Yoongi se sonrió a si mismo a través del espejo, le parecía mentira, casi no lo podía creer pero era tan real como la vida misma. Una bata blanca era ahora su atuendo de trabajo y desde luego estaba más que orgulloso de esto, tomó su vaso de café junto a su portafolios y se dirigió hacia la recepción
-Yoongi: Nayeon ¿Algún paciente nuevo?
-Nayeon: Si Yoon, en la habitación 204 ha sido ingresado un chico, no había mas hueco en la sección infantil y por eso tuvimos que meterle en una de las habitaciones normales, pero su edad es de ocho años. Fue ingresado esta noche, lo atendí de emergencias esta madrugada y después fue otro doctor, pero creo que sería conveniente que fueras a verlo
Min asintió habiendo escuchado atentamente todo lo que su compañera le decía
Puso una mano sobre el hombro de la joven y le sonrió dirigiéndose hacia la habitación antes comentada. El verano ya había acabado y octubre estaba entrando. Ya había comenzado a trabajar de hacía una semana para acá y le encantaba, su trabajo lo llenaba de alegría
Tal y como habían pensado, Nayeon y él trabajarían en el mismo hospital y eso era agradable, porque ambos era nuevos en el centro, pero por lo menos se conocían entre ellos y no se sentían tan solos
El pálido dio suaves golpes en la puerta antes de entrar, fue bien recibido por los padres del chico que se encontraba en la camilla de hospital con aspecto algo pálido. Se acercó a la camilla mientras hablaba con ellos para intentar calmarlos y leyó el papel con el expediente del chico
-Yoongi: Bien, vamos a ponerte más suero en el gotero, pero te pondrás bien pronto, es una gastroenteritis, no hay nada de que preocuparse porque por ahora está avanzando correctamente
-Sooyeon: Muchas gracias doctor, él en serio no paró de vomitar hasta que le pusieron el gotero
-Yoongi: Tranquila, se va a poner bien y en cuanto se recupere va a volver a comer como un campeón
-Woojin: Mamá, cuando me ponga bien ¿podemos ir a comer pollo?
Preguntó el pequeño castaño que miraba su brazo arrugando su nariz, la sensación del gotero no le gustaba en absoluto y la verdad es que aunque se había hecho el fuerte cuando se lo colocaron, le dolió bastante
-Sooyeon: Iremos, cariño
Ella rió y se despidió dándole las gracias a Yoongi, que se fue de nuevo hacia recepción para pedirle a Nayeon que le cambiara el gotero al chico
Cuando llegó allí pudo ver a Nayeon abrazando a alguien, la gran sorpresa no podía ser más agradable. Dejó el portafolios sobre el mostrador y corrió hacia ellos
-Yoongi: Cielo ¿Qué haces aquí?
-Jimin: ¡Yoongi-ah!
Park sonrió a lo grande extendiendo un ramo de Brezos rosados y morados, muchas veces Yoongi se preguntaba como nadie se había interesado antes por Jimin, recuerda cuando aún no sabía nada de él y sólo era "profesor" y "alumno", aún en esos momentos siempre quiso saber que tan grande tesoro era el pequeño
-Jimin: Las rosas significan buena suerte y las moradas admiración, estoy muy orgulloso de ti Yoongi, perdón por no haber venido en tu primer día de trabajo, pero tuve que portarme bastante bien para que me dejaran salir a verte sin supervisión, aunque tengo que estar de vuelta de dos horas, pero quería verte, estás muy lindo con la bata blanca...
Susurró aquel último alagado abrazándose a su novio, Jimin en serio quería salir ya de aquella residencia, que si que adoraba a las personas que convivían con él y todo eso, pero le encantaría poder hacer vida normal con Yoongi y sobre todo hacer vida de estudiante, que es lo que era