Prólogo

1K 98 10
                                    

“Lo siento” dijo Hyde en cuanto llego a la mesa donde se suponía tendría que encontrarse con su cita a ciegas. “Pero no estoy interesado en una relación, esto fue algo que mi hermano organizó”


“¿Hm?” El hombre, un muchacho joven aproximadamente de su edad, lo miró con curiosidad. “¿Relación?, ¿De qué hablas?” preguntó el. Por un momento Hyde se preguntó si se había equivocado de mesa, sin embargo estaba seguro de que era aquí ya que reviso tres veces para no decírselo a un extraño, como ahora pensaba que podría ser el caso

“Uh, ¿sabes porque estás aquí?” porque por un momento se pregunto si aquel hombre estaría en la misma situación que él, una cita organizada sin su consentimiento de la cual le informaron una hora antes para no poder rechazar.

“Un amigo me dijo que nos encontraríamos aquí y me presentaría a alguien, sin embargo hace unos minutos me envió un mensaje diciendo que no podría venir” explicó el joven con calma, tranquilo como si no lo hubieran dejado solo con un extraño.

“Supongo que la descripción es bastante acertada…” y ahora se sentía mal dejar al pobre hombre cuando su amigo lo dejo sin piedad con un extraño y mucho menos cuando el otro era demasiado inocente para sospechar que estaba tramando algo. Bueno, por una vez será indulgente con su cita. “Bueno, ¿quieres ordenar algo?” pregunto, alzando el menú del café, y dándole una mirada rápida, eligió algo para beber

“Ya ordené algo” respondió “Soy Licht, ¿cómo te llamas?” Hyde miró a Licht a los ojos. Pensó que el joven, que Licht, era demasiado tímido para comenzar una conversación, o al menos esa impresión le dio, sin embargo, viéndolo desde otro ángulo, parece tranquilo y confiado. Además, le parece inteligente solo dar su nombre, sobretodo porque se trata de un extraño, aun cuando un amigo te lo está presentando.

“Hyde” se presentó con una sonrisa encantadora, aunque solían decir que era espeluznante por alguna razón, algo de que parecía que tramaba dominar el mundo o algo así. “¿Cómo conociste a Mahiru?, si no te incomoda la pregunta”

“Íbamos en el mismo salón desde la primaria, fue en la secundaria que nos hicimos amigos, ¿Y tú?”  En eso llegó la camarera, dejando un batido frente al azabache y girándose en su dirección, pidió su orden. Una vez anotada, se retiró.

“Es el mejor amigo de mi hermano mayor, Kuro” respondió mirando detenidamente a Licht. ¿Ese mechón blanco era natural? Seria grosero suponer que lo es cuando el mismo se enoja cuando le dicen que sus mechones castaños son teñidos pero el blanco era demasiado inusual.

“¿El mismo del que estabas hablando cuando llegaste?” recordó Licht tomando su sorbo de su bebida. Por un momento, Hyde se pregunto cómo reaccionaría Licht cuando se dé cuenta la verdadera razón por la que estaba aquí. Probablemente no sea pronto a juzgar por su personalidad.

“Uh, no, ese fue Lily. Tengo seis hermanos, el mayor y mas grande perezoso, Kuro, mi única hermana, Wrath, el tercero que parece el ultimo, Hugh, el poste con patas, Jeje, y luego estoy yo, el encantador Hyde, y mi único hermano menor, el mismo del que hablaba cuando llegué, Lily” Terminó, bajando la mano con la que fue contando cada uno “¿Tienes hermanos, Lich-tan?”

El mencionado frunció el ceño ligeramente “No, soy hijo único.” Luego, sorbiendo un poco su malteada, decidió seguir con una pregunta ya que esto parecía que se volvía un juego tácito “¿Cuál es tu pasatiempo?”. Mirando al hombre junto a él, con un aspecto que bordeaba entre lo formal y lo informal, se preguntó que clase de cosas le gustarían

“Me gusta interpretar obras de teatro, de hecho, soy parte del club de teatro así que en mi tiempo libre generalmente estoy ahí practicando” admitió desinteresadamente “¿Cuál es el tuyo?”

“Toco el piano. Soy pianista, por ello suelo practicar casi a diario”

“¿Ya eres un pianista?, ¿Cuántos años tienes?” el rubio se veía algo incrédulo

“Diecinueve” respondió Licht, un poco a la defensa con esa pregunta

“¿En serio? Vaya, eres un año mayor que yo… aunque debí haberlo supuesto ya que vas en el mismo curso que Mahiru” murmuró dejándose caer en su asiento, el dramatismo siempre presente “¿Por cuánto tiempo has sido pianista?”

“Once años” admitió sin vergüenza o emoción

Hyde se hubiera quedado sin palabras de no ser porque habla suficiente para dos personas “¡Increíble! En algún momento tengo que oírte tocar”

“Llorarás, después de todo soy un ángel” dijo haciendo una pose genial, y jura que vio destellos en el fondo, pero seguramente fue su imaginación. Aquí fue donde entró su personaje delirante, pensó Hyde en privado.

“¿Si? Entonces purifica a este demonio con tu milagrosa música, Ángel-chan” retó juguetonamente. Licht sonrió en su lugar. Se alegra de tener alguien que siga el juego de esa manera ya que normalmente la gente se queda mirando con la boca abierta o lo ignoran abiertamente. Al mismo tiempo llegó la camarera con la orden de Hyde, un parfait de chocolate el cual miró con una sonrisa hambrienta.

Cita a ciegas (LichtLaw)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora