- Acércate más Tae - pasa una mano por su cintura y le acerca un poco - tranquilo, a Army le gusta
- Kookie... - dijo susurrando y mirando al suelo - pero estamos en el escenario
| Advertencia: MUY fluffy.
Historia terminada en el capítulo 18. Las p...
Me despierto con Tae entre mis brazos un día más. Hoy es el concierto.
Me levanto sin despertarle y voy al baño para ducharme.
Cierro los ojos y canto para mí. Este momento y estar con Tae son mis partes preferidas del día.
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Cuando termino veo a V esperando con el albornoz.
– Todo tuyo – digo mientras me acerco a él
– Gracias – se levanta y cuando pasa por mi lado le abrazo poniendo mi cabeza en su cuello – ah ah ah, está frío – se queja
Sonrío al ver su reacción.
– Yo ya voy saliendo, date prisa si no te volverán a quitar el sitio en el coche – digo en referencia a lo que pasó hace unos días Taehyungie
– ¡Pues no entres sin mí jope! – me grita desde el baño
Salgo de la habitación y suspiro.
Me siento muy feliz. A pesar de que últimamente no hemos tenido mucho tiempo para hablar.
Siento que cada noche, en sus brazos, descargo toda la soledad y estrés del día.
TaeTae ha estado muy cariñoso conmigo, siempre lo ha sido pero estos días siento que quizás podría gustarle un poco.
– Buenos días hyungs – saludo a los que están desayunando
– Buenos días Jungkookie – Jhope se levanta para darme un abrazo – ¿preparado para hoy? – sus ojos brillan de ilusión
– ¡Claro!
Sigo hablando con todos haciendo tiempo para desayunar con Tae.
– Buenos días – V corre hacia nosotros – ¿llego tarde? ¿me da tiempo a desayunar?
– A ver, llegas el último como de costumbre, pero sí, te da tiempo – responde RM – además JK no ha comido nada aún
– ¡Yo hago el desayuno entonces! – dice Tae
Le acompaño y me siento en un taburete mientras le miro disimuladamente. Hoy se le ve muy feliz ¿le habrá pasado algo? ¿está así por mí? Pero yo no he hecho nada especial.
Me cruzo de brazos, quiero saberlo.
– Jungkookieee
– Oh, Tae, ¿qué pasa?
– Tu desayuno – deja un plato en la mesa y se va al salón con el suyo
– Espera voy contigo
Ambos nos sentamos en el sofá mientras los que ya han terminado tararean las canciones del concierto.
Una vez hemos acabado todos nos dirigimos al coche.
