-Narra Zayn-
Faltan solo 10 días para el desfile, ______ esta alterada como siempre, sale a las 7 de la mañana de su casa y llega a las 12 de la noche. Le dije que eso no le hacía bien a su hijo que se quedara hoy en su casa, pero en vez de ella quedarse me dijo que yo me podía tomar el día, me negué rotundamente, pero ella insistió que Jason me extrañaba y otras cosas, en fin, me encuentro en este instante en la cocina de mi departamento tomando desayuno esperando que fueran las 13:00 hrs. para ir por Jason a la escuela.
-¿No deberías estar trabajando?. —dijo mi mamá entrando a la cocina.
-______ me dio el día libre, dijo que Jason me extrañaba. Sólo faltan 7 días para el desfile, ella está muy alterada y casi no pasa tiempo con Jason.
-Eso le puede hacer mal para su hijo.
-Lo sé, eso le dije, que se tomara 1 o 2 días, pero no me hizo caso.
-Zayn, ¿No le has pedido a _____ un examen?. —la mire extrañado.
-¿Para qué le pediría un examen?
-¿No has pensado que el hijo que espera ella es tuyo?
-No, ella dijo que tenía un mes de embarazo.
-¿Hace un mes no fue su desfile?. —mi mamá tenia razón, hace un mes fue su desfile, y en ese desfile no estaba Cristofer en el país.
-Tienes razón, pero en ese desfile no estaba Cristofer, ella tiene que estar mintiendo, pero... ¿por qué lo haría?
-No lo sé Zayn, pero tendrías que ir al médico donde ella fue y preguntar.
-Sí, eso es lo que haré. —me pare de la mesa, fui a buscar una chaqueta— Gracias mamá, ¿puedes ir a buscar a Jason por mí? no creo que alcancé a buscarlo.
-Claro no te preocupes. —le di un beso en la mejilla.
Baje al estacionamiento, primero iría a la oficina para preguntar cuál es el medico de _____, me baje de mi auto ya que había llegado al edificio, subí por el ascensor.
-Hola. —le dije a una de las secretarias—¿Esta ____?
-No, no está señor Malik, fue a medico ¿se le ofrece algo?
-¿A cuál medico va?
-Está en edificio fleming en el sexto piso, su nombre es Philippe Leroy
-Muchas gracias.
Salí del edificio rumbo a la dirección que me dio la secretaria cuyo nombre desconocía. Llegue a los 5 minutos ya que no quedaba tan lejos de la oficina. Subí y me dirigí a la recepción.
-Hola, disculpe el doctor ¿Philippe Leroy?
-Esta con una paciente, si gusta puede esperar.
Me senté en uno de los sillones, había una que otra persona en la consulta. Espere alrededor de 10 minutos y salió.
-¿Zayn? ¿Qué estás haciendo aquí?
-Te vine a buscar, necesito que me digas la verdad. Vamos a alguna parte.
-No entiendo lo que me quisiste decir, pero vamos.
Nos dirigimos a un café muy elegante, nos sentamos y pedimos dos cortados nada más, esto iba a ser corto.
-Y bien de que verdad estás hablando.
-¿Cuantas semanas tienes de embarazo?
-Un mes.
-No mientas, por favor _____. —dije frustrado.
-¿Por qué te tendría que mentir? es la verdad Zayn.
-Hace un mes Cristofer no estaba en el país, ¿lo recuerdas? era tu desfile. —ella no decía nada.
-Me tengo que ir Zayn, es muy tarde y ya tendría que estar en mi oficina. —se paró nerviosa, la tome del brazo.
-Dime la verdad. —me miro tiro su brazo y se fue.
Tenía muchas probabilidades de que ese hijo fuera mío, pero no sabía cómo le iba a sacar la verdad a _____, ella no me lo iba a decir, y para eso necesitaba la ayuda de Jason. Maneje hasta mi departamento, me baje del auto y subí.
-¡Zayn! hace días que no te veía. —corrió Jason hacia mí y me abrazo.
-¿Cómo has estado?. —despeine su cabello.
-Mejor ahora que te veo, ¿por qué no me has ido a buscar a la escuela?
-He tenido mucho trabajo, con esto del desfile y tu mamá vuelta loca. —soltó una carcajada.
-Ni yo la veo.
-Jason necesito tu ayuda.
-¿Para qué?
-Hoy cuando tu mamá se meta al baño tú vas a ir a su cartera y vas a sacar unos exámenes, seguramente los tiene ahí.
-¿Exámenes de qué?.
-Del embarazo, cuando los tengas me los traes. Yo te pasare a buscar mañana a la escuela.
-No lo sé Zayn, si mi mamá me ve revisando sus cosas me castigara de por vida.
-Por favor Jason.
-Narra Jason-
Esta era mi oportunidad, si yo le hacia ese favor a Zayn, le iba a pedir que me dijera toda la verdad sobre si él es o no mi papá.
-Está bien, pero tienes que prometerme algo.
-Lo que tú quieras.
-Me tienes que aclarar algo que escuche.
-¿Qué cosa?
-Mañana si logro hacerte ese favor me lo dirás, pero no quiero mentiras. —asintió.
-¿Almorzaste?. —me pregunto.
-No, pero Tricia está en la cocina preparándolo.
