Latido.

Capitulo 5

Lagrimal

Estaba tan cansada que ni siquiera sabía dónde estaba, solo se que cai y seguí corriendo cuando me pude levantar.

Aún me seguían y no sabia cuántos hombres eran, me preguntaba ¿como saben donde estoy para no dejar de seguirme?, Alex ya se estaba sintiendo mal.

.- Me voy a desmayar.- Dijo Alex preocupado.

.- No porfavor, ya mero solo falta poco creo...encontremos un lugar para escondernos al menos.

.- Si...si

Los dos seguimos corriendo pero estábamos buscando un lugar para escondernos solo por esta vez.

.- Auch.- Chocamos con alguien.

Abrí los ojos al encontrarme con un lobo rojizo.-
Espera que, ¿ese olor de nuevo?.- Exclamo mi lobo sorprendido.

.- Hay no.- Dije cuando llegaron más lobos preparados para atacarme.

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Corríamos todos juntos como manada, hasta mi padre estaba con nosotros pero otra vez Félix olfateo ese olor a Azucena aunque más fuerte.

Me detuve sintiendo como mi sangre comenzaba a correr por mis venas, fue tan rápido y me sentía ansioso por llegar a ese lugar.

.- ¿Que sucede Abel?.- Pregunto Liam.

.- Me siento raro.- Comente haciendo un sonido fuerte con la nariz al intentar sacar el aire, sin poder controlar mi cuerpo corría hacia donde nos dirigíamos solo que esta vez Félix tenía tanta prisa y corrimos mas rápido que los demás.

.- ¡Esperen !!.- Gritaban todos detrás de mí.

.- Azucena Azucena....- Repetía Félix apresurado.

Y cuando invadió fuertemente ese aroma en mis fosas nasales fue cuando chocamos con un gigante lobo oscuro.

.- Hay no.- Dijo ella al ver a mi manada.

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.- ¡¡ABEL ALEJATE DE ELLA!!.- Gritaba mi manada,

Con ira observaba fijamente al alfa de esos perros rabiosos de pelaje rojo, el que me metió en esa estúpida caja.

.- Así que aún vives.- Comente riéndome.

.- Y tu veo que has escapado.- Dijo aquel lobo a lo lejos mientras gruñía.

.- La verdad si y si no me dejan en paz puede que alguien salga herido.- Solo quería escapar de ahí, Alex estaba apunto de desmayarse.

.- ¡¡SOBRE MI CADÁVER!!.- dijo con ira aquel lobo rabioso.

.- Esa palabra lo acaba de decir el supuesto alfa de mi manada y pude salir con la mía así que no creo que puedas ganar.- Dije enterrando las uñas a las hojas que estaban en el suelo.