C A P Í T U L O | 5 |

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No pasó mucho después de ese "inesperado encuentro", cuando Tae a paso veloz se apresuró a llegar al centro a comprarle el regalo a mi abuela.

—___________, ¿A dónde te gustaría empezar para comprarle el regalo? —Ambos paramos en una fuente que se encontraba en el mero centro de la plaza.

—E-ehhhh, no lo sé, ¿Por dónde sería bueno empezar? —Hable viendo detalladamente a cada uno de los locales dudando.

—¿Qué te gustaría regalarle a tu abuela? Yo creo que lo que sea que le regales a ella estará bien. —Lo volteé a ver claramente y por un momento se me formó una pequeña sonrisa de lado.

—Si, si, creo que tienes razón. —Le dije no muy convencida — ¿Crees que sería buena idea ir ese local? —Señalé con mi dedo una pequeña tienda que decía "Sweet Complace Dream", el nombre sonaba tentador para cualquier persona que entrara ahí.

Tae Asintió y nos dirigimos hasta el lugar, una vez que entramos al local vimos una gran variedad de cosméticos, ropa, todo tipo de perfumes caros, rosas envueltas, zapatos, joyas preciosas, en fin... Una infinidad de cosas. Estaba emocionada, sabría que mi abuela le gustaría un poco de todo, pero... No sé si tendría el suficiente dinero para comprarle lo que ella hace varios años atrás me dijo que quería.

Desde ese entonces lo eh buscado con furor.

Tae se separó de mi buscando por su parte el regalo perfecto mientras que yo iba al otro extremo del local a buscar mi parte.

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Pasaron varios minutos, minutos que se me hicieron eternos, creo que pasaron hasta horas incluso, no lo sé.

No encontraba nada que le gustará a mi abuela, todo eran cosas para "Jovencitas" y no creo sinceramente que a ella le guste.

Estaba ya por irme a otro local, cuando me detuve al ver el único estante que no me fijé, al ver que era lo que contenía, al momento quedé maravillada luego luego que lo vieron mis ojos.

¡Si! Quedé hipnotizada al ver una pequeña caja musical con una decoración de unas piedras preciosas que lo adornaban con un hermoso encaje de un terciopelo color vino. Al abrir la pequeña caja, una hermosa melodía empezaba a emitir a través de este con unas pequeñas figuritas bailando en el contorno de la caja.

No dude ni un minuto más y lo agarre para podermelo llevar.

Tal vez sonará muy cliché regalar una caja musical, pero a la abuela no le puedo regalar zapatos, perfumes o joyas. Conociéndola perfectamente sabría que aceptaría el regalo, pero no lo usaría para nada, en cambio una caja musical lo tendría en todo momento.

Pase a la caja para que me cobrarán, estaba formada esperando a que la fila avanzará y cuándo por fin llegó mi turno, pasaron mi pequeña cajita musical en la barra del precio. En el momento de ver el precio plasmada en la pantalla, juraría que por un momento se me iban a salir los ojos por la tremenda sorpresa que me lleve.

¡Madre mía! ¿Tan caro está?

A todo lo que tenía en mis bolsillos, era la mitad de lo que pedían.

Iba a decirle a la señorita de la barra de que me apartará el regalo y que en un rato volvía con el dinero, pero alguien se me adelantó para pagarlo.

Volteé mi mirada a la persona responsable del dinero con la mano extendida y me di cuenta de que se trataba de Tae con un tipo de regalo envuelto al lado de el sujetándolo con firmeza.

—Aquí tienes. —Le entrego el dinero a la cajera y ella con las mejillas rojas lo tomo torpemente. —Ahhh, señorita, ¿Podría envolver la caja musical para llevármelo como sorpresa? —Hablo Tae sonriéndole mostrando todos sus dientes. La chica asintió con la cabeza baja.

Nadie Quiere A Una GORDA Como TÚ [Jimin y Tú] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora