Me despertó la luz que se comenzaba a filtrar por las ventanas, estaba dormida en una orilla de la cama, con el olor a alcohol más fuerte de mi vida, mi cabello estaba todo enredado, y me costaba trabajo moverme. Cuando por fin logré levantarme vi a Harrison junto de mí y a Zendaya y Tom en el piso dormidos. Aun sin poder abrir mis ojos por completo, caminé hacia el baño del cuarto con el dolor de cabeza más insoportable del mundo. Al abrir la puerta me encontré con Lila con la cabeza recargada sobre su brazo que estaba por encima de la tapa del retrete.
-Lila- le dije tratándola de despertar, me agaché un poco y la moví, para que reaccionara. Se despertó de golpe y viendo hacia todos lados.
- ¿Dónde estoy? - me preguntó tocando su cabeza mientras abría sus ojos de a poco
-En el baño de Zendaya al parecer- le dije mirando mi alrededor solo para corroborar nuestra ubicación, mientras la levantaba.
- ¿Qué hora es? - le dije tomando su mano tratando de enfocar los números del reloj que tenia en ella - ¡5:00 pm!, ¡OH POR DIOS MI TRABAJO! - grité, tan fuerte que me dolió la cabeza
- ¿De qué hablas?, Tom te dio el día-dijo tallándose la cara
-AAAAAA si claro... claro... el día, si..., luego arreglaré eso con el- cuando la logré levantar caminamos hacia la habitación y nos sentamos en el piso.
-Estuvo muy loco anoche ¿no es así? - me dijo riendo un poco
-¿De qué hablas? No recuerdo nada-
- Yo tampoco, pero estoy casi segura de que pasaron muchas cosas. Me recosté boca abajo en el piso tratando de hacer un poco de memoria sobre lo que había pasado
-¿Ayer no tenías esto en la espalda o sí? ¿Es un tatuaje? - me dijo inclinándose un poco hacia atrás. Abrí los ojos asustada y no fue hasta ese momento, que me di cuenta que seguramente había hecho más estupideces de las que estaba acostumbrada a cometer.
-Lila, podrías decirme ¿Qué es lo que tengo en la espalda? - le pregunté tapando mi cara con las manos, esperando a que fuera todo menos lo que estaba pasando por mi mente.
-Creo que es una taza, sí, es una taza de café, en realidad no es muy grande- me dijo soltando una risa como si no fuera de gran importancia
- ¿Estás segura? - la volteé a ver mientras me paraba bruscamente del suelo buscando un espejo en aquel gran cuarto para poder ver mi espalda.
-Sí- dijo cerrando sus ojos
-Menos mal- suspiré pensando en que seguramente mi yo borracha se lo había hecho por una buena razón. Caminé hacia donde estaba Harrison y con las pocas fuerzas que tenía lo moví para que despertara -Vamos Harrison, es hora de despertar- le dije mientras lo movía de un lado a otro, pero me di cuenta que era inútil, ni si quiera despertó cuando grité su nombre.
- ¿Qué es todo eso? - preguntó Tom levantando su cabeza de piso
-Lo siento, es solo que no se si Harrison aun siga con vida-
- ¿De qué hablas? - talló su cara intentando abrir por completo sus ojos
-¡DESPIERTA!- gritó Lila mientras le arrojaba un vaso lleno de agua a la cara
-¡AAAAAAAAAAA! ¿Qué demonios pasa? -Harrison se despertó gritando mientras miraba acelerado hacia todos lados
-Buenos días dormilón- bostezó Lila mirando como Tom había comenzado a reírse
-¡Auch!, mi cabeza- Tom puso sus manos en esta haciendo gestos de dolor -¿Qué demonios pasó aquí?- preguntó al aire, mirando alrededor como el cuarto de Zendaya había terminado totalmente destrozado por lo que fuese que habíamos hecho.

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Solo un café más
FanficY aún me seguía preguntando si en realidad eras tan importante como pensaba, supongo que la respuesta me la darías tu mismo si hacías sonar aquella campana de la entrada