Su humor no había mejorado, de hecho habia empeorado cuando habló con sus padres mencionando sin censura alguna los sentimientos que le tenía al mapache de Suna —apodo que "cariñosamente", Sakura le había brindado—.
Además de su humor su estado físico era una mierda, sentia que sus cuerdas vocales se habían dañado severamente al gritar como loca el día anterior, no tenía ganas de salir, pero tuvo que hacerlo al escuchar el elaborado interrogatorio que sus padres habían hecho para ella.Y ahora se encontraba vagando por las calles de la aldea, sin ningún rumbo específico o así era hasta que pasó por la florería de su rubia amiga.
Sakura se había detenido al escuchar el llamado de Ino, volteo a verla sin emocion
-Sakura, me entere de lo que esta pasando y yo intente protestar, pero Tsunade- sama me ha...-
- Vasta Ino, no quiero que me tengas pena, he decidido aceptarlo, depues de todo un ninja siempre tiene que poner en prioridad el estado de la aldea antes que su vida privada.-Hablo con un tono ronco y carraspeando de vez en cuando.
Ella simplemente la abrazo, repitiendo constantemente un "Lo siento".
Este simple hecho proboco que la pelirrosa se derrumbara, comenzo a llorar en el hombro de su amiga llamando la atencion a mas de un aldeano. Ella habia tenido que renunciar a todo... a sus padres, a sus amigos, a Konoha.... a Sasuke y todo por el chico pelirrojo y sus malditos caprichos.
Ino la llevo lentemente hacia la floreria.
Y ahí estaban, sentadas detrás del mostrador. La pelirosa estaba cubierta por una manta y tomaba té, el cual, anteriormente había sido preparado por la Yamaka en un intento de disminuir la molestia en su garganta.
Mañana partida a Suna, dejaría a tras todo lo vivido para casarse con un psicópata caprichoso.–Ino...– intento hablar
–Que pasa Sakura?–
–Quiero olvidar–
–¿Que?–
–Mañana parto a Suna –tosio– quiero olvidar que me casare–La ojiazul frunció el señor e inevitablemente una pequeña sonrisa de ladina se plasmo en la comisura de sus labios.
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–Haber... Déjame ver si entendí– dió un largo trago a o botella de zake –Tu– apunto a la pelirrosa– te vas a casar con... Ese tipo y tendrás que irte de konoha–
–Si, me casare con el pelo de mestruacion– exclamó Sakura con exageración sacando un par de risas por todo el bar.
–Que fastidio–
Ino miro a sus amigos, los.cuales estaban notoriamente ebrios, era extraño verlos en ese estado ya que Shikamaru y Sakura, no eran aquel tipo de personas que se encerraran en un bar y se embriagaban con facilidad.
Definitivamente haba sido una buena idea invitar al Nara a beber.
–Hey!, Tráeme otra botella–
–Y yo que Sakura, también quiero otra–
–A si, entonces.... ¡Dos botellas por favor!––Sabes Sakura... He pensado que, si te casarás con Gaara, en cierto punto tendrás que tener sexo con él– río el Nara.
Ella solo arrugó la nariz, hecho el cual hizo que sus acompañantes soltaran una carcajada.
–¡Que asco!–
–¡Sakura!–
Ella se sobresaltó callendose de su asiento, reconocía esa voz...
–Que tal Kakashi sensei– río la Yamanaka – ¿Se une a la despedida de Sakura?–
–Lo lamento, pero, Sakura se tiene que retirar por órdenes de Tsunade-sama–
–¡No!– grito alargando la "o" – no me quiero ir Kakashi-sensei–
–Lo lamento Sakura tienes que irte–
–No–
–Sakura..–
–Callese viejo canoso– gritó para después romperse a carcajadas, hecho el cual colmo la paciencia de el peliplateado.
Con un rápido movimiento tomó a la chica en brazos para después desaparecer en una nube de polvo, dejando a Ino y a Shikamaru con una notable sorpresa.
–Valio verga – susurró el pelinegro, para después empinar el pico de la botella.