Te hablé.
Si, junté coraje y te hablé.
No puedo ocultar el hecho de que estaba aterrorizada por tu respuesta.
Tenía miedo, y mucho. Demasiado.
Te conté que te extraño, te conté que fuiste super importante para mi y que no quería perder la relación que teníamos.
Me respondiste.
Tenía miedo a escucharte, a leerte, a recibir tu respuesta.
¿Y si me rechazabas? ¿Y si me confirmabas que no me querías más en tu vida? ¿Y si me mandabas al carajo? Pero, ¿y si me aceptabas? No lo sabía, pero necesitaba la consciencia tranquila y saber si aún me querías o realmente debía alejarme.
Buscaste las palabras más lindas que pudiste en el momento y me dijiste que fui una gran marca en cada año que pasamos juntos. Y que querías que este año fuera igual, acompañarme en la etapa que me espera y que aún me amabas.
Todavía no puedo con la felicidad que llevo dentro.
No te das idea de lo hermoso que fue oír eso.
Feliz año nuevo, ojalá te armes de paciencia porque después de hoy no voy a dejarte estar triste y sé que no vas a permitir que vuelva a creer que soy una molestia para vos.
Te amo, imbécil.
ESTÁS LEYENDO
Fragmentos
Short StoryBienvenido al más oscuro rincón de mis pensamientos. Allí donde habitan las historias con finales infelices, donde la princesa baja sola de la torre y el príncipe entristece por no conocer a su alma gemela. Si te apetece leer pequeñas historias ind...