Rad, weird, beautiful

Capítulo 4.

Por fin llegó la hora. El valioso sobre llego a mis manos. Lo abri. Lentamente fui sacando el papel.

-No puedo hacerlo. Hazlo tu por mí-Le dije a Lisa

-Está bién.-Solo escuchaba risas de felicidad, llantos de tristeza, y risas nerviosas. pero no escuchaba la voz de Lisa

-¿Has prerado ya las maletas?-Me dijo Lisa alegre

No me lo podia creer. El nudo del estomago se me desizo al segundo. Una gran sonrisa se me dibujó en la cara. Abracé feliz a Lisa

-Enhorabuena Acacia, te lo merecías,nos vemos luego- Dijo Héctor guiñandome un ojo

- Gracias- Dije con un tono que hace mucho que no utilizaba con él desde hace meses: amable

Lisa me miró confusa.

-Luego te cuento. Me tengo que ir

Envié un Whatsapp a mi hermano diciéndole que hoy comia por ahi.

Allí estaba Héctor esperandome.

-Sube- Me dijo ofreciéndome sitio en su scooter.-Coge mi casco

-Gracias

Héctor arrancó. Tenía un poco de miedo.

-Tranquila. Agárrate a mi. Te sentiras mas segura-Me dijo cogiendo mis frios brazos colocándolos alrededor de su fuerte cuerpo.

-Si no te importa- Apoyé mi cabeza en su dura espalda

Héctor aparcó en su casa

-Iremos andando a un restaurante que esta a dos manzanas de mi casa.

Íbamos Héctor y yo, hablando y riendonos un caluroso dia de junio por las calles de Barcelona. Vaya.

-Mesa para dos, por favor-Dijo Héctor educadamente a la camarera

Nos sentamos al lado de la ventana. Desde ahi podiamos apreciar la gran belleza del parque de al lado de la casa de Héctor.

-¿Qué tomarás? -Me dijo mientras observaba con detención la carta

-Cuéntame todo

-Está bien. Veras te veía distante. Rara. No sé, no eras la misma Acacia. Mis padres se divorciaron,se acumularon preocupaciones,tristezas. Y empecé a beber, olvidar todo. Empecé a estar raro, borracho. Perdí el control. Y cuando estoy borracho no me acuerdo de nada.- Se le escapó una lágrima

-Héctor no...-Me levanté y le di un abrazo- Tranquilo,todo va a salir bién, te lo prometo- Le dije acariciandole la mejilla

-Te quiero Acacia Brinley

- Y yo a ti, Héctor Valdés

-¿Les pongo algo de comer?-Dijo la camarera quitando la tapa del boli

Terminada la comida, Héctor y Acacia fueron al parque

- Héctor, no me vuelvas a decepcionar, por favor- Le dije mientras le daba vueltas al llavero de mis llaves

-Tranquila, no lo haré. Estoy tan contento de que me hayas perdonado -Dijo alegre Héctor

- ¿Qué tal las notas?-Le pregunté para cambiar de tema

- Inglés bueno... Suficiente- Me dijo con voz de decepcionado

- Conozco a uno que dio clases de inglés a mi hermano de inglés. Esta tarde te daré el número

- ¿Por qué eres tan mona y tan buena persona?- Me preguntó acariciandome el pelo. Y de repente, así sin más, sus labios cálidos se chocaron con mis labios frios haciendo que mi corazón estallase.