Prólogo

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18 años atrás

– Ya no me amas? – dijo Demi al borde de las lagrimas y aferrándose a él.– Joe la miro fijamente y le dijo en tono seco: – No. Esto se acabo y es definitivo.

Demi estaba destrozada, su mirada reflejaba tristeza y decepción, no podía creer que el joven que decía amarla la estuviera sacando de su vida así de fácil.

– ¿Porque me haces esto?

– Se acabo el amor, perdóname, no quería lastimarte

– Lo estás haciendo, te entregue todo de mi Joseph

– En verdad lo siento. Para no lastimarte más decidí irme lejos

– No, no por favor, no me dejes

– Tengo que hacerlo.

La noche siguiente, Joe llego al aeropuerto, estaba a punto de tomar su vuelo a Los Ángeles y dejar su vida en la cuidad en que creció, Demi llego a detenerlo, ella se negaba a dejarlo ir, lo amaba y estaba dispuesta a recuperar su amor. Joe la sujeto de los brazos y le dijo casi a gritos: – Demi por favor déjame ir, ya no podemos estar juntos.– Ella llorando le suplico: – Yo te amo, podemos intentarlo una vez mas pero no me dejes.– Joe estaba desesperado, no sabía qué hacer ante esa situación, Demi por su parte, no aceptaba que esa relación ya no tenía arreglo. Joe trato de alejarse de ella pero Demi lo retenía, se dejo caer al piso, estaba de rodillas y mientras lloraba con desesperación, Joe le dijo a gritos: – Demi ya basta, deja de humillarte, entiende que ya no te amo.– La soltó, tomo su equipaje y se fue, Demi veía como se alejaba, seguía en el piso llorando y gritándole: – Joseph, Joseph no me dejes yo te amo....Joe regresa, Joseeeeph!!!!

Se quedo sentada en el piso por un momento, al darse cuenta de que todos la observaban decidió levantarse, salió del aeropuerto y había una tormenta, comenzó a caminar sin rumbo, estaba totalmente destrozada, sus lagrimas y las gotas de la lluvia que mojaban su rostro habían corrido su maquillaje, el viento que cada vez era más frio rozaba su piel mojada, hacia que su cabello bailara entre él y la fuerte lluvia, no sabía qué hacer ni a donde ir, se sentía perdida, abandonada y tenía el corazón y las ilusiones rotas. Siguió con su camino y al estar perdida en sus pensamientos, estuvo a punto de ser atropellada, se quedó en shock y el joven que iba a provocar ese accidente decidió bajarse de su coche, se acercó a ella y le pregunto preocupado: – Señorita ¿se encuentra bien?.– Demi lo miro aun con lagrimas en los ojos, lo único que pudo hacer fue lanzarse en sus brazos y romper en llanto, el joven le correspondió y después de unos minutos Demi se aparto de él y le dijo apenada: – Lo siento, necesitaba un abrazo... – El la interrumpió y le dijo: – Tu perdóname, estuve a punto de atropellarte.

– ¿Como te llamas?

– James ¿y tú?

– Demi. Creo que debo irme, adiós

– Espera, ¿puedo llevarte a tu casa?

– No, debo tomar el autobús y vivo lejos

– Ya pasa de la media noche, los autobuses ya dejaron de salir, déjame llevarte a tu casa por favor

– Queda muy lejos, mejor tomaré un taxi

– Entonces vamos a mi departamento, no te haré daño confía en mi

– De acuerdo, vamos.

Subieron al auto de James y se dirigieron a su departamento. Al llegar, James le dio una talla y ropa limpia a Demi para que se duchara, mientras ella se daba una ducha, James preparo algo para cenar. Demi salió de la ducha y fue a la cocina, James sirvió la cena y comieron juntos cuando terminaron James le dijo: – ¿Porque estabas llorando?.– Demi bajo la mirada y respondió con tristeza: – Mi novio termino conmigo y se fue de aquí.

– Y...¿porque te dejó?

– El dejo de amarme, éramos muy felices no entiendo que fue lo que paso

– ¿Como fue capaz de dejar a una chica tan linda? tu novio no te valoro lo suficiente

– No me dio ningún motivo de porque se acabo el amor

– Probablemente no quiso lastimarte más.

 Platicaron el resto de la noche, Demi se refugió en los brazos de James, él la consoló, la aconsejo y le hablo con toda la sinceridad del alma.

Nos volvemos a encontrar©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora