Volveré a buscarte

Capitulo 4. Libre

Me desperte con energia suficiente esta noche tenia que tener fuerzas para todo lo que iba a hacer. Mi padre se habia ido a trabajar y baje a comer algo.

- Toma hija.- vi a mi madre en la cocina preparandome comida para la noche y entregandome algo de dinero.

- Gracias mama.- la mire apenada, nose si seria capaz de irme, y si les hacia algo? no no esta era mi unica oportunidad.

- Recuerda el plan, cuando llegue tu hermano se tumbara y yo gritare pensando que esta desmayado, tu padre se preocupara por el ya que nunca le hace nada a saber porque y tu correras para traer la cena y entretenerlo como sea. Cuando durmamos te iras.

- Entendido.

Cuando acabamos de comer recogi mi ropa y todo lo necesario incluido el dinero que escondi y lo guarde bajo la cama. El tiempo pasaba muy lento y me asomaba por la ventana intentando volver a ver a aquel chico pero no habia rastro de el.

Nunca habiamos podido llamar a la policia porque ademas de que no habia telefono teniamos miedo, miedo de que saliera de la carcel y volviera por nosotras, miedo de que mandara a sus amigitos matarnos. No sabiamos en que trabajaba mi padre pero tenia muchas influencias por todos lados.

Ya era la hora, en cinco minutos entraria por esa puerta y asi lo hizo.

Se oyeron los llantos de mi madre como habiamos planeado yo estaba junto a ella y mi padre se acerco corriendo y aprobeche para ir a por la comida para entretenerle.

- Donde te crees que vas?.- me agarro del brazo impidiendome seguir.

- Yo voy a por algo para Ángel a la cocina.- me miro desconfiado y me solto, asique corri a la cocina fijandome en que mi padre no cerro. Volvi y mi padre ya habia conseguido despertar a mi hermano. Se levanto despreocupado y nos dejo heladas cuando cerro la puerta metiendose la llave en su chaqueta.

- No..- susurre.

- Tendras que cogerla cuando duerma Talia, me oyes?.

- Si mama.- todo se habia venido abajo y como cada noche mi padre se acerco a mi madre mandandola hacer cosas a la fuerza y cuando ella hacia algo mal el la pegaba y yo esperaba llorando mi turno.

La noche llego y me mire en el espejo que acababa de romper mi padre intentando darme a mi. Me cure la herida que el dia anterior me hize en la escalera y las muchas otras que tenia recientes. Le di un beso en la frente a mi hermano y sali buscando la chaqueta de mi padre.

"Mierda" pense, estaba en su habitacion, me quite los zapatos para no hacer ruido y entre cuidadosamente llamando la atencion de mi madre la cual me esperaba despierta, busque las llaves intentando no hacer ruido y asustandome pues mi padre se movia amenazando con despertarse. Las cogi y me despedi de mi madre con una sonrisa y ella me la devolvio. Sali agarrando mis zapatos y cerre la puerta tras de mi, era de noche y hacia frio no cogi mas que una mochila con algo de dinero suficiente para comer unos dias y quizas cogerme una casa sin ningun lujo pero algo es algo. Mire esa casa por ultima vez y sali corriendo de alli.

Llegue al final de la calle, solo debia dar un paso y no habia vuelta atras. Lo di y segui mi camino direccion? Nolose.

Sin que nadie me viera cogi un tren colandome por la berja, no vi a donde iba ni tampoco me importaba. Mas de media hora mas tarde decidi bajarme, Santón se llamaba el pueblo. No sabia que iba a hacer, me meti en un bar de una horrible apariencia pero debia encontrar trabajo ya tenia 16 años asique podia trabajar.

- Perdona me llamo Karen, tengo 16 años, estoy buscando trabajo.- el jefe del bar tenia unos 19 años y me miraba de forma repulsiva.

- Contratada, empiezas hoy, toma, es tu uniforme.- ese hombre estaba loco o que, ese uniforme era corto por todas partes, estaba formado por unos pantalones cortisimos y un top que me llegaba por encima del hombligo y unos tacones altos, en mi vida habia andado con unos. Me los puse y la verda no era tan dificil, practique un poco y y sali.

- Bien bien, estas muy guapa Karen, puedes llamarme Jim.- se despidio con una sonrisa y se marcho a la barra.

Supuse que mi trabajo era servir en la barra asique comenze mi trabajo. Empezo a entrar gente y con ellos dos chicas de mi misma edad o mayores, que raro si son las 4 de la mañana como en que entra tanta gente, no entendia nada.

- Jim, porque entra tanta gente a estas horas?.- la verda esque nunca habia ido a un bar asique no estaba enterada de muchas cosas.

- Vaya, veo que no as visto mundo pequeña. Acercate a esa chica ella te explicara, quiero preguntarte algo, que haces en este lugar tan joven?

- Bueno eso es asusto mio.- me dirigi a la chica que me señalo, era bastante guapa, morena y con ojos color miel.- Hola.

- Hola nena que pasa?

- Pues esque vine para que me explicaras un poco de que va esto.

- Vale, principalmente me llamo Erika, y ella es Carolina.- me señalo a la otra chica que entro junto a ella y que se nos acercaba.- las dos trabajamos aqui como stripers al igual que tu supongo.

- Que? yo? pero..- la Carolina me interrumpio, ella tenia el pelo negro con ojos marrones muy guaoa tambien.

- Vaya una nueva, eres muy pequeña que edad tienes?.

- Soy Karen y tengo 16.- las dos se quedaron boquiabiertas.

- Y que haces en un lugar como este?

- Bueno nada necesito dinero y eso.

Dejamos el tema y me explicaron de que iba el trabajo, la verdad esque no tenia otra opcion asique accedi y me enseñaron algunos pasos pero como aun era principiante empezaria trabajando en la barra por hoy.

Estaba sirviendo copas cuando alguien entro por la puerta, inmediatamente me agache. "No, no, por favor que no me haya visto."

Se acerco a la barra.

- Karen, que haces ahi abajo, sirve a ese muchacho.- "genial" rode los ojos " gracias Jim" pense.

Me levante intentando evitar el contacto visual.

- Que quieres?

- Una cerveza.- me miro frunciendo el ceño.- Te conozco?

- No que va, lo dudo.

- Mientes muy mal sabes?.- me agarro de la barbilla y me levanto el rostro.- Tu!

- Me estas siguiendo o que?.- era imposible que aquel muchacho de ojos azules estuviera ahi si antes estaba en mi pueblo.

- No te estoy siguiendo, que haces en este lugar?.

- Que haces tu aqui?.- le devolvi la pregunta no sabia que decir.

- Vivo en este pueblo pero tu no.

- Y que hacias ayer alli?

- Trabajo en un bar cerca de tu casa por eso estaba alli.

Me gire y le pregunte a Jim si podia irme por hoy, ya eran las 7 y estaba cansada. Con ese chico ahi no podia estar, lo estropearia todo.

Sali de ahi corriendo pero el chico me siguio.

- Esperame, no puedes andar sola.- segui caminando como si no le escuchara hasta que agarro mi brazo haciendome volverme.- Dejame acompañarte, me llamo Will.

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Espero que les guste este capitulo, me desanima ver que nadie comenta ni nada :(

Espero que lo hagaiis, seguire subiendo cuando puedaa!! Besoos.

Leer mi otro libro, "Viaje sin rumbo".

Lamento las faltas de ortografiaa esque no me da tiempo a corregir.