Latido.

LA HISTORIA

CAPITULO I

Aún puedo recordar como el viento solía correr alrededor de mi, era impresionante con solo escucharlo atentamente. Decían que cuando podías escuchar el sonido del viento significaba que el amor estaba cerca.

Mi abuela solía amar cada parte de la manada en la que pertenecía, mi sabio padre quien es el líder de esta manada constantemente nos acompañaba cuando corríamos largos viajes visitando lugares cálidos rodeados de muchas flores. Durante ese tiempo el viento se podía sentir mas no escuchar, pocos, quienes están enamorados tenían la habilidad de escuchar su voz, era simplemente mágico.

- Y yo nunca pude escucharlo... al menos en ese tiempo, durante muchos años y décadas creía que ese sueño de poder tener el honor de descubrir sus mensajes mágicos nunca llegaría -

No obstante, en medio de la oscuridad por mis propios prejuicios las flores desaparecieron y me encontraba en una caja de fierro encerrada por toda la eternidad como colección de los humanos.

Aún recuerdo cuando era una tan solo una niña, solía creer en aquellas historias que me contaban constantemente sobre mi destino, sentía un anhelo por encontrarlo y estaba esperando pacientemente el día pero nada es como parece.

- ¡Y aquel pequeño alfa se quedó con su pequeña omega viviendo felices para siempre! - Comentaba con mucha felicidad y pasión mi querida madre.

.- ¿Crees que algún día encuentre a mi Omega?.- Preguntaba con curiosidad mientras sonreía.

.- Claro que si cariño, todos encontramos en algún momento a nuestro destino y será mágica la convivencia como la que tenemos tu padre y yo.- Hablaba mi madre con una felicidad cada vez que recordaba la primera vez que miro a mi padre.

Un momento mágico según ella, amor a primera vista en una noche de primavera cuando el tiempo se encontraba en una temporada de apareamiento apasionado de los propios árboles en una noche profunda y las hojas caían cada día mas rosadas que de costumbre, encontrándolo a el sentado mientras observaba atentamente las estrellas.

- ¿Cómo puedes saber que es tu destino? - pregunte con curiosidad.

- No es necesario conocerlo, solo es oliendo el aroma del viento como usualmente hacemos y el viento te lo dirá -

En ese tiempo creía en esas palabras, tenia la paciencia de esperar a mi destino pero conforme crecía descubrí que ese método no funcionaba ya que con cada buen olor que el propio viento me hacía conocer, su mensaje resultaba ser algo perverso o me decía que esa persona ya tenían a su compañero, de toda mi generación era la única que no encontraba a su destino aún. Y cuando creí tenerlo, todo mi mundo fue moviéndose con lentitud mientras me desintegraba con el tiempo.

- ¡Te dije que no debías creer en un humano- Sonaba la voz de mi padre molesto en mi cabeza.

.- No era mentira - Susurré con un suspiro observando el techo de la caja oscura con tristeza - Estaba segura que el viento me decía que el era mi destino.

.- ¡Tu madre te contaba esas historias tan absurdas para que pudieras creer en ti y fueras una líder fuerte y libre pero abre los ojos la vida no es mágica como ella te lo hizo ver, es cruel y horrenda con mucho peligros! - Gritaba desesperado.

.- ¿y si tal vez si es mi destino? - Preguntaba en voz baja con miedo a su respuesta.

.- Solo por esa posibilidad vamos a proteger a ese débil humano, hija no quiero que quedes como yo después de la muerte de tu madre - Comento dándome un abrazo - Ese joven tiene algo que no me agrada pero si es por ti nuestra manada cuidara de ambos.

Cada recuerdo es una tortura diaria sin embargo este es el poder de la caja, recordar cada error  y arrepentimiento que tienes con el objetivo de olvidar cada sentimiento que tuve durante este tiempo.

Con los ojos cerrados me imagine a esa bella criatura que solía creer que era mi pequeño, sus ojos eran grandes y bellos, sus labios color coral y ese cabello tan claro...

Tal vez todo esto me lo merezco por ser tan cobarde, solo espero que mi luz este sonriendo en cualquier lugar de este mundo sin mi.