Dr. Novak

🌙-2

Cuando se despertó lo primero que sintió fue el punzante dolor de su cabeza, luego su tirante dolor de espalda, su ardor en los ojos debido a las luces excesivamente claras y luego un revuelto de estomago. Todas sensaciones lo atacaron tan de repente que no se dio cuenta de su hombro vendado y el profundo ardor de este.

—¿do-donde... es— la voz tan seca y áspera que salió de su garganta fue irreconocible. Abrió ligeramente los ojos, pero no podía distinguir nada, solo claridad por un lado y claridad por el otro.

  Sus ojos se humedecieron, ¿y si había muerto y estaba en el cielo?, su respiracion comenzo a fallar y su ritmo cardíaco se elevó debido al pánico. Estaba tan ensimismado en el miedo que no notó la ruidosa maquina a su costado alertando su desestabilizacion y al preocupado médico que entró corriendo por la puerta de la clara habitación.

Sintió un áspero toque en su hombro que en parte le dolió, pero al mismo tiempo fue lo que necesitaba para calmarse, reguló su respiración y quitó las manos de su cara, volvió a intentar enfocar su vista y pudo reconocer la figura de un hombre a su costado, podía sentir su áspero tacto, el ardor de ser tocado en su hombro, estaba vivo. Su respiración y ritmo cardíaco se normalizaron, sus ojos pudieron enfocar el gentil rostro del hombre, sus ojos azul profundo, su sonrisa tranquilizadora, cubierto por blancas alas, como un ángel.

—un... ángel —su garganta seguía doliendo, pero pudo mandar su mensaje al angel. Casi se derrite en el lugar a escuchar la suave y grave risa del ángel.

—De todos mis años trabajando como médico, nadie me llamó angel antes—acarició su pelo ligeramente mientras el rubio seguía mirandolo ensimismado, se fijó en un suero que estaba sobre si y que él no había notado. El paciente empezó a mirar alrededor, notando que estaba en una camilla de hospital.

—s-sam... ¿don... donde—intentó preguntar, pero su garganta se cerró de nuevo. El ángel cuyo nombre desconocía lo miró con sus cejas juntas.

—Tranquilo, compañero. Tu hermano está bien ¿si? no fuerces tu garganta, tuvimos que ponerte por un rato un respirador, asi que tranquilizate y no intentes hablar mucho.—la voz del hombre de hermosos ojos azules lo tranquilizó, puede que no sea un ángel pero debía admitir que era lo más cerca que estaría de uno.

Los ojos verdes y los azules se conectaron por un momento, unos aún desorientados y otros ¿melancólicos tal vez? El rubio iba a intentar hablar otra vez, pero fue interrumpido por aquella áspera mano que volvió a acariciar su pelo.

—Ahora traigo a tu hermano, winchester—ni miró para atrás al acercarse a la puerta, tal vez tenía miedo de quedar prendado para siempre en esos ojos verdosos—el disparo que recibiste pasó a milímetros de una arteria principal, diría que fue un milagro... —se semi giró para clavar su mirada en la del rubio, que en ese momento sintió un escalofrío en la espalda y un impulso de tragar saliva.—Es como si Dios tuviera un trabajo que encomendarte—esos ojos azul hielo por fin se desviaron del rubio, dejando a este respirar tranquilo. El paciente bajó la vista a sus piernas y escuchó la puerta de la habitación cerrarse.

¿Será la medicina lo que hacía que su corazón latiera desenfrenado? ¿o se lo estaba imaginando?

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yeah, flor is back, ahre perdon por ser 1lenta ok, pero acá esta. Ojalá hayan tenido un buen comienzo d año y felicidades 💕

arios