importaba lo que los demas pensaran de ellos

-mama, que un hombre besea otro hombre esta ma- dijo un niño

-si, que lo...- le empezo a explicar a la madre

-no lo esta pequeño, eso se llama ser gay y no esta mal, es algo que uno siente y que hay que empezar a respetar a partir de tu edad, y entender que la gente toma deciciones y que no siempre puede ser que estes de acuerdo, pero eso no significa que puedes faltarle el respeto- le dijo Amelia poniéndose de rodillas en frente del niño e inmovilizando a la madre

-entonces lo que hizo esa gente recien ¿fue faltarles el respeto? - Amelia asintió -eso está mal-

-exacto, pequeño- dijo August quien estaba parado detrás de Amelia junto a Carlo ambos con sendas sonrrisas y se les veia el amor y el orgullo en los ojos de ambos

-ellos te aman, lo veo en sus miradas- ella sintio -ma eso que hicistes esta mal- le dijo el chico a la madre a quien Amelia había desencantado- si se aman o son gay, que por lo que me dijo papa, es cuando dor hombres se gustan o se aman y lo que dijo esta mujer tan bonita n es nada malo, ¿porque los insultaron de ese modo? -

todos se quedaron callados y la madre no pudo decir nada ante esas palabras, cuando se fueron la mujer les pidio disculpas de corazon y su hijo se fue feliz junto su madre después de darle un beso en la mejilla a Amelia

-gracias y dispenme otra vez, los tres, por favor-

--tranquila, no hay problema-

MI VIDA ENTRE DOS MUNDOSWhere stories live. Discover now