Creo que me gusta.

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Capítulo 3

Creo que me gusta.

Unos golpes contra la madera de la puerta se hicieron sonar haciendo que el pequeño Loki que aún se encontraba en la cama se despertara con lentitud, estaba sobre su cama entre las suaves sabanas verdes que seguían cubriéndolo por completo su cuerpo desnudo.

Alcanzo a levantar un poco su cabeza de la almohada en la que estaba recargada, y por unos momentos se sintió desconcertado por donde estaba, reconoció su cama en poco y luego de esta y con ese dato que estaba en su habitación, por un momento pudo pensar que todo estaba bien, pero ese pensamiento fue completamente abarcado por un dolor que se hizo presente en la parte baja de su cuerpo.

Se sobre salto asustado por los acontecimientos que empezaban a abarcar su mente sobre la noche anterior, hubiera pensando y siguiéndose reclamando por lo ocurrido en su habitación y en su cuerpo si no fuera porque los toques en su puerta se hicieron más sonoros, lo que hizo que Loki volviera a la realidad.

-Pase- dijo sin levantarse de su cama.

-¿Loki?- pregunto su madre Frigga asomando la cabeza .

-Buenos días madre- saludo Loki alzando las comisuras de sus labios esperando que luciera como una sonrisa.

-¿Te encuentras bien hijo?- pregunto Frigga obedeciendo su instinto maternal que le decía que Loki no se encontraba bien.

-Yo...- comenzó a decir Loki sin sentirse completamente bien al contarle lo que había sucedido- No sé por dónde empezar.

-No tienes que decirme si no quieres- le comento su madre con voz dulce- ¿Puedo pasar?

Loki asintió y vio cómo su madre caminaba hacia el borde de su cama para poder sentarse.

-Dime- dijo esperanzada sobre que su hijo pudiera tenerle la suficiente confianza como para contarle sus problemas, bien sabía que Loki era muy reservado en ese asunto y que nunca había querido hablar con ella pero esperaba ansiosa el día que Loki se abriera y pudiera hablar de madre a hijo, claro, sin tener que presionarlo.

-Yo... creo que hice algo malo- comento Loki desviando la mirada- y no sé cómo solucionarlo.

-Bien- dijo Frigga, fue lo único que pudo decir ya que esta se encontraba impresionada, nunca desde que Loki se encontraba en Asgard había causado algún problema, Loki era el hijo que se sentía a gusto con un libro y un lugar tranquilo para leerlo y Frigga respetaba eso por ello no podía imaginarse a Loki haciendo alguna travesura.

-Lo peor de todo es que...- dijo Loki dejando la frase a medias.

Por su cabeza pasaron flashazos de lo que había sido de él la noche anterior, como su cuerpo había respondido a las caricias de su hermano y como se había sentido con eso, de cómo Thor le trato que aunque brusco y violento no le había importado, se sentía confuso sobre muchas cosas que habían pasado en su habitación pero solo podía afirmar una cosa:

-Creo que me ha gustado- dijo casi en susurro completado la frase.

-Bueno hijo si crees que has hecho mal es porque seguramente así fue- dijo Frigga con un tono muy serio que hizo que Loki se sintiera culpable.

-Pero- prosiguió su madre con una sonrisa dibujada en su rostro- a veces uno tiene que divertirse.

Eso animo nuevamente a Loki que asintió feliz, si su madre tenía razón lo que había sentido cuando estaba con Thor era la emoción de algo prohibido que lo hacía sumamente divertido podría equivocarse pero viendo la hermosa dentadura de su madre relucir en una sonrisa lo hacía querer intentar, querer divertirse.

El susurro al final del corredor [Thorki]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora